¿Por qué un inversor tan grande como BlackRock entra al mundo del Bitcoin?
BlackRock, que supervisa 870.000 millones de dólares, está sondeando esta nueva voluntad de los inversores de experimentar en las aguas de Bitcoin.
A pesar de la volatilidad que ha mostrado en las últimas semanas, el Bitcoin sigue resultando atractivo para los inversores y ahora atrajo a uno de los grupos más importantes a nivel mundial y que es un viejo conocido de la Argentina.
En medio de otra caída que lo llevo a tocar los US$ 28.845 en las últimas 24 horas, ahora sube hasta superar los US$ 32.000, con lo que en lo que va del año, acumula un retorno de casi 10%.
A pesar de todos esos movimientos que pueden resultar peligrosos para algunos, en el sector financiero se siguen sumando a las inversiones en BTC y el nuevo actor que tiene el mundo de las criptomonedas es BlackRock.
La gestora de inversiones más grande del mundo y con sede en Nueva York, ingresó el miércoles a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos los prospectos de los fondos BlackRock Global Allocation Fund y BlackRock Funds V, en los que se detalló que dentro del portafolio podrían participar de los futuros de Bitcoin.
Según lo que indicó Diario Financiero, la compañía precisó al regulador que "los únicos futuros de Bitcoins en los que pueden invertir los fondos son los liquidados en efectivo que se negocian en bolsas de productos básicos registradas en la CFTC".
BlackRock, que supervisa 870.000 millones de dólares, está sondeando esta nueva voluntad de los inversores de experimentar en las aguas de Bitcoin.
Pero más recientemente, los ejecutivos mostraron una mayor apertura al activo. El director de renta fija Rick Rieder comentó en noviembre al programa Squawk Box del canal estadounidense CNBC que "el bitcoin llegó para quedarse" y afirmó que cree que podría reemplazar al oro por ser mucho más práctico de transportar.
El director ejecutivo Larry Fink, por su parte, indicó que es posible que el bitcoin se convierta en un activo del mercado global, informó CNBC en diciembre, lo que significó un cambio de opinión desde 2018, cuando no consideraba inversiones en criptoactivos.