Por qué 27 personas se contagiaron de covid-19 en un Starbucks y otras no

Los negacionistas de la pandemia de coronavirus y quienes insisten en que el uso de la mascarilla es inútil han visto ahora como su teoría recibe un golpe más. Esta vez llega desde Corea del Sur. En la ciudad de Paju, localizada en el norte de Corea del Sur, muy cercana a Seúl y a la frontera con Corea del Norte, el pasado 8 de agosto se produjo una infección masiva de coronavirus que afectó a 27 clientes de una cafetería de la cadena estadounidense Starbucks, donde el virus se propagó rápidamente por el aire gracias al equipo de refrigeración del local.

Una mujer, de mediana edad, acudió al establecimiento sobre las 19:30 horas del sábado junto a un conocido. Ambos, pidieron unas bebidas en el mostrador del primer piso. El personal de Starbucks, que había distribuido el espacio de manera que se cumplieran las distancias de seguridad de dos metros entre mesas, se las sirvió e inmediatamente la pareja se sentó en una mesa de la segunda planta. Eligieron un sito junto a las escaleras y justo debajo una de las seis salidas del aire acondicionado de ese espacio de la cafetería.

A las 22:00 horas, coincidiendo con el cierre del local, ambos salieron. Todo había ido bien hasta el momento. Sin embargo, al día siguiente, el domingo 9 de agosto, la mujer empezó a encontrarse mal y sospechó que podría tener covid-19. El martes fue examinada y el miércoles, 12 de agosto, le diagnosticaron coronavirus. A los pocos días, otras 27 personas que habían compartido el tiempo y espacio con ella en el Starbucks, también dieron positivo en las pruebas de covid. Entre ellas un joven que solo había accedido a la segunda planta para ir al baño.

Las autoridades locales, tal y como explica el portavoz del gobierno de Paju, Gang Youdo, en unas declaraciones recogidas por Bloomberg, asumen que la mayoría de clientes no estaba usando la mascarilla mientras bebía y comía y que el aire acondicionado del techo ayudó a la propagación del virus. "Los acondicionadores de aire de techo son más susceptibles a la contaminación del aire interior porque tienen una estructura que enfría el aire interno sin aspirar el aire exterior", ha explicado al medio coreano Chosun el profesor de Arquitectura de la Universidad de Hongik, Hyunjoon Yoo, a quienes otro experto ha añadido que la fuerza del aire acondicionado también es un factor que ayuda al esparcimiento de las gotas que flotan en el aire.

Sin embargo, la infección por aire no es la única posible en este caso. El profesor de medicina infecciosa de la Universidad e Hallym, Lee Jae-gap, explica que en el caso de esta clienta y el resto de ciudadanos que acudieron al Starbucks también podría haber existido el contagio por contacto, pues ella podría haber dejado el virus en el pasamanos de la barandilla, en la puerta o en el interior del baño, donde otras personas podrían haber puesto sus manos después e infectarse. "En la crisis de Starbucks, todas las posibilidades, como la infección por gotas y la infección por contacto, están abiertas", asegura el experto al medio coreano.

Ningún empleado se infectó

En los días posteriores a la detección del brote, que empezó afectando a la mujer en cuestión y otras 27 personas, el número de contagiados aumentó hasta los 56, pero entre ellos, no se encontraba ninguno de los empleados de Starbucks que estaban trabajando en el turno en el que la paciente cero acudió. ¿Cómo se libraron del contagio masivo?

Pese a que los camareros del local subieron varias veces a la segunda planta a recoger bandejas o comprobar que el baño estaba en buen estado, todos llevaban guantes y mascarillas del tipo KF92 (FPP2), algo que los expertos consultados por los periodistas coreanos, han calificado como el gran acierto. "Si se usa una mascarilla, la cantidad de partículas que entran en la boca se reducen", explica el profesor de medicina infecciosa de la Facultad de Medicina de la Universidad de Corea, Kim Woo-Joo, que añade que se "debe usar la máscara incondicionalmente cuando se está en un interior".

En la misma línea se ha pronunciado el médico pediatra de enfermedades infecciosas del Hospital Changwon Fatima de Corea del Sur al ser consultado por Bloomberg. Para él, lo ocurrido en el Starbucks dice mucho "sobre el papel que pueden desempeñar las mascarillas". "Es posible que las máscaras no brinden una protección del 100%, pero no hay nada que sea tan efectivo", concluye.