El corcho peronista, los poderes de Balter y el pase de Milei a Juntos por la Libertad, ¡carajo!

Tres bandejas para La Picada de este domingo: las cosas que pasan en la política mendocina que tienen sus condimentos nacionales también.

Equipo Memo

Vuelve uno que nunca se fue: aunque llegue el diluvio, flota

Sergio Massa tiene grandes posibilidades de ganar las elecciones, algo que antes de votar para presidente no se creía tan así. Ahora, con los resultados en la mano, se vio que salió primero y que a muchos no les molesta tanto como se presumía el paso de Los Fernández por el poder, a pesar de las críticas que se le hagan al actual gobierno nacional, las sinceras y las exageradas, aun ante la calificación de que es "el peor gobierno de la historia".

En ese camino, la disputa dentro del peronismo es por permanecer en pie. En Mendoza, por convertirse -como ya lo ha contado La Picada en otras ocasiones- en intermediarios o "corresponsales" de Massa.


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En su reciente visita, fiel a su estilo, abrazó a todos, porque los necesita. Y hasta buscó y consiguió una foto con el gobernador Rodolfo Suarez, ya que busca conquistar el voto de los radicales. Para conseguir que el mandatario provincial posara, tuvo que traer más rápido que un bombero ayuda para satisfacer a los damnificados por los incendios provocados por el viento Zonda.

Pero apareció en escena alguien que, si bien nunca se fue, permanece en bambalinas, tomando decisiones dentro del peronismo, digitando candidaturas y administrando lo que les queda. Se trata de Carlos Ciurca, a quien nadie ha logrado jubilar y tampoco le niegan capacidad de mover la cintura de acuerdo a las circunstancias. Lo raro fue que si bien la discreción ha sido su marca, su esposa, la legisladora provincial reelecta Verónica Valverde, difundió en las redes un abrazo entre quienes parecen ser dos caras de la misma moneda: Massa y Ciurca:

Se lo ve posar, contento, conforme con el momento, cual Alberto Fernández toqueteando a Joe Biden o cualquier otro presidente. De tal forma que puede interpretarse que hay allí un mensaje, que está para ser descifrado todavía, y posiblemente tenga que ver con la puja por la representación del massismo en caso de que el ministro de Economía se asiente en el Sillón de Rivadavia. La fila es larga, pero se sabe: Ciurca, como un corcho, es capaz de flotar aun después de haber sido hundido.

Ahá, los radicales quieren fiscalizar: pero, ¿a quién le harán un favor y le pedirán otro?

Los partidos que no participan en el balotaje no pueden poner fiscales en las escuelas el día de la elección. Punto.

Se sabe que si fuera por Gerardo Morales, le pediría los poderes que acreditan a sus fiscales directamente al peronismo de Sergio Massa. 

Pero, ¿qué pasa con el resto de los radicales, que han recibido claramente el mensaje en las urnas de ser "oposición"?

En Mendoza la gente de Luis Petri lo hará sin problemas, porque están en la vía Patricia Bullrich de integración con La Libertad Avanza. De hecho, se vio al actual subsecretario de Salud y ex precandidato a intendente de Godoy Cruz, Oscar Sagás, reunido con "su gente" y prometiendo fiscalizar en favor de Milei.

Vamos a dejar todo en esta recta final, como sabemos hacer l@s Peronistas. Nuestra Patria merece un Presidente de Unidad Nacional para que Gobierne la transformación y no el odio!!! pic.twitter.com/iSltyMLYZA— Veronica Valverde (@VeroValverdeMza) November 4, 2023 Se lo ve posar, contento, conforme con el momento, cual Alberto Fernández toqueteando a Joe Biden o cualquier otro presidente. De tal forma que puede interpretarse que hay allí un mensaje, que está para ser descifrado todavía, y posiblemente tenga que ver con la puja por la representación del massismo en caso de que el ministro de Economía se asiente en el Sillón de Rivadavia. La fila es larga, pero se sabe: Ciurca, como un corcho, es capaz de flotar aun después de haber sido hundido.Ahá, los radicales quieren fiscalizar: pero, ¿a quién le harán un favor y le pedirán otro?Los partidos que no participan en el balotaje no pueden poner fiscales en las escuelas el día de la elección. Punto.Se sabe que si fuera por Gerardo Morales, le pediría los poderes que acreditan a sus fiscales directamente al peronismo de Sergio Massa. Pero, ¿qué pasa con el resto de los radicales, que han recibido claramente el mensaje en las urnas de ser "oposición"?En Mendoza la gente de Luis Petri lo hará sin problemas, porque están en la vía Patricia Bullrich de integración con La Libertad Avanza. De hecho, se vio al actual subsecretario de Salud y ex precandidato a intendente de Godoy Cruz, Oscar Sagás, reunido con "su gente" y prometiendo fiscalizar en favor de Milei.Sagás, Bataggión y otros bullrichistas que fiscalizarán para Milei.

Sagás, Bataggión y otros bullrichistas que fiscalizarán para Milei.

Pero el asunto es que aquí el "dueño" de la marca Milei, más allá de los libertarios, es el Partido Demócrata de Carlos Balter, Gabriel Llano y sus familias. De tal modo que los radicales que vayan a fiscalizar le estarían haciendo un bien "al país", si se quiere, pero sobre todo un favor a esos dirigentes. Y a la vez, tendrían que pedirles otro: que los acrediten como fiscales.

Nadie ve a Cornejo "rendirse" ante la casta anticasta del PD. Pero hay un puente hacia ello: el legislador macrista, amigo de Bullrich y también de los radicales, expresidente del INV, Enrique Thomas. 

De todos modos, no hay un gran entusiasmo en la dirigencia por militar una neutralidad no tan neutral y una vez más será la sociedad la que decida dar el paso al frente sin la tutela de intermediarios al buscar acompañar a Milei en la búsqueda de transparencia electoral. El daño colateral que ven los radicales es que ante su situación "rara", la gente encuentre en sumarse a las huestes del PD un atajo sin tanta complicación ni prejuicio.

El día en que Milei se pasó a Juntos

Al candidato libertario se le fueron unos cuantos legisladores electos antes de que eligieran a su líder como presidente. Era previsible que estas negociaciones sucedieran después, teniendo en cuenta la debilidad institucional de La Libertad Avanza, una fuerza que preside la mamá de Milei y que dirige la hermana del candidato.

Pero pasó antes, disconformes con el acuerdo con Bullrich.

Lo que se ve desde adentro es que el que se fue es Milei. El mismísimo día en que quedó parado en el balotaje frente a un Massa que salió primero, su discurso cambió y habló muchas veces de "juntos" y de "cambio".

Las gestiones de Mauricio Macri solo fueron la frutilla del postre que ya venía saboreando desde hace tiempo, solo que esta vez se la comió en público.

No se sabe qué pasará el 19 de noviembre. Por lo pronto, Massa sigue metiendo miedo con la posibilidad de que todo se vaya al Infierno en el país si gana Milei, como si ahora no estuviéramos caminando ya por el Purgatorio, y cuesta abajo, con las brasas como baldosas.

Y el problema de los libertarios es que parece un grupo de gente que cree que tiene muy buenas intenciones, pero todas diferentes, a veces contradictorias. Viven un fenómeno parecido al de las izquierdas: se pelean por ser más ideologistas y se dividen cual células en plena expansión. Ese es su riesgo. Al mismo tiempo, ven a todo lo que tiene experiencia en política -tal el caso de Juntos por el Cambio- como un cuerpo extraño que se los puede comer.

Pero si no estuvieran tan exaltados todo el tiempo, podrían explorar convertirse en una analogía de lo que fue la transformación de Carlos Menem, desde aquel "caudillo de los llanos" patilludo y sospechoso que exclamaba "¡Síganme!", al aliado vestido a la moda y peluqueado que terminó metiendo a la Argentina en el Primer Mundo, digamos, y participando de la Guerra del Golfo de George Bush (ver aquí).

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