Cómo afecta el calor extremo al rendimiento físico y mental, según la OMS
Entender esto puede ser crucial para optimizar la práctica de deportes y actividades al aire libre, así como para preservar la salud en climas cálidos.
Las altas temperaturas pueden afectar significativamente tanto al cuerpo como a la mente. El calor extremo no solo representa un desafío físico, sino que también influye en nuestras capacidades cognitivas y emocionales.
Mantenerse hidratado y buscar ambientes frescos son medidas esenciales durante las olas de calor. Además, es importante reconocer cómo el calor puede alterar nuestro estado de ánimo y desempeño diario.
Impacto del calor extremo en la función cognitiva, salud mental y rendimiento físico
El calor extremo puede tener efectos adversos en la salud física y mental de las personas. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la exposición prolongada a altas temperaturas puede provocar agotamiento por calor, golpes de calor y exacerbar enfermedades crónicas como las cardiovasculares y respiratorias. Además, el calor puede afectar la función cognitiva, disminuyendo la concentración y aumentando la irritabilidad.
Un estudio publicado en Nature Climate Change encontró una correlación entre el aumento de las temperaturas y el incremento en las tasas de suicidio en Estados Unidos y México, lo que resalta la relación entre calor extremo y salud mental. Asimismo, investigaciones de la Universidad de Harvard indican que los estudiantes que toman exámenes en ambientes calurosos obtienen peores resultados en comparación con aquellos en entornos climatizados.
La exposición a altas temperaturas puede disminuir la capacidad física y aumentar el riesgo de lesiones. El cuerpo, al intentar regular su temperatura, desvía sangre hacia la piel, reduciendo el flujo sanguíneo a los músculos y órganos vitales.
Esto puede resultar en:
- Disminución de la fuerza y resistencia muscular.
- Mayor fatiga y agotamiento.
- Riesgo de deshidratación y desequilibrio electrolítico.
- Aumento de la frecuencia cardíaca y esfuerzo cardiovascular.
El calor extremo también afecta el cerebro y la salud mental.
Las altas temperaturas pueden:
- Reducir la capacidad de concentración y atención.
- Aumentar la irritabilidad y el estrés.
- Exacerbar síntomas de ansiedad y depresión.
- Alterar los patrones de sueño, llevando a insomnio.
Medidas para mitigar los efectos del calor
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) enfatiza la importancia de estas medidas para prevenir complicaciones de salud durante las olas de calor.
Para protegerse de los efectos negativos del calor extremo, se recomienda:
- Permanecer en lugares frescos y con sombra.
- Hidratarse adecuadamente, bebiendo agua con regularidad.
- Usar ropa ligera y de colores claros.
- Evitar actividades físicas intensas durante las horas pico de calor.
- Utilizar ventiladores o aire acondicionado para mantener una temperatura ambiente adecuada.
- Aplicar protector solar para proteger la piel de los rayos UV.
- Tomar descansos frecuentes si se está al aire libre.
TN