Enrique Pescarmona lo contará todo en un libro
El veterano empresario que llevó a IMPSA hacia la exportación de tecnología y agregado de valor, y a la internacionalización, y que la vio a su vez desmoronarse sin que cayera al abismo, prepara un libro de memorias.
Enrique Pescarmona tomó el nombre de su abuelo, Enrique Epaminondas Pescarmona, un italiano de Turín que nació en 1883 y murió en 1947. Su padre, Luis Menotti Pescarmona, hizo grande a la industria metalúrgica que fundara el inmigrante, volviéndola al sector de los "pesados". Falleció en 1993. Fue contador público nacional, estudió en la Escuela Superior de Comercio Martín Zapata y en la Universidad Popular de Mendoza. Fue presidente de directorios en empresas como Fil Fer SA y La Mercantil Andina e IMPSA. Como empresario, formó parte de la Bolsa de Comercio de Mendoza, la Liga Naval Argentina, la Acción para la Iniciativa Privada, la Cámara de Comercio Italiana en Mendoza. También fue Director de Mendoza Refrescos SA, Banco de Mendoza, Compañía Argentina de Teléfonos SA, Cielos del Sur SA, Trater SA y Bodegas y Viñedos Lagarde SA.
Pero Enrique, quien sobrevive a ambos emprendedores Pescarmona, es recordado dentro de la empresa como quien le dio el giro fundamental hacia la tecnología de vanguardia y la exportación de valor agregado, además de la internacionalización, a pesar de los vaivenes de los últimos tiempos, los golpes que le dieron el fracaso en Brasil de su empresa hermana (que casi arrastra al abismo a la vieja empresa familiar) y la investigación de los Cuadernos de la Corrupción.
Nacido en 1941, es ingeniero electromecánico recibido en la Universidad Nacional de Cuyo. También realizó un Master en Economía y Dirección de Empresas en el Instituto de Estudios Superiores de la Empresa, Barcelona, Universidad de Navarra. Fue residente de la Corporación IMPSA (Industrias Metalúrgicas Pescarmona) una empresa que llegó a tener 8.000 empleados en el mundo y 3.500 en Argentina. Exdirector de Aerolíneas Argentina. Fue Presidente de la Fundación EXPORT-AR, de IDEA (2004-05), del Consejo Empresario Mendocino (CEM). Vicepresidente del Consejo de Administración de la Universidad de Congreso (Mendoza). Socio de Bodega Lagarde.
Las "debilidades humanas" de Pescarmona
Hasta aquí, lo que sabemos, pero en un libro de memorias dejará lo que no conocemos del todo: la letra chica de su extensa y empecinada experiencia.
Memo pudo conocer que aunque muchos quisieron tentarlo a encarar esta tarea, finalmente lo hizo solo, fiel a su estilo y carácter.
No hay fechas ni podría imponérsele un límite. Pero sin dudas, su largo recorrido por la vida industrial de Mendoza y Argentina, sus pasiones -el vino, el deporte-, sus relaciones y vínculos con los sucesivos gobiernos de la nueva democracia argentina, su secuestro en 1985 por parte del grupo de la dictadura todavía activo de Raúl Guglielminetti, dirigido por Suárez Mason a través de Aníbal Gordon, que le costó a sus familiares cinco millones de dólares de recompensa y mucho más, deberían ser parte de un volumen imperdible.