Desde este martes es optativo el uso de barbijo en Mendoza
A través del decreto 680, firmado por el gobernador Rodolfo Suarez, se dejó sin efecto la norma que establecía desde abril del 2020, la obligatoriedad en el uso del barbijo o protección facial en todo el territorio provincial.
A través del 680, el gobernador Rodolfo Suarez dispuso que en Mendoza es optativo el uso de barbijo o "tababocas" desde este martes 10 de mayo. La medida estuvo vigente más de dos años, ya que se implementó vía decreto en abril del 2020.
La norma indica que se dispone "el uso voluntario de elementos de protección denominados prevención facial desde la vigencia del presente decreto. No obstante, se recomienda la continuidad de su uso, especialmente para adultos mayores y personas con factores de riesgo".
El documento menciona que "todas las medidas adoptadas como consecuencia de la pandemia, en tanto persiguen asegurar la salud de la población, están sujetas en su vigencia a la situación epidemiológica de la Provincia".
Los considerando señalan también que la situación epidemiológica "ha experimentado un marcado y sostenido descenso en los casos confirmados de COVID-19, por lo que no se percibe que en la actualidad los casos que se registran impliquen riesgo y alerta sanitario. Que los casos se encuentran estabilizados en bajo riesgo epidemiológico, y en consecuencia no hay tensión en el sistema de salud por atención de COVID-19".
Desde el 15 de abril del 2020 el gobernador decretó que el uso de algún tipo de protección facial sería obligatorio en todo el territorio provincial. La medida se tomó en el inicio de la pandemia y en medio del momento más duro de la cuarentena.
El gobierno provincial venía avanzando en este tipo de medidas cuando quitó la obligatoriedad del uso en las aulas desde marzo, siendo uno de los primeros distritos del país en hacerlo.
El decreto no entrega mayores detalles, pero en muchos espacios cerrados como supermercados, shoppings o centros asistenciales, esperaban la publicación de la norma para conocer sus alcances, porque algunos consideraban necesario continuar con su uso. Por lo menos desde las clínicas privadas y otros centros de atención de salud seguirían pidiendo su uso.