El feriado del martes, autobranding político mendocino y posibles sorpresas en comunas radicales

¿No es feriado el próximo martes? Pero como si lo fuera: la Argentina define su continuidad en el Mundial de Qatar y nadie hablará de otro tema, al menos, los que deciden. Algunas voces sostienen que en los ámbitos de gobierno, en los tres poderes de Mendoza, ya están bastante hartos del año. El calor y el raro mundial qatarí son la excusa ideal para no hacer nada importante, tampoco este mes. Y si bien nadie se animaría a decretar asueto por partido de semifinales, sucederá "de oficio".

EN FOCO 364 días más de esto

La política interna, sin embargo, no se tomará respiro. Es increíble cuánto se quieren muchos dirigentes, capaces de mostrarse en las redes sociales en las situaciones más ridículas posibles, con tal de conquistar uno o una docena de corazoncitos en Twitter o algún retuit militante, aunque sea de los empleados.

No saben (o prefieren desconocerlo) que en Mendoza el público de Twitter es de no más de 1.500 personas para la política, de las 40 mil cuentas que hay. Y así, hasta diputados nacionales se mostraron en el partido ante Holanda/Países Bajos encendiéndoles velas a un busto de Maradona... Supersticiones para una pasión y también para gobernar: la irrealidad parece ser la carta magna del accionar de una parte de la dirigencia.

Autobranding

En esta tarea de mostrarse no ahorran recursos... públicos. Viajes al exterior o invitación a visitas solo para tomarse una selfie. Hay una nueva costumbre en Mendoza y es la de asociar marcas para tratar de sacar o capitalizar ventajas.

Es lo que querría lograr, por ejemplo, cualquier etiqueta de vinos con Rolex o alguna otra firma de lujo. Esa sinergia tira para arriba al más ordinario, catapultándolo.

Pasó siempre que, por ejemplo, la dirigencia local se fotografiara con sus referentes nacionales. Pero ya pasó en la última elección que no hubo fotos de candidatos del Frente de Todos/Peronismo con Alberto Fernández, Cristina Kirchner o Sergio Massa. Esa combinación de "marcas" no daba resultados positivos. De hecho, tampoco se los dio no asociarse a sus imágenes.

A los macristas les pasa que sus marcas son divergentes. Omar de Marchi consigue muchas fotos con Horacio Rodríguez Larreta, pero en Mendoza pisa más fuerte Patricia Bullrich, con quien no se arrimaría a posar para una instantánea, en momentos de fuerte interna, acallada por ahora en lo público, pero que brama como lava volcánica en forma subterránea. Hasta que erupcione.

OPINIÓN 10 de diciembre de 2023

Los radicales mendocinos no tienen con quien fotografiarse en Buenos Aires dentro de su partido, entonces lo hacen con todos, por las dudas. Pero además, les gusta traer visitas. Lo muy fuera de lo común es que, por ejemplo, con Julián Strassera, lo trajeron para la foto y lo encriptaron. No hubo oferta a la prensa para dialogar con el hijo del exfiscal del Juicio a las Juntas que aparece retratado en la película "Argentina 1985". Y así sucede con muchas acciones y eventos en los que parece que se invierte tan solo para registrar y eternizar un momento, y compartirlo poco.

Pero ojo: esto del autobranding no pasa solo con los políticos. Algunos empresarios que quieren ser vistos como los más buenos del sector, también traen grandes referentes a Mendoza. Lejos de ofrecerlos a la prensa para que los conozcan a fondo o difundan sus ideas, se les pegan y los meten en burbujas, de modo de volverlos inaccesibles y un recurso exclusivo. Las redes se pueblan de fotos con ellos, como intentando una transferencia de condiciones entre el realmente importante y ellos. Pero no estaría resultando eficaz la traspolación de caracteres.

Camino a 2023: sorpresas

Habrá sorpresas en municipios radicales sin posibilidad de que sus intendentes tengan un nuevo mandato. El caso de la Ciudad de Mendoza es una incógnita, porque si bien le han pedido a Ulpiano Suarez que vaya por un nuevo mandato, no hay resignación, ya que le va bien ahora en las encuestas. Ya le habían pedido a Martín Kerchner en el pasado que aguantara el chubasco de llevar a Rody Suarez, que después sería su turno, que todavía era joven... y le han ido apareciendo competidores al punto de no estar en la danza de nombres, como le habían jurado que sucedería.

En la Ciudad, si no es Ulpiano, ¿quién sería? Hay uno que siempre quiso competir y que estaría dispuesto a aceptar el desafío. Es el ministro de Obras Públicas (pasa como con "Holanda y Países Bajos", el ministerio en realidad se llama ahora "Planificación e Infraestructura", pero es Obras Públicas). Mario Isgro fue quien consiguió los fondos nacionales debido a su cercanía con el Pro en la gestión del tío del actual intendente, cuando se hizo una gran cantidad de obras que catapultaron al sancarlino hacia la calle Peltier. Pero obviamente que la disputa sería monumental en caso de que el actual jefe comunal decidiera competir por la gobernación. En la Capital hubo hasta hace poco un sistema de "turnos" instaurado por el Viti Fayad que se fue rompiendo con el tiempo. Si bien allí la inercia continúa hacia adentro del edificio comunal, en lo público pesa mucho la imagen, por lo que no hay turno reservado que valga, hoy en día.

En Guaymallén todo se decidirá en marzo, en donde esperan que dé su veredicto Marcelino Iglesias. Muy valorado por sus vecinos, como pocas veces ha ocurrido en la historia de ese departamento, su opinión tiene peso específico. Pero es tan grande Guaymallén, que si los que se creen ungidos por el intendente no se dan cuenta de que la unción no es suficiente, sino que además deben tener en cuenta el respaldo de las bases, de los vecinos, afianzarse en su capacidad real de gestión y sobre todo, contar con una imagen y nombre propio, le van a surgir competidores, con o sin el aval de Iglesias. De allí que lo que están buscando los posibles sucesores no debería ser solo una bendición marcelinista, sino bastante más que eso.

En Godoy Cruz, Tadeo García Zalazar la tiene más fácil o más difícil, según como se mire. ¿Por qué? Porque hay muchos y buenos candidatos, con gran vida partidaria y a la vez pública. Siempre hubo muchos pretendientes de gobernar esa comuna, pero ahora el desafío es saber quién será quien incline la balanza hacia uno u otro y en función de qué amores, odios o encuestas. En síntesis: si García Zalazar podrá nominar a su sucesor/a o seguirá pesando la opinión de Alfredo Cornejo, sobre todo ahora que todo indica que vuelve a la candidatura a la gobernación. El problema principal parece ser no el futuro intendente o intendenta, sino el de Tadeo GZ, figura con gran expectativa para ocupar el Sillón de San Martín, pero en la que el "jefe" parece querer volver a sentarse. Estaría ocupado ese sitio, entonces.

El caso de Daniel Orozco es más simpático e irritante a la vez. No para. Consiguió un ghostwriter que le escribiera (bajo su dirección) un manual sobre cómo debe gobernarse un municipio y eso ha puesto los pelos de punta a otros gobernantes de municipio que no han escrito manuales. Lo presentó en Miami y en México, en esa búsqueda de autobranding en la que se encuentra inmersa la política mendocina. Y a pesar de las recomendaciones partidarias de bajar los decibeles está decidido a que este es su momento. 

Su sucesión lasherina sufre por el desconocimiento social de los aspirantes a la intendencia, pero eso no es diferente en Guaymallén, Godoy Cruz o Capital: hay terreno para construir lo que viene. El asunto es la disputa interna entre los cuatro o cinco que creen que deberían ser y no saben cómo se resolverá.

Que no pase como con el Equipo de los Mendocinos

El último congreso partidario definió que la idea es que nadie saque los pies del plato, tensando todo dentro no solo de Cambia Mendoza, sino del propio corazón del frente, la UCR, de modo de que les pase lo del Equipo de los Mendocinos del antiguamente predominante Partido Justicialista.

En aquella oportunidad hubo situaciones análogas a la de los radicales actuales, que llevaron al fin del ciclo con tres gobernaciones: José Octavio Bordón, Rodolfo Gabrielli y Arturo Lafalla. Pero lograron tres períodos con tres nombres distintos, cosa que la UCR tiene que probar si puede alcanzar, todavía. Con el triunfo casi asegurado en 2023, el nombre es el problema.

A los peronistas les quedó afuera una figura que supo ser catalizadora y central, pero a quien no dejaron pasar al primer puesto: el de Jorge Coco López, artífice de aquel "equipo", que solo fue vicegobernador y ministro de Economía, cuando muchos pensaban que el pionero académico de los estudios sobre la "calidad" en los mercados debería haber tenido su oportunidad.

Lo que le pasó a Cambia Mendoza es que ha ido viendo a cada período gobernativo propio, con Cornejo primero y Suarez después, como individualidades. Si bien se habla mucho de la continuidad del godoycrucino en la conducción, el exintendente de la Ciudad imprimió su estilo y ritmo, distinto. Y nadie en toda la fuerza propuso pensar los segundos dos años de Suarez como los primeros dos de los próximos seis años en la gestión, lo que le hubiera dado aliento a una planificación estratégica en torno a la gestión, y no solamente una cuestión de turnos para administrar.

El massismo vuelve a su eje

Hay una encuesta realizada por un radical que no es para difusión pública y que indica dos cosas en el mismo sentido: un avance del intendente de Maipú, Matías Stevanato, en su imagen departamental y un aumento de la confianza en Sergio Massa en Mendoza.

No hay que disociar ambos datos, porque el intendente se está desmarcando hasta de sus mentores en algunas decisiones y tratando de que ñoquis de la política trabajen en algo, como es el caso de un exsenador transpartidario que siguió cobrando salarios del Estado sin solución de continuidad y mendigando que alguien le firme asistencia en el Congreso, en donde tiene cargo atornillado.

Para valorar estos datos hay que conocer que a Massa le iba peor en las encuestas mendocinas que a Cristina Kirchner y Alberto Fernández. Y ahora no. En este caso citado se ve crecientes al radicalismo, Larreta se le acerca a Bullrich y Massa a Milei, lo que debe ser el viento que empuja en su navegación por las aguas escasas y empedradas del peronismo local a dirigentes que se acordaron que tenían simpatía por el tigrense y que no tienen otras que acatar que ahora la que maneja todo en el Frente Renovador (que es un partido que integra el Frente de Todos y no es precisamente el Justicialista), como lo acredita la rivadaviense Gabriela Lizana, con muchos exradicales del este en su equipo y la incorporación del exintendente Rubén Miranda.

Mendoza exporta: los demócratas se "renovaron"

Los demócratas sí que supieron exportar su modelo. Es un desastre cómo se está viviendo la posibilidad de revivir en política, tanto que no sería un simple resurgir sino que aparentan un apocalipsis zombi.

La "marca" nacional del PD no consiguió consenso, pero pudo elegir autoridades 

Rompieron todo lo que estaban construyendo en San Juan, en territorio bonaerense, con el 40% de los votos del país, tienen solo 5 de los 8 mil afiliados que les hacen falta para ser aceptados como partido político y con eso, solo dan señales de vida porque Javier Milei no tiene partido para presentarse y trae consigo un huracán de respaldos, que los demócratas creen que pueden darles aliento vital.

Ahora reconstituyeron en medio de una feroz interna la marca PD Nacional y lograron la continuidad de los principales accionistas de la pyme política: en la conducción están Carlos Balter y Gabriel Llano, los renovadores.