Cómo impactará en los privados el acuerdo salarial entre Gobierno y gremios

Luego de que, tras casi un mes desde el inicio de paritarias, los gremios cerraran acuerdos salariales para 2022 junto al Gobierno de Mendoza, surge una pregunta para ayudar a describir un poco mejor la realidad económica de la provincia y sus trabajadores, tanto estatales como privados.

En concreto, lo interesante es conocer cómo impactará en el sector privado que el estado mendocino -a cargo del gobernador Rodolfo Suarez- haya acordado subas en los sueldos que van del 40 y hasta el 55 por ciento en algunos casos, para este año. Y que, incluso, en septiembre se sienten a renegociar según los índices inflacionarios.

Para ello, Memo consultó con algunas de las entidades que justamente nuclean (de alguna manera) a quienes se desempeñan en el ámbito privado de la provincia. Tanto la Federación Económica de Mendoza (FEM) como el Consejo Empresario Mendocino (CEM) dieron su visión e hicieron también referencia al comunicado que emitió al respecto la Mesa de la Producción y Empleo de Mendoza.

"Lo que nos preocupa es el impacto de la masa de salarial en los gastos generales del Estado mendocino. Esto es porque absorben un gran porcentaje del total de lo que se destina a los distintos gastos. La preocupación, para ser más específicos, es porque el aumento de esa masa salarial puede significar que el Estado cuente con menos recursos para poder hacer frente a distintas obras y políticas de impulso de la actividad económica", indicaron desde la FEM.

Al mismo tiempo, continuó desarrollando el Director Ejecutivo de la FEM, Juan Manuel Gispert, "por supuesto que tenemos una mirada social positiva y nos parece muy importante que los trabajadores tengan un sueldo acorde a las necesidades de vida. Ya que en otras oportunidades las paritarias tal vez han quedado por debajo de las pautas inflacionarias y el sueldo de empleado público es fundamental en el impacto del comercio, porque son los principales consumidores y representan la fuerza mayoritaria de trabajo de Mendoza".

Por su parte, Federico Pagano, quien preside el Consejo Empresario Mendocino, opinó que "en la medida que el Gobierno de Mendoza mantenga cierta racionalidad en los acuerdos y que continúe en la línea de renovar menos puestos de los que se van jubilando (es decir, ajustando el gasto), entendemos que es una cuestión saludable para el sector privado de la provincia".

Para el licenciado en Economía, hay que recordar que el sector público estatal mendocino tuvo un crecimiento muy fuerte entre 2005 y 2012, "en donde se pasó mucha gente a planta permanente y ahora estamos pagando esas consecuencias. Por eso, creemos que lo importante es que se mantengan en la senda de achicar el Estado, no lo contrario".

Para profundizar, quien también es gerente general de Montemar, hizo mención específica al escrito de la Mesa de Trabajo, que además del CEM y la FEM está integrada por ACOVI, ACDE, AEM, UIM y UCIM, en donde marcaron "justamente que era fundamental que se mantenga una línea de cordura, que esté en consonancia con lo que se está acordando dentro del sector privado y con los índices de inflación para este año. Hoy el Estado es muy difícil de mantener, en la medida que se va achicando y nos permita generar recursos a los privados, se da un círculo virtuoso", se explayó Pagano.

La postura de la Mesa de la Producción y Empleo de Mendoza

En cuanto al contenido de lo reflejado entre las cámaras y entidades privadas de Mendoza se recordó que son ellos quienes "sufren las consecuencias del deterioro de las finanzas provinciales. Los desequilibrios fiscales son necesariamente un agobio para el sector privado productivo, con el agravante de que el incremento en el gasto público no se traduce en mayores y mejores servicios para los ciudadanos".

"Los mendocinos, mediante el pago de los impuestos, sostenemos al Estado para que brinde los servicios de salud, educación, seguridad, justicia, entre otros. Es importante entonces que el tamaño del Estado sea tal que pueda ser financiado por el sector privado y los ciudadanos que pagan sus impuestos, sin ahogarlos.

La austeridad fiscal y un clima de negocios adecuado para la producción, la generación de empleo y la inversión deben constituir las bases del aporte del sector público a la recuperación económica. En ese contexto, el sector privado podrá concentrar sus esfuerzos en ser más competitivo y en ampliar y diversificar la matriz productiva, para incrementar la producción y el trabajo", cerraron reflejando.