Razones por las que es un buen momento para adquirir un inmueble

Sostiene la reconocida corredora pública inmobiliaria Fanny Cruz: "Lejos estamos del inversor dispuesto a depositar todas sus expectativas en ladrillos, como sucedía en otras épocas con los sectores del agro. Pero sí podemos volver a hablar de la figura del inversor como actor nuevamente de la escena".

Fanny Cruz

Es una dato de la realidad comprobable e incontrastable que los valores de los inmuebles vienen experimentando un proceso de sinceramiento desde finales del 2018. Tanto es así, que podemos decir que "la brecha" entre las expectativas de un comprador respecto a lo que estaría dispuesto a pagar y los valores de mercado hoy prácticamente se tocan.

 Esto rara vez ocurre, pero venimos de un mercado tan deprimido que es un fenómeno que actualmente observamos. Es decir que los valores de mercado en esta coyuntura, en general, se acercan al valor que el comprador tiene representado en su modelo mental como referencia de lo que debería costar ese inmueble.

¿Lo podríamos llamar un mercado saneado? ¿O sincerado? ¿O tal vez realista? Es notorio destacar que no ocurre lo mismo con los alquileres, que debido a la pésima experiencia dejada por la intromisión del Estado en la negociación entre particulares, plasmada en Ley de Alquileres vigente, como ya es de público conocimiento, los valores de las locaciones están muy por encima de las expectativas de los inquilinos.

Por otro lado, y como contracara de este fenómeno, esta suba en la rentabilidad de los alquileres provocó no sin reticencias (entendida como desconfianza, cautela) que apareciera nuevamente "la figura del inversor". Tímidamente tal vez, pero la realidad hoy nos muestra que hay consultas de inversores. 

Inversores muy puntuales. Interesados por inmuebles que se puedan destinar a alquileres temporarios, o que de alguna manera puedan cumplir un fin específico: ayudar a un hijo, o remodelarlo y ponerlo a producir. 

Lejos estamos del inversor dispuesto a depositar todas sus expectativas en ladrillos, como sucedía en otras épocas con los sectores del agro. Pero sí podemos volver a hablar de la figura del inversor como actor nuevamente de la escena, que claramente había desaparecido al menos en los últimos cinco años .

¿Qué se percibe? A todas luces se siente un fin de ciclo. Esto si bien trae incertidumbre también trae cierta dosis de esperanza, de aire fresco y también tracciona el mercado. Hay sin dudas un mayor número de consultas , de visitas y de reuniones.

Por otro lado los tenedores de dólares -que en definitiva, son los compradores- se dieron cuenta también que en el mundo, no solo en la Argentina hay inflación en dólares por lo que no tiene mucho sentido continuar reteniéndolos a la espera de oportunidades.

¡Las oportunidades suceden ahora!

Es de esperar que con el cambio de gobierno aparezcan los créditos hipotecarios, que de a poquito también empiezan a vislumbrarse y eso será sin dudas otro factor que hará que la demanda crezca promediando el 2024.

Por primera vez después de años sostenidos de caída en los precios de los inmuebles usados terminando el primer semestre de este año se produjo un repunte del precio de publicación de los mismos.

Sin sudas como dijimos al inicio hay varios factores que nos indican que la tendencia a la baja de los precios de los inmuebles tiende a revertirse, pero subrayamos con énfasis el tema de esa brecha respecto de los precios y las expectativas, que como nunca prácticamente se acercan.

Si alguien está dudando respecto a su compra, el momento de invertir ¡es ahora!


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