Tailandia quitó los aranceles para el vino argentino

La Embajada Argentina en Tailandia informó que el Gobierno de este país ordenó la exención de aranceles de importación al vino, que entró en vigor el 22 de febrero pasado. Así lo comunicó la Coviar (Corporación Vitivinícola Argentina).

La entidad señaló que "se estima que estas medidas incrementarán el consumo de vino y a su vez la mayor demanda conducirá a fortalecer las importaciones, teniendo en cuenta que la totalidad de los vinos finos disponibles en el mercado local son importados". 

Como información adicional, se indicó que "dado que los vinos originarios de Chile, Australia y Nueva Zelandia ya eran beneficiados por exención de arancel en virtud de los acuerdos de libre comercio firmados por esos países con Tailandia, los vinos de Argentina y aquellos del Viejo Mundo como Francia o Italia están llamados a ser los más beneficiados". 

Con respecto a la relación comercial en materia vitivinícola, en 2023 Tailandia importó 182.930 litros de vinos fraccionados de Argentina por un valor total de U$S1,15 millones. 

Como mercado representa el 0,09% del volumen total y el 0,17% de la facturación, según datos del INV relevados por el Observatorio Vitivinícola Argentino. 

Además, Tailandia importa vinos de Argentina a un precio promedio de U$S 6,29 por litro, casi el doble de los U$S 3,49 por litro promedio al que exporta la vitivinicultura argentina.

Potencial abierto

La Oficina Comercial de España en Bangkok considera que es un mercado "pequeño", en dodne todavía hay mucho por hacer.

En un informe sobre el mercado del vino en Tailandia (datos 2018 - 2021) advirtió que "el consumo de vino nunca ha formado parte de la cultura gastronómica local por varias razones. En primer lugar, porque Tailandia no es un país productor y, en segundo lugar, debido a la lenta y dificultosa introducción del producto, que se enfrenta a numerosas trabas". "De hecho, se trata de un mercado pequeño y aún en desarrollo", subrayó.

En tanto, un informe de ProMendoza sobre el vino en ese país del sudeste asiático, si bien reafirma aquella observación ibérica, destaca el potencial. "El vino no es una bebida que típicamente forme parte de la cultura gastronómica de los tailandeses. En ese sentido, suelen preferirse otras bebidas alcohólicas como la cerveza o licores blancos locales". 

Pero puso como alerta y oportunidad que "el vino está vinculado a un estilo de vida considerado 'de moda', especialmente en las zonas urbanas, debido a la imagen de alta calidad que transmite". 

¿Quiénes toman vino en Tailandia? "El consumo de este producto en sigue limitado a los expatriados, tailandeses con ingresos medios y altos y turistas".

De todos modos, la decisión de Tailandia representa una puerta más que se abre en un contexto que se muestra, en general, adverso para la vitivinicultura.

ProMendoza indicó que "existe una oportunidad continua para los vinos extranjeros, desde las gamas bajas a los premium, impulsada por una mayor conciencia y consumo de vinos en las clases medias y altas y por el sector turístico. El vino es visto, asimismo, como un artículo de regalo para ocasiones especiales y festividades". 

Asimismo, explicó en un documento de consulta sobre oportunidades en ese país que "el crecimiento de las ventas de este producto está respaldado por una gran y creciente industria del turismo -en Tailandia, los gastos en alimentos y bebidas de este sector son los más altos de todos los países de la ASEAN- y por un aumento del número de restaurantes de alta cocina en Bangkok y en otros destinos turísticos importantes como Phuket, Pattaya o Chiang Mai". 

"Además -señalaron- el vino está ganando considerablemente más espacio en la conciencia de los consumidores locales y es ahora habitual que se sirva en fiestas o eventos sociales, en el hogar cuando se reciben invitados y en los restaurantes para comidas especiales. Actualmente, el consumo de vino se percibe como un signo de mayor estatus social entre los tailandeses".