Una diputada quiere que los presos mendocinos cuiden y entrenen a los perros callejeros
Presentó un proyecto de ley para que los perros callejeros sean sometidos a un programa de adiestramiento que, según propuso, estaría a cargo del Servicio Penitenciario.
Ante la gran cantidad de perros callejeros que hay en Mendoza y que representarían un peligro para las personas, una diputada propuso que los mismos sean "rescatados" y enviados a un programa de adiestramiento que dependería del Servicio Penitenciario.
El "hito histórico" que tuvo lugar en la Legislatura
Se trata de la diputada del PRO, Laura Balsells Miró, que básicamente busca que los presos con condenas firmes tengan la posibilidad de participar de un programa de "Cuidado y Adiestramiento Canino", tal como plantea en el proyecto de ley presentado este jueves.
En primer lugar, la diputada señaló que "los animales en las calles pueden generar desde accidentes de tránsito hasta llegar a quitarle la vida a personas y a otros animales. Es por esto que rescatar un perro de la calle es rescatar una vida y anular el sufrimiento que pueda estar padeciendo el animal".
Más adelante, entre los argumentos del proyecto, Balsells Miró manifestó que hay que "darle la posibilidad a personas privadas de la libertad que voluntariamente asistan a perros rescatados del maltrato y el abandono, los cuiden y adiestren presentando un beneficio para ambas partes".
Al mismo tiempo, consideró que "el trabajo de las personas privadas de libertad y los animales es una instancia para recuperar el compromiso con la vida, con la humanidad y sentirse parte de la comunidad nuevamente".
La legisladora sostuvo que esto puede hacer que "las personas tengan una respuesta diferente respecto de su accionar y comportamiento en el interior del penal, al ser parte del Programa de Cuidado y Adiestramiento Canino (PCAC)", y que al mismo tiempo se puede transformar en "una herramienta laboral para su futuro en libertad".
La diputada del PRO afirmó que existen programas similares en Estados Unidos y aseguró que "según estadísticas recientes, el 80% de los presos que han participado en este programa no regresan al sistema penitenciario estadounidense después de cumplir su condena". Y también menciona un caso similar en San Martín, provincia de Buenos Aires.
Uno de los puntos del proyecto de Balsells Miró incluso la capacitación para los presos que quieran participar. Allí, estudiarían "adiestramiento en buenos hábitos", "paseo canino" e incluso "peluquería canina". Su duración sería de seis meses y al finalizar los internos recibirían un diploma.