La estrategia del gobierno para la urgente importación de combustible
El desabastecimiento en las estaciones de servicio acrecientan el malestar social. La liberación de los dólares para el pago de embarques es inminente.
El Gobierno debió apretar el acelerador a fondo esta semana ante una ola de faltantes de combustibles que se fue extendiendo desde el interior del país hacia el área metropolitana, lo que derivó en la decisión de liberar de urgencia unos US$ 400 millones en divisas para destinarlos a pagar importaciones de gasoil, gasolina y naftas.
La explicación del Gobierno para la falta de nafta en las estaciones de servicio
El objetivo es paliar cuanto antes el crecimiento del malestar social ante las dificultades que se presentaron en los últimos días, con un paisaje de largas colas frente a las estaciones de servicio.
Para agravar el escenario, el buen tiempo previsto para este fin de semana decidió a muchos argentinos que viven en el área metropolitana a viajar a la costa o a algunos de los destinos favoritos para el descanso, desde Tigre o Ezeiza, hasta pueblos bonaerenses que están a no mucho más de 100 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires.
En este marco, el ministro de Economía, Sergio Massa, instruyó a la secretaria de Energía, Flavia Royón, a convocar de inmediato a los CEOs de las principales petroleras para definir un plan de acción.
Luego de que se le explicó el cuadro de situación a la funcionaria, que incluyó la salida de servicio de un centro de refino que se pondrá en marcha casi de inmediato, Royón dio la primera buena noticia a los petroleros: Massa dio instrucciones para que el Banco Central libere cuanto antes los dólares necesarios para afrontar el pago de los embarques.
La petrolera estatal YPF tiene tres buques esperando en el Río de la Plata. Sus capitanes tienen instrucciones de no avanzar hacia el puerto hasta que llegue la confirmación de que desde la Argentina se giraron los dólares para abonar cada embarque. A razón de US$ 40 millones por barco, sólo YPF requiere unos US$ 120 millones para destrabar la llegada del combustible. Se trata de dos embarques de gasoil y uno de gasolina, según pudo saber Noticias Argentinas de fuentes del sector petrolero.
En el Gobierno hacen notar, además, que existe un fuerte ritmo de crecimiento de la demanda de combustibles a lo largo del 2023, fuertemente apalancada por una política de atraso de precios de los combustibles en surtidor, lo cual es motivo de preocupación y análisis por parte de las petroleras.