Martín Redrado: "Hay que actuar con pragmatismo y sin ideología"
El extitular del Banco Central considera que pueden volver algunas actividades productivas, pero es necesario que se hagan controles inteligentes con más testeos.
El expresidente del Banco Central, Martín Redrado, dijo que en este período de crisis sanitaria por la pandemia de coronavirus se debe "actuar con pragmatismo y sin ideología".
En una entrevista con el diario chileno La Tercera, dijo respecto al "aparente" dilema entre cuarentenas y actividad económica, considera que es preciso que el Cono Sur avance en su capacidad de testeo, lo que le permitirá distinguir tipos de riesgo entre los ciudadanos, permitiendo reactivar parte de la actividad.
Aquí las principales definiciones de Redrado en el diario trasandino:
Cuarentena total o parcial
-La clave para resolver este aparente dilema entre economía y salud es el testeo. Hay que avanzar con diligencia en la capacidad de testear a la mayor cantidad de personas posible, de manera que podemos determinar poblaciones de mayor, mediano o menos riesgo.
-A mí juicio, lo ideal es que las cuarentenas sean para aquellos qué son más vulnerables, considerando no solo a las personas de mayor edad, sino que a todos los contagiados, recordando que este virus en muchas ocasiones es asintomático.
-Necesitamos cuarentenas inteligentes que permitan volver al trabajo a quienes no son vulnerables y eso lo podemos conseguir con la información que no ofrecen los testeos.
-Está claro que los restaurantes, los espectáculos deportivos o de entretención no podrán funcionar hasta que se aplana la curva, el virus mute y se desarrolle el tratamiento para contenerlo.
-Uno como hacedor de políticas a veces se ve obligado a tomar decisiones sobre información imperfecta, pero la idea es poder avanzar en recabar información y en este caso eso se logra con más y más testeos.
La reacción de América Latina
-América Latina ha tenido suerte en el sentido que hemos podido ver lo que ha ocurrido en otras regiones del mundo, lo que nos ha dado tiempo para prepararnos y establecer algo que parece básico.
-La tensión ahora está en cómo la cuarentena permite organizar nuestros sistemas de salud, que en algunos casos son universales, pero probablemente son más vulnerables en relación a Europa.
-El peak de la pandemia todavía no ha llegado a la región, probablemente lo tengamos en el Cono Sur a principios y mediados de mayo, así que todavía no hemos pasado la prueba de fuego.
-Por experiencia considero que los programas de emergencia deben tener tres características. Contundencia es la primera, que sobrepasen las expectativas, hay que sobre reaccionar. Si la gente espera una ayuda que represente el 2% del PIB, que se despliegue el 4%. Hay que sorprender de manera positiva. Lo segundo es que la ayuda se entregue a través de instrumentos simples, fáciles de implementar. Lo tercero es la rapidez en su ejecución.
- El paquete que Brasil ha puesto sobre la mesa es de un poco más del 2% del PIB, lo que parece razonable en principio. Aquí hay que actuar con pragmatismo y sin ideología. En este contexto todos somos keynesianos, siempre de manera racional, planteando que este es un período para hacer políticas anticíclicas.
-En ese sentido, Pualo Guedes (ministro de Hacienda), para venir de Chicago ha tenido una postura bastante pragmática, ha ido en la dirección correcta.
-En tanto, en la dimensión política, Brasil ha decidido no ir a la cuarentena o tener una cuarentena bastante laxa. No soy un especialista en lo sanitario, pero está claro que el presidente Jair Bolsonaro ha ido a contramano del resto del mundo. Lo más recomendable sería cuarentenas inteligentes en base a testeos.
La región frente a la situación entre China y EEUU
-Nuestra región tiene tres dependencias notables: precio de commodities, costo del dinero y remesas. Todos estos canales se han visto afectados, aunque en el caso en el caso de las materias primas son las industriales las que se han visto más golpeadas, por la crisis primero en China y después en el resto del mundo desarrollado.
-La cuarentena no ha impedido e incluso en algunos casos ha aumentado el consumo de alimentos, por lo que la soja o la carne se han visto favorecidos. Aunque no se puede descartar un rebrote en China, hasta el momento vemos que va a tener un crecimiento positivo en el segundo semestre, mientras que en Estados Unidos anticipamos el peak de la pandemia lo vamos a tener en los próximos 60 o 90 días, por lo que en su caso el repunte lo anticipamos para el último trimestre.
-También hay que tener presente que quedaremos con condiciones financieras excepcionales. Vamos a tener tasas de interés en mínimos por un largo tiempo y esto favorecerá a los países que hayan salido mejor parados, con mayor solidez macroeconómica.