La fórmula resistida por los gremios mendocinos para cobrar un 90% de aumento

En Neuquén, los trabajadores del Estado percibieron en el último año un incremento salarial récord. Mientras tanto, en Mendoza se mantienen por debajo de la inflación.

En los últimos 12 meses, los trabajadores estatales de Neuquén acumularon un incremento salarial récord del 90%, a partir de una serie de acuerdos paritarios entre la gestión de Omar Gutiérrez y la delegación provincial de ATE. Mientras tanto, en Mendoza los sueldos del personal del Estado se actualizaron a la mitad, oscilando entre 40 y 45% durante 2021. Ahora bien, ¿esto ocurre porque el Movimiento Popular Neuquino aspira a "reivindicar" el rol de los empleados públicos y la UCR mendocina los "castiga" subiendo los sueldos por debajo de la inflación?

Récord: un gremio de estatales obtuvo un aumento salarial del 90%

En primer lugar, es cierto que los salarios de los empleados públicos de Mendoza subieron por debajo de la inflación en 2021, aunque el Gobierno apuntó a equipararlos con aportes extraordinarios. Sin embargo, si se quisiera replicar aquí la paritaria de Neuquén, sería imposible, pero no por voluntad del Poder Ejecutivo, sino por una realidad que los mismos sindicatos se niegan a modificar. 

En la provincia patagónica la economía ha dado un salto enorme en los últimos años que permitió, entre otras cosas, aumentos récord a los empleados del sector público. Año a año, el Producto Bruto Geográfico (PBG) de Neuquén ha tenido subas promedio de 5%, pero todo lo contrario ha ocurrido en Mendoza, donde por lo general, en la última década, el PBG ha retrocedido (se contempla el crecimiento o caída real del PBG, sin tener en cuenta la inflación).

En otras palabras, mientras que Neuquén registra una mayor actividad económica -y por ende mayor recaudación para llegar a otorgar un incremento salarial del 90% a los empleados públicos-, en Mendoza ocurre al revés. Por ejemplo, en 2017, el PBG de Mendoza cayó 2,1% y en Neuquén subió 2,2%; en 2018, en Mendoza retrocedió 0,51% y en Neuquén aumentó 5,5%; y en 2019, antes del impacto general de la pandemia, si bien en Mendoza se incrementó un 1,53%, en Neuquén dio un salto del 7,47%.

Podría concluirse que existe una fórmula para que un Gobierno provincial tenga la capacidad de mejores acuerdos salariales para los empleados públicos, que en el caso de Neuquén alcanzaron un 90% en un año: incrementar el nivel de actividad económica. Mendoza podría hacerlo, tiene potencial en recursos naturales, pero cuando se ha querido avanzar, han sido los principales gremios de trabajadores del Estado los que se han opuesto.

En diciembre de 2019, cuando radicales y peronistas acordaron la reforma de la legislación minera e impulsar su desarrollo, fueron ATE, Ampros y SUTE los que levantaron la bandera contra la modificación de la 7722. Además de participar en algunas de las marchas de aquella época, algunos de estos gremios incluso ya habían cruzado a San Juan para acompañar reclamos vecinales contra la minería.

Volviendo al ejemplo neuquino, allí la principal actividad económica es "minas y canteras", donde está incluido el petróleo, siendo la explotación de yacimientos no convencionales de Vaca Muerta lo que ha justificado el "salto" de los últimos años. Por otra parte, dentro del PBG de Neuquén, esta actividad representa el 39,4%, mientras que en Mendoza ese porcentaje es de apenas 6,65%. Pero cuando Mendoza comenzó a realizar las primeras pruebas piloto en su porción de Vaca Muerta, también surgieron reclamos desde sindicatos, como Ampros, contra el fracking (sí o sí, la producción de petróleo no convencional es a través de fracturas hidráulicas).

En términos económicos, los trabajadores estatales de Mendoza, o al menos las conducciones de los principales gremios, han hecho foco en demanda sin siquiera contemplar la oferta. Si una provincia no crece en 10 años, ¿qué capacidad tienen sus administradores para mejorar el nivel de vida de los empleados? A lo sumo, podrán aspirar a acercarse lo máximo posible al índice de inflación, y nada más.

Esta nota habla de:
San Luis prohibió la lucha antigranizo y todo tipo de modificación artificial del clima
Legislatura

San Luis prohibió la lucha antigranizo y todo tipo de modificación artificial del clima

La ley prohíbe el uso de cualquier técnica, actividad, mecanismos, sistemas y tecnología destinada a alterar o modificar artificialmente de forma directa e intencional la fase atmosférica del ciclo hidrológico en las etapas de condensación o precipitación, sumado a provocar cambio artificial del clima, sobre el territorio sanluiseño.

Observatorio económico