El cannabis se afianza en Mendoza: más de la mitad de la población conoce a alguien que consume
La consultora Demokratía realizó una encuesta sobre el uso de cannabis. El consumo es mayor entre los jóvenes con mayor de nivel de formación. También creció el consumo de psicofármacos para cuestiones de salud mental como estrés, ansiedad e insomnio.
El consumo de cannabis está ganando terreno en Mendoza, según un reciente informe realizado en el Gran Mendoza. Más de la mitad de los encuestados (55,38%) afirmó conocer a alguien que utilizó marihuana en el último mes. Este dato, respaldado por una encuesta encargada por la empresa Inkillay Mendoza, muestra un aumento del 20% en solo un año.
La percepción sobre el cannabis ha cambiado significativamente, tanto por su uso recreativo como medicinal. Mientras en 2022 el 55% de los encuestados asociaba el consumo de cannabis con una adicción, los datos recientes reflejan una mayor aceptación, especialmente entre los jóvenes y las personas con mayor nivel educativo.
Más jóvenes y más educación, más aceptación
La encuesta, que incluyó a 724 personas mayores de 16 años, destaca que entre quienes tienen entre 16 y 30 años, el 61,97% conoce a alguien que consume cannabis. La aceptación también es mayor entre quienes han completado estudios secundarios o superiores, con un 56%, en contraste con el 44% entre quienes solo finalizaron la primaria.
Psicofármacos, una alternativa dominante
Además del cannabis, el estudio arrojó luz sobre el consumo de psicofármacos. Ocho de cada diez mendocinos conoce a alguien que utiliza medicamentos para tratar problemas como estrés, ansiedad, insomnio o depresión. Este porcentaje supera ampliamente el consumo de cannabis y evidencia un aumento de la dependencia a estas sustancias en un contexto social de alta demanda y estrés.
El consumo de psicofármacos se presenta como una herramienta para paliar la pérdida de calidad de vida. Sin embargo, el informe advierte sobre "proporciones alarmantes" de sobredosis y la falta de alternativas accesibles que contribuyan a mejorar la salud mental de la población.
Cannabis medicinal: un cambio de paradigma
El uso medicinal del cannabis está en ascenso, pero aún enfrenta barreras culturales y regulatorias. Matías Scaffetti, presidente de Inkillay Mendoza, subraya la importancia de un consumo guiado y responsable. "Es esencial contar con un diagnóstico médico y asesoramiento adecuado. Las genéticas de la planta se desarrollan para atender necesidades específicas, como insomnio, ansiedad o dolor crónico", explicó.
Scaffetti destacó que productos como aceites, cápsulas o resinas deben usarse bajo supervisión profesional. Asimismo, señaló que el acceso legal al cannabis medicinal requiere la inscripción en el Registro Nacional de Personas Autorizadas al Cultivo Controlado (Reprocann), lo que permite el uso y transporte seguro de estos productos.
Una aceptación en crecimiento, pero con desafíos
El informe revela que, aunque el cannabis está cada vez más presente en la sociedad mendocina, persisten prejuicios y falta de información. Sin embargo, la tendencia indica que tanto el uso recreativo como medicinal continuarán en aumento, impulsados por la educación y una regulación más inclusiva.
El panorama para el cannabis en Mendoza muestra avances, pero también subraya la necesidad de continuar educando a la población y capacitando a los profesionales de la salud para maximizar sus beneficios y minimizar los riesgos asociados a su consumo.