Eliana Bórmida en el Banquete de Platón
La escritora Marcela Muñoz Pan trae el nombre enorme de la arquitecta Eliana Bórmida a su "Columna líquida" que, esta vez, vuelve al vino y con poesía.
Si hay espacios conquistados por la Arq. Eliana Bórmida, son las bellezas de los cimientos vitivinícolas construidos en varias bodegas de Mendoza, siendo la pionera, la mujer mendocina con ese valor agregado a la cultura del vino y su belleza entre ángulos rectos, terrenos áridos, estructuras de cálculo y planos imaginarios que luego se plasman, como una celebración, en la tierra. Entre sus obras arquitectónicas distinguidas están: Salentein, O. Fournier, Séptima, Vistalba, Atamisque, DiamAndes.
Eliana Bórmida ahora fue distinguida en Potosí
Eliana además es docente e investigadora universitaria donde su interés principal son las líneas patrimoniales de la cultura del vino en Mendoza, dejando plasmado en su trabajo de campo, en su arte y técnica de proyectar y diseñar, esos espacios acogedores, funcionales y sostenibles como si comprendiera cabalmente, el espíritu de cada uno de los integrantes que ocuparán una casa, un edificio o una bodega.-
En su estudio de arquitectura, interiorismo y diseño, Bórmida & Yanzón, se abren las puertas de la imaginación, la precisión, el buen gusto con líneas puras que van escribiendo entre montañas, cantos rodados, nieves impolutas, los colores neutros de la elegancia, la identidad regional que le da la bienvenida a los ojos no sólo mendocinos, sino nacionales e internacionales en las cavas de lo que permanecerá su distinguido sello personal, como en el banquete de Platón que busca la belleza como esplendor de la verdad, la belleza para trascender en el tiempo y en la memoria de esas estructuras que desarrolla como si conociera de antemano el espíritu de las necesidades humanas, ese espíritu que va de la mano de lo poético, es decir, la belleza.
Eliana Bórmida primera mujer arquitecta de Mendoza que ha diseñado más de 30 bodegas, liderando el ranking a la excelencia en este tipo de construcciones, de obras magnánimas donde ir a tomar un buen vino a una de las bodegas que ha construido, no queda en un momento de gozo simplemente o un recorrido turístico más, más bien y profundamente, queda impregnado en todos los sentidos en ese banquete virtuoso que crea Eliana entre la naturaleza mendocina, ríos, arena, montañas, inventando y reinventando el maridaje perfecto en los planos cosmopolitas que reflejan luz en esos espacios en movimiento con la punta de su lápiz acerado edificando lo extraordinario.
Tierra
Sin tus manos femeninas
estas hileras benditas
no conocerían el amor
amor que suda
bajo perfumes elegantes
amor de mixturas ancestrales
como si nunca hubiera olvido
sin tus manos femeninas
el fruto del banquete
no nos esperaría
*del libro "Ese vino que vino por mí"