La dura lucha de la firma chilena que compró parte de Aguas Villavicencio

CCU, la firma chilena que compró parte del negocio del agua de Mendoza, tiene su mayor disputa a nivel continental en el sector cervecero, donde la Argentina tiene un rol fundamental.

Durante la semana CCU, la Compañía Cervecerías Unidas de Chile, selló un acuerdo con Danone, propietaria de Villavicencio, Villa del Sur, Levité y Ser, para comprar el 49% del negocio del agua que tiene la forma en Mendoza.

Se trata de una compañía que consolidada hace muchos años en el vecino país, avanza con su expansión internacional y también participa en otros mercados, con las etiquetas Real, La Victoria, Sáenz Briones, 1888 y Pehuenia (sidras), El Abuelo (licores), La Celia (vinos), Mistral, Control C (piscos) y Hard Fresh (hard seltzer).

Sin embargo, la mayor pelea de la compañía a nivel continental está en el sector cervecero, donde la Argentina tiene un rol fundamental, pero en el que también se enfrenta en una dura competencia con el mayor actor del mercado a nivel mundial, la firma formada por AB Inbev y SabMiller.

CCU es el segundo jugador del mercado argentino de cervezas, con una participación del 30%. En esta categoría, su cartera incluye las marcas Heineken, Miller, Imperial, Amstel Lager, Salta, Cautiva, Sol, Grolsch, Warsteiner, Isenbeck, Santa Fe, Salta, Córdoba, Norte, Palermo, Bieckert, Kunstmann y Blue Moon.

En ese camino está detrás del gigante belgo-brasileña AB Inbev y la británica-sudafricana SabMiller, las cuales manejan en el país marcas como Quilmes. Pero la batalla comercial no se limita a la Argentina, sino que tienen una dura lucha en todo este sector del mundo, con batallas legales incluidas.

La carrera por el mercado se inició cuando se concretó la fusión del grupo  la fusión entre AB Inbev y SabMiller.

La chilena CCU, una empresa ligada a la familia Luksic y Heineken, ha estado dando competencia para ir ganando mercado en países como Argentina o Colombia, donde justamente hace unos días la autoridad de libre competencia levantó cargos contra su contraparte.

Según datos de Diario Financiero, en Chile, CCU tiene más del 60% del mercado, mientras Cervecerías Chile -parte de AB Inbev- tiene del orden del 25% de participación, creciendo a raíz de la entrada en operación de una nueva planta.

El inicio de este conflicto viene de 2017, dos años después de la fusión de AB Inbev, cuando la compañía chilena advirtió que en la mayoría de los mercados donde operaba o planificaba hacerlo, su principal competidora tenía una captura de mercado superior al 90%.

Así, con niveles de participación del 98% en Perú en aquella época o 95% en Uruguay, Ab Inbev era la embotelladora más fuerte del continente.

En Colombia, mercado que hoy concentra las miradas, no existía CCU, que comenzó a producir en 2019 y hoy junto a Postobón, superaron los dos millones de hectólitros en volúmenes, un alza de de 37,8% respecto de 2020.

Sin embargo, después del anuncio de 2014 entre CCU y Postobón, Bavaria reaccionó y pasó de tener 88 acuerdos de exclusividad para la venta de sus cervezas en 2016 a 8.268 en 2017.

CCU decidió emprender un enfrentamiento legal en cada mercado, que cinco años después aún tiene a ambas compañías enfrentadas.

El gerente general de CCU, Patricio Jottar, afirmó  a DF en ese momento que era necesario entender que la industria no es local, sino internacional, a la hora de mirar los temas antitrust, "porque hoy se compite sin barreras".

Durante los últimos meses la gigante AB Inbev ha recibido dos sanciones que se suman a los recursos presentados por la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) de Colombia contra Bavaria.

A inicios de esta semana el Ministerio de Economía y Finanzas de Uruguay impuso una multa de unos US$ 4,6 millones a Fábricas Nacionales de Cerveza (FNC), filial de AB Inbev, tras ser demandada por abuso de su posición dominante por medio de la celebración de contratos de exclusividad con vendedores minoristas.

A fines de 2021, en Argentina se impuso una multa a la cervecera Quilmes -parte de AB Inbev- por US$ 1,5 millones, también por abuso de posición dominante, esto luego de que la filial local de la chilena CCU presentara una denuncia formal contra su principal competidora por prácticas anticompetitivas.

Así, mientras CCU se instala como nuevo socio de Danone en Mendoza, sigue una dura lucha para ganar más lugar en el mercado de las cervezas.

Esta nota habla de: