Mendoza brilla bajo las estrellas de la Guía Michelin
Juan Marcelo Calabria nos mete de lleno en el mundo de la gastronomía premium, que en Mendoza adopta características especiales por su maridaje con el vino, del que somos productores. Las Estrellas Michelin como protagonistas, este lunes.
Este próximo 7 de abril, Mendoza será el escenario de un acontecimiento trascendental para el mundo de la gastronomía y por ente su importante impacto en la actividad turística y el enoturismo: la entrega de las Estrellas de la Guía Michelin, una celebración que reconoce a los mejores exponentes de la gastronomía y entrega distinciones a los mejores espacios gastronómicos en todo el mundo, destacando en esta oportunidad el talento gastronómico en Buenos Aires y Mendoza. La ceremonia, que se realizará en un entorno especial: la Bodega Susana Balbo, con nuestra imponente Cordillera de Los Andes de fondo, con la impronta de tradición, innovación y excelencia, reafirmando el lugar de nuestra provincia en el mapa culinario global.
Un poco de historia, acompañada como siempre de una copa de buen vino: desde su creación en 1900 por los hermanos André y Édouard Michelin, fundadores de la empresa de neumáticos que lleva su nombre desde 1889, la Guía Michelin ha evolucionado de ser un simple manual para automovilistas a convertirse en el estándar global de excelencia gastronómica. Lo que comenzó como una herramienta para fomentar los viajes en automóvil, ofreciendo información práctica con mapas y referencias de lugares para comer, descansar y también talleres mecánicos, pronto se transformó en un referente culinario de alcance mundial. En 1926, se introdujo la primera estrella Michelin para destacar restaurantes únicos, en tanto que en 1931 se estableció la jerarquía de una, dos y tres estrellas que conocemos hoy: donde una estrella significa que un restaurante es muy bueno, dos estrellas que es excelente y su cocina bien merece un desvío para conocerlo y tres estrellas cuando es una cocina excepcional que merece un viaje especial para comer allí.
Así la Guía se fue consolidando a través del tiempo y a través de más de un siglo refleja un compromiso inquebrantable con la calidad y la innovación, valores que ahora resuenan en cada rincón del mundo, y que desde hace un tiempo incluye a Mendoza. De hecho, la elección de nuestra provincia como sede para la gala 2025 no es casualidad. Recordemos que nuestra tierra combina casi a la perfección ingredientes materias primas de gran calidad, el arte de la buena cocina, y un paisaje que inspira a chefs y comensales por igual, con lugares que son reconocidos en el mundo. Desde las bodegas del Valle de Uco hasta los lugares y sabores autóctonos del sur: Malargüe, San Rafael y General Alvear, desde la cercanía de los espacios gastronómicos de la ciudad hasta las cocinas de identidad en Mendoza Este, además de cientos de lugares mágicos en cada rincón de la provincia, todo contribuye con su carácter único al reconocimiento internacional que hoy celebramos.
Este encuentro va más allá de entregar premios y reconocimientos a través de las famosas estrellas; marca un hito para los restaurantes y espacios gastronómicos locales, que se enfrentan al desafío de reinventarse y de alcanzar nuevos estándares de calidad, en un proceso de innovación y mejora continua que es impulsado desde antes y que inicia una carrera internacional en el después, puesto que las Estrellas Michelin no solo son un símbolo de excelencia, sino que también representan un llamado a seguir explorando la creatividad culinaria y a destacar el profundo vínculo entre cocina y cultura, innovación y sustentabilidad.
La Estrella Verde, en particular, resulta en un reconocimiento invaluable para aquellos restaurantes que adoptan prácticas sustentables y responsables con el medio ambiente. Este galardón honra el esfuerzo de quienes incorporan procesos éticos y amigables con el entorno, como el uso de ingredientes locales, la reducción del desperdicio y la promoción de la biodiversidad. Es una insignia que celebra la visión de futuro y la armonía entre gastronomía y cuidado del planeta, y quizás sea uno de los pilares que mayor crecimiento impera hacia el futuro, especialmente con consumidores cada vez más comprometidos y exigentes con el cuidado del planeta como son especialmente las nuevas generaciones.
Para los restaurantes mendocinos, obtener una Estrella Michelin es una validación que trasciende fronteras y que además refuerza la Marca Mendoza a nivel mundial. Es una afirmación de que nuestra cocina, rica en tradición y sostenibilidad, resuena con los paladares más exigentes del mundo. Este galardón no solo impulsa el turismo gastronómico, sino que también refuerza la identidad y orgullo regional, haciéndonos partícipes de un escenario global, que claramente implica en beneficios para la actividad local.
Desde el punto de vista de la organización, a partir de la descripción de galas pasadas, claramente es una ceremonia diseñada para impresionar, y en este caso la majestuosidad de la Cordillera de Los Andes será el marco perfecto para mostrar al mundo el espíritu e identidad de Mendoza, recordemos que "estos altos montes" como los describía el Libertador San Martín, son todo un símbolo natural pero también cultural e histórico. Cada elemento, desde la elección del lugar hasta los detalles del encuentro, refleja la armonía entre gastronomía, naturaleza y pasión por ingredientes autóctonos, una característica distintiva de nuestra provincia.
Este evento es también una plataforma para catapultar la cocina mendocina hacia el futuro. Los chefs locales no solo están demostrando su capacidad para crear platos únicos, sino también para narrar historias a través de sus creaciones, conectando tradición y modernidad de una forma que cautiva tanto a turistas como a expertos culinarios. En tiempos donde los retos económicos son evidentes, la gastronomía ha sabido adaptarse y mantenerse como un pilar de innovación y creatividad. La Gala Michelin no solo celebra estos logros, sino que también incentiva a las nuevas generaciones a imaginar su lugar en este universo culinario.
En casi todas nuestras columnas hemos destacado que, con cada plato servido, Mendoza cuenta su historia y el esfuerzo de generaciones. Hoy, esa historia está siendo escuchada por el mundo entero gracias a estos reconocimientos internacionales, que no solo resaltan nuestras fortalezas, sino que también abren puertas para nuevas oportunidades y alianzas. Bienvenida la Gala Michelin 2025 que es más que un encuentro gastronómico más; es un testimonio para Mendoza del esfuerzo, la pasión y el talento de quienes han dedicado sus vidas a transformar nuestra provincia en un epicentro de excelencia culinaria y enogastronómica a nivel mundial, brillando una vez más, como un destino de sabores únicos y experiencias inolvidables... por todo ello: Salud y a disfrutar Mendoza.