Jorge Bergoglio, Francisco: "Nunca estuve afiliado al partido peronista"
Reproducimos aquí el análisis de Hernán Reyes Alcaide del libro de próxima aparición, El Pastor, escrito por Sergio Rubín y Ángela Ambrogetti sobre Jorge Bergoglio, el papa Francisco.
En un nuevo libro escrito junto a Sergio Rubin y Angela Ambrogetti, quienes en 2020 hicieron el imprescindible "el jesuita" sobre el entonces cardenal Jorge Bergoglio, el ahora papa Francisco rechaza por primera vez de manera firma y contundente las acusaciones en su contra de ser un "Papa peronista" y revela su apoyo a "la presencia de una pata reguladora, que es el Estado" para el funcionamiento de la economía.
"Nunca estuve afiliado al partido peronista, ni siquiera fui militante o simpatizante del peronismo. Afirmar eso es una mentira", sentenció Bergoglio sobre ese movimiento político en el libro titulado "El Pastor" que aparece esta semana en Argentina editado por Ediciones B.
"Tampoco estuve afiliado a Guardia de Hierro como dijeron algunos. Repito, la presencia de esa agrupación en la universidad y mis escritos sobre la justicia social llevaron a que se dijera que soy peronista. Pero en la hipótesis de tener una concepción peronista de la política, ¿qué tendría de malo?", se preguntó luego el Papa sobre otra de las ramas del peronismo con la que sus críticos suelen emparentarlo.
En ese marco, en medio de un repaso por los grandes temas de su pontificado y por las miradas que ofrece sobre temas como la lucha contra los abusos o las reformas de la Curia, el Papa responde a quienes lo acusan peyorativamente de "hacer política".
Sí estoy haciendo política
"Que sí, que estoy haciendo política. Porque toda persona tiene que hacer política. El pueblo cristiano tiene que hacer política. Cuando leemos lo que decía Jesús comprobamos que hacía política", defendió.
El Papa es bueno; el Papa es malo: el Papa es Papa
"Ante todo aclaro que todo lo que digo está en la Doctrina Social de la Iglesia, que comenzó a desarrollarse hace más de un siglo con León XIII en su encíclica Rerum Novarum. No condeno el capitalismo", argumentó luego el Papa.
"Tampoco estoy en contra del mercado, sino a favor de lo que Juan Pablo II definía como "economía social de mercado". No de una mera economía de mercado. Repito lo que él decía. Esto implica la presencia de una "pata" reguladora, que es el Estado, que debe mediar entre las partes. La mesa económica con dos patas no funciona. Con tres sí: el Estado, el capital y el trabajo"
"Tampoco estoy en contra del mercado, sino a favor de lo que Juan Pablo II definía como "economía social de mercado". No de una mera economía de mercado. Repito lo que él decía. Esto implica la presencia de una "pata" reguladora, que es el Estado, que debe mediar entre las partes. La mesa económica con dos patas no funciona. Con tres sí: el Estado, el capital y el trabajo", explicó.
En esa línea, Jorge Bergoglio sostiene que su mirada hacia los pobres proviene básicamente de "lo que hacía Jesús y lo que dice el Evangelio".
"Hay mucha gente que se muere de hambre"
"No es que me crea uno de sus discípulos, pero con todas mis limitaciones y pecados procuro ser fiel a su mensaje. Con respecto a que estamos mejor que antes, me pregunto cómo estaríamos antes. En lo que creo que todos podemos coincidir es que aumentó la concentración de la riqueza y la desigualdad. Y que hay mucha gente que se muere de hambre", desarrolló en ese sentido
Según el Papa, en el medio de elogios a políticas de microcréditos o de las nuevas formas de desarrollo que tienen al hombre y no al dinero en el centro, "el problema económico más acuciante hoy es que priman las finanzas".
Papa Francisco, ¿santo o demonio?
"En cierta forma, el capitalismo es algo casi del pasado. Por supuesto que una cosa es el ahorro, la inversión, que son tan importantes para producir y generar trabajo. Y otra es la especulación, que es como el sarampión del ahorro y la inversión. Especular es una enfermedad que perjudica siempre a otro", criticó.
De acuerdo al Papa, según su pensamiento en uno de los 19 capítulos de la obra, "no hace falta que diga que desde una computadora, apretando botones, se ejecutan decisiones que terminan siendo muy dañinas para la economía de mucha gente".
El 'rechazo de personas de la Iglesia' a los gays
El libro amplía también la visión del Papa sobre la relación de la Iglesia con las personas homosexuales. "A quienes sufrieron el 'rechazo de la Iglesia' (por su condición homosexual), les haría saber que no es el 'rechazo de la Iglesia', sino de 'personas de la Iglesia'; la Iglesia es madre y convoca a todos sus hijos", sostuvo.
Para Francisco, además, "en el caso de los padres (con un hijo gay), ignorarlo, ni qué hablar apartarlo, es una falta de paternidad y maternidad".
Entre los temas de su pontificado que aparecen narrados en la obra, el Papa se refirió también a la lucha contra los abusos por parte de miembros del clero que impulsa desde su asunción y consideró que "el abuso sexual no solo es un delito, sino un delito grave cuyo daño es irreparable y obviamente demanda una severa condena".
"El proceso (para combatirlo) que se inició dentro la Iglesia antes de mi elección está teniendo resultado. El informe que la Justicia de Pensilvania difundió en 2018 detectó poquísimos casos desde 2002", resaltó.