Confirman el primer caso de la variante Ómicron de coronavirus en México
El gobierno mexicano confirmó hoy el primer caso de la nueva variante del coronavirus Ómicron en un ciudadano sudafricano que arribó al país el 21 de noviembre y que cursa la enfermedad de forma "leve".
El gobierno mexicano confirmó hoy el primer caso de la nueva variante del coronavirus Ómicron en un ciudadano sudafricano que arribó al país el 21 de noviembre y que cursa la enfermedad de forma "leve".
"El primer caso positivo de la variante Ómicron en México es una persona de 51 años proveniente de Sudáfrica; tiene enfermedad leve y voluntariamente se internó en un hospital privado en la Ciudad de México para evitar contagiar", precisó el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, en un mensaje en Twitter.
El paciente "presentó sintomatología característica de covid-19 leve" seis días después de su arribo, añadió la Secretaría de Salud en un comunicado.
Debido a ello, recibió atención médica en una institución privada el 29 de noviembre y al día siguiente el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE) inició el análisis de su muestra, según las autoridades.
Durante su evaluación médica "se encontraba estable en saturación del 95%", amplió la secretaría.
México es, después de Brasil, el segundo país de América Latina en detectar la nueva cepa informada por primera vez en Sudáfrica, a la que la Organización Mundial de la Salud (OMS) calificó de "muy preocupante", mientras expertos afirman que es de alta contagiosidad.
Más temprano, el presidente Andrés López Obrador se había referido a la posibilidad de un primer caso de Ómicron en México y afirmó que "esto no significa que haya más riesgos", pues las vacunas "sí protegen de todas las variantes".
Durante su conferencia matutina, el mandatario reafirmó que México mantendrá abiertas sus fronteras. La pandemia en el país se estabilizó desde hace un mes y la vida social es cada vez más intensa.
México registra 3,9 millones de contagios y 294.715 muertos, según cifras oficiales, y es el cuarto país más enlutado por la emergencia sanitaria en números absolutos, aunque su tasa de mortalidad por 100.000 habitantes es la vigesimotercera del mundo.