Cómo el Gobierno disminuirá la cantidad de niños que esperan ser adoptados
La subsecretaria de Infancias, Adolescencias y Juventudes Verónica Álvarez se refirió al nuevo paradigma que se implementa al momento de sacar a un niño de su entorno familiar y cómo se trabaja para evitar que caigan en residencias alternativas durante un tiempo prolongado.
Este jueves, el gobierno de Mendoza inauguró una nueva residencia alternativa para niños y niñas con el objetivo de continuar disminuyendo la población en los hogares. La subsecretaria de Infancias, Adolescencias y Juventudes Verónica Álvarez habló con Gabriel Conte, Ana Belén Martínez y Ariel Fernández Lavilla en "Tenés que saberlo", por Radio Post 92.1, y comentó la mirada que se tiene desde el Poder Ejecutivo según los nuevos paradigmas para poder abordar estas situaciones.
"Nosotros en esta gestión estamos trabajando para que los niños, niñas y adolescentes puedan vivir en entornos familiares seguros y libres de violencia. Es nuestra idea de trabajo y es a lo que apuntamos. Lo que inauguramos es un nuevo hogar, nuestra política de infancias apunta a que los lugares donde las infancias ahora viven, que están a cargo del Estado, estén en condiciones óptimas. Había algunos hogares donde habían muchos niños, niñas y adolescentes que vivían en condiciones de hacinamiento, por eso junto al ministro Tadeo García Zalazar pensamos un plan estratégico desde el año pasado para poder abrir nuevas residencias y que los niños estén en lugares cómodos y adaptados a sus necesidades", explicó Álvarez.
La subsecretaria señaló que desde el primer gobierno de Cornejo se trabaja en eliminar lo macrohogares y convertirlos en microhogares que se encuentren insertos en la comunidad donde viven las infancias y adolescencias: "Hemos trabajado muy bien entre el Poder Legislativo y el Judicial para achicar los ingresos de los niños, niñas y adolescentes a nuestras residencias alternativas. Esto es un gran trabajo que hemos hecho los tres poderes del Estado. No quiero dejar de lado a los equipos de trabajo de la DGP. Hoy tenemos 642 niños, niñas y adolescentes que viven en las 44 residencias alternativas. El año pasado, en enero de 2024, teníamos 950".
En esa línea, la funcionaria señaló: "La verdad que es mucho por eso también hemos implementado el programa de Acogimiento Familiar para que los niños con los que tenemos que tomar medidas de protección y tenemos que separarlos de su entorno familiar, porque no es seguro en este momento, abrimos este nuevo espacio de acogimiento familiar para que estos niños puedan vivir en entornos familiares porque consideramos que es el mejor lugar donde se tienen que desarrollar".
Álvarez explicó que en el 2005 se creó la ley nacional 26.061 que pasa al Poder Ejecutivo la toma de medidas de protección y en 2018 la ley provincial 9.139, que crea los ETIs (Equipos Técnicos Interdisciplinarios), que son quienes toman esta medida a nivel provincial: "Solamente los chicos que ingresan a nuestros hogares son por tres situaciones: por violencia física, por violencia sexual y por negligencia. Solamente por estas tres situaciones. Nosotros consideramos que hay situaciones donde se puede revertir estas cuestiones, donde se han vulnerado los derechos de los niños y donde trabajamos con los padres biológicos, con el entorno familiar, con la red familiar extensa y con la red comunitaria para que estos chicos puedan volver con su familia. Cuando no hay posibilidad, cuando se agotaron todas las instancias, se pasa a la situación de adoptabilidad".
La funcionaria explicó que el cambio de paradigma lleva a que antes se tomaran medidas tutelares y ahora esas medidas sean de protección: "Nosotros, como equipos técnicos interdisciplinarios, lo que menos queremos es sacar a los niños de su entorno familiar. Pero cuando están vulnerados sus derechos, es el Estado el que tiene que intervenir, proteger y restituir esos derechos. Y ahí no nos podemos correr de ese lugar y de ese espacio. No hay ningún niño que ingrese a nuestros hogares por una situación de pobreza, de ninguna manera. Eso no lo estamos hablando y tampoco es el espíritu de la ley".
Finalmente, la subdirectora se refirió a la fuga de los menores de la DRPJ (que se encuentra bajo la órbita de la subsecretaría) y señaló la importancia de las cámaras: "El tema de las cámaras es una gestión que hemos realizado con la gestión nueva. Hay cámaras de seguridad en toda la Ciudad de Mendoza, en toda la provincia y obviamente que sirven justamente para determinar cuál fue el error y cuál fue el error humano. Me parece que son necesarias y es a lo que apuntamos. Es una herramienta necesaria porque anteriormente no la teníamos y ahora sí podemos acceder a esas cámaras y saber quiénes son las personas y los empleados negligentes que no cumplieron con su tarea y con su responsabilidad y tendrán consecuencias", concluyó.
