Trabas de la DGE para el funcionamiento de un Cens a distancia
Se trata del instituto Balzac ubicado en la calle Mitre, en pleno centro. El propietario del lugar sostiene que la Dirección General de Escuelas les pone trabas constantes y que buscan que cierre sus puertas.
El dueño de un instituto de educación a distancia asegura que la Dirección General de Escuelas le pone trabas para seguir funcionando en Mendoza y cree que si la situación no mejora deberán cerrar sus puertas.
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Se trata del Cens Balzac que comenzó a funcionar en la provincia en 2012 con total normalidad. En ese momento, en un inmueble ubicado en el Parque Cívico se convirtió en uno de los primeros centros de educación a distancia, el cual ofrecía finalizar la secundaria a mayores de 18 años en 2 años y con orientación en Economía y Administración.
Los alumnos pueden cursar completamente a distancia y presentándose una vez a mes para rendir el examen.
Ese año consiguieron la habilitación temporaria y al cumplirse dos años la permanente, que tiene una duración de cuatro años.
En 2019, a raíz de la pandemia, la continuidad del instituto estuvo en crisis debido a que todos los centros educativos cerraron y la matriculación disminuyó. Esta situación los obligó a mudarse al inmueble de calle Mitre, donde actualmente funcionan.
"En 2021 comenzaron los problemas administrativos para nosotros y todavía no sabemos por qué", explicó Emilio García, propietario del instituto.
De acuerdo a su relato, desde la supervisión de la DGE realizaron auditorías donde siempre encontraron problemas administrativos que debían resolver.
"Siempre se trató de asuntos menores, tal es así, que hasta nos señalaron la falta de un acento en un papel", explicó.
Asimismo, en medio de la pandemia, a pesar de tener el plan de estudios aprobado, desde Mendoza le dijeron que debía adaptar su proyecto para un Cens y extender la duración de 2 a 3 años.
"Nos costó bastante porque estábamos funcionando muy bien y debíamos que adaptar todo el proyecto, con los docentes y las clases ya filmadas, pero de a poco lo hicimos", confió García.
En 2022 se aprobó el Programa Jurisdiccional de Educación a Distancia para CENS en Mendoza y Balzac pudo adaptar su plan de estudios y fue aprobado por la DGE.
"Nunca encontraron errores en el proyecto educativo, es más, lo pidieron y meses después el gobierno abrió un Cens con un plan de estudios bastante similar al nuestro", contó el hombre, pero agregó que el proyecto nunca fue elevado al Consejo Federal de Educación (Nación) y sigue sin conocer las razones.
A pesar de esto, el instituto siguió funcionando hasta marzo del 2023 cuando tras una auditoría les prohibieron matricular a alumnos durante todo el ciclo lectivo.
"Hace un mes tuvimos una segunda auditoría donde ya habíamos corregido los errores que nos marcaron, pero hasta el momento no tenemos novedades de lo que pasó y seguimos con la prohibición de la matriculación", detalló García quien sostuvo que en 2023 han continuado dictando clases con los alumnos que ya cursaban y sosteniéndose como pueden.
"En promedio tenemos matrícula de 400 alumnos por año y actualmente tenemos 40, con eso tengo que pagar sueldos de dos empleados administrativos y el alquiler del inmueble", confirmó el hombre.
Debido a la falta de respuesta, desde el instituto presentaron un reclamo legal a DGE.
"No nos responden, no nos dicen los tiempos que podrían demorar ni lo que tenemos que presentar. Esto nos pone en una situación muy difícil por los empleados y los alumnos, ya que no sabemos si el año próximo vamos a seguir en la provincia", apuntó y explicó que Balzac debe responden tanto a Educación Superior como a Educación a Distancia y de Jóvenes Adultos.
"Por ahí desde Educación superior nos dicen algo, de Jóvenes Adultos otra cosa y así siempre", explicó.
Balzac fue uno de los primeros institutos de enseñanza a distancia que comenzaron a funcionar en la provincia. Si bien los primeros años lo hicieron sin problemas, García sospecha que el objetivo de la DGE es que cierre sus puertas.
"Para mí sería más fácil bajar los brazos, cerrar e irme a San Juan donde vivo, porque parece que es lo que ellos quieren. Pero no lo voy a hacer porque esto es una injusticia, no hay razones para que no nos dejen matricular a los alumnos. Si tenemos algunos errores administrativos los podemos ir subsanando, pero necesitamos respuestas. Si desde el gobierno hablan de la importancia de la educación, no entiendo por qué no apoyan este proyecto y buscan que cerremos las puertas", finalizó García.