El macabro ajedrez jugado por la democracia representativa

Si bien no hay coincidencia absoluta, se estima que el ajedrez fue inventado por el comandante chino Han Xin para representar una importante batalla en la historia de China alrededor del 200 B.C.

Existe la postura de su nacimiento en la India, pero coincidentes en el momento histórico en que surgió y se lo conoció con el nombre persa Chaturanga y la difusión tuvo lugar a través del camino de la seda.

Según Harold Murray, el análisis filológico conecta el juego con claridad a la palabra chaturanga,? que designaba a las cuatro partes del ejército indio -carros, elefantes, caballería e infantería.

En definitiva, y esto es lo más significativo, fue siempre un juego de guerra.

Es por ello que le encuentro gran similitud con lo que acontece en las democracias representativas como la de Argentina, solo que aquí adquiere carácter de ostensible y macabra, es decir sin cuartel, o lo que es lo mismo sin tregua o sin darle un momento de descanso al enemigo o adversario.

La guerra política entre argentinos, no solo es sin cuartel sino, lo que es mucho peor, sin pudor. Ha quedado tan atrás la misión original de los así llamados representantes del pueblo que los elige, que no son tenidos en cuenta como personas y sus respectivas necesidades y anhelos, sino que son un mero número y por cierto un voto.

El afán de los contendores no es ni por asomo el utópico bienestar social, sino la obtención del poder, muy atomizado pero que cada trocito le confiere al propietario la vía para obtener más y en definitiva para beneficiarse lisa y llanamente tanto desde el punto de vista de la escala social a la que se trepa, sino, y fundamentalmente al rédito económico que se puede obtener cuando, como resulta habitual al incorporarse a la corrupción, no existen reparos en robar sea en forma directa o indirecta a través de acólitos.

La similitud con el juego me parece perfecta; veamos el caso de los cargos más altos: Presidente y Vicepresidente, supuestamente paradigma de sapiencia, trabajo y entrega, el Rey y la Reina o Vicepresidenta.

Tal como en el juego, el trebejo más poderoso es la DAMA, la única que puede avanzar en cualquier dirección y sentido, en realidad la suma del alfil con la torre y el peón. Además si corona, puede volver al ruedo como ya lo hizo, en tanto que el único presidente depuesto que logró volver fue el General, maestro de numerosos discípulos con descendencia a su vez que son los que pugnan por posicionarse hoy .Para asegurarse el triunfo electoral se alió,con un peón disfrazado de Presidente, sabedora que si se ponía en primera línea el fracaso era su más probable futuro, y ella necesita permanecer en cargos con fueros dado que tiene las puertas de la prisión abiertas y esperándola.

Claro que con la maniobra de disfrazar al peón de presidente, el tiro casi le salió por la culata, dado que el falso rey se enamoró de su papel pretendió subir de categoría. No llegó a reinar, pero transformado en caballo, comenzó a recorrer el tablero a los saltos y remplazando el nosotros por el yo le causó tal malestar a la dama que ésta prácticamente le retiró el saludo durante meses.

Rodeados por un bloque defensivo armado que atañe a la seguridad física, como intelectual mediante abogados de la misma laya y los famosos y más que temibles operadores políticos, verdaderos cerebros maquiavélicos cuya misión diaria es tramar, apologizar el accionar de la cúpula y desmerecer el de la oposición.

En el juego están representados por las figuras del Rey y la Reina, alfiles (elefantes en la antigüedad), caballos y torres.

Los caballos son la imagen de la policía montada de Bs As que se pone en acción para reprimir disturbios derivados de las pésimas condiciones de vida, bajos salarios, desocupación, trabajo en negro etc.

También, como acabo de explicar, sirven para ser jineteados por trepadores como el mencionado peón.

Los alfiles se caracterizan por su movilidad oblicua, sesgada, como Scioli, de desplazamiento oblicuo desde cónsul en Brasilia a la casa Rosada, afortunadamente intento fallido.

Por delante de ellos los peones, la infantería; la que va al frente en defensa del reino al que pertenecen o bien como punta de flecha para atacar y si es posible destruir al opositor.

En política son los gremios, en donde cada trebejo en soledad es un don nadie, pero agrupados en sindicatos pueden hacer temblar al gobierno más pintado

Pero el juego es muy inteligente, y es así como prevé la existencia de la "Coronación", consistente en que cuando una pieza logra superar todos los escaques, puede recuperar cualquiera de las previamente capturadas por el enemigo, excepto el rey lógicamente. Pueden coexistir dos damas por ejemplo.

Un caso ejemplar es el Miguel Ángel Pichetto, candidato a vicepresidente junto a Mauricio Macri y que, perdidas las elecciones, comenzó a recorrer el tablero hasta desaparecer al menos de la escena pública; sin embargo se "coronó" y encabezará la lista de diputados nacionales en la provincia de Buenos Aires junto a Rodríguez Larreta, habiendo pasado por todos los partidos políticos importantes. Todo esto le ha costado un trabajo de zapa duro pero finalmente figura al menos en el equipo de uno de los presidenciables con más posibilidades.

Pero sin duda el caso más relevante de coronación es el de Hugo Moyano, que de humilde conductor de camiones sorteó todos los escaques y ahora, en su privilegiada posición de secretario general del gremio de Camioneros, no solo se transformó en millonario sino en el segundo, o primero, entre los hombres más poderoso del país; y el único que se atrevió a desafiar a la Emperatriz Cristina, en la época en que lo era.

Otra particularidades muy interesante del juego es el llamado "Sacrificio"· En ajedrez, un sacrificio es un movimiento que entrega una pieza a cambio de otra para obtener una ganancia táctica o una compensación posicional de otra forma. Consiste en la ubicación adrede de una pieza en un lugar vulnerable para tentar al enemigo, pero obteniendo a cambio un camino más expedito para llegar a sus fines últimos, o bien para desorientar al espectador que ignora los verdaderos motivos de la jugada.

En política se habla de "fusibles", vale decir descartables según necesidad. En realidad cualquiera lo es salvo los que gozan de fueros, pero algunos están mandados a hacer para tal efecto.

En el caso del gobierno actual, que tuvo nada menos que cuatro años para preparar un equipo de primera factura para volver a gobernar, estuvieron como ahora, discutiendo hasta último momento las fórmulas y los cargos no electivos pero fundamentales, como los ministros por ejemplo. Comencemos por Economía con la designación de Guzmán, supuestamente el más indicado para el cargo según opinión al parecer conjunta del dúo presidencial, sí, digo dúo sabedor que el ejecutivo es unipersonal. Pero no en este caso en que el presidente estaba puesto como mero lazarillo de la verdadera y artera mandamás, a quien Guzmán no le "gustaba", e hizo tanto hasta que logró que lo echaran para ser remplazado por Silvia Batakis que duró el record de 24 días en el cargo para ser fundida también y remplazada por Sergio Massa que carece de antecedentes válidos como economista y hoy es la vez que ministro, candidato presidencial bajo el ala de la Emperatriz. Massa recorrió el tablero muchas veces y coronó varias, pero nunca estuvo tan cerca de sus verdaderas ambiciones: la Presidencia de la Nación. Intertanto es ministro de economía sin ser economista. Como decían los griegos, es un verdadero polímata.

Otro magnífico ejemplo fue el de Ginés González García, un desconocido de la medicina que ocupó nada menos que el cargo de Ministro de Salud. Corrupto y mentiroso, inicialmente defendido por el Peón-Presidente, terminó en la bolsa de desechos patológicos que se usan en los hospitales

Otro fusible es Cafiero, que de Jefe de Gabinete, cargo el más importante después de Presidente y Vicepresidente, "sacrificado" por inútil, ahora es un brillante Canciller que no maneja el inglés, me imagino los corrillos: sin embargo tiene aspiraciones sciolescas, que es de esperar tampoco se concreten, y no olvidemos el viejo proverbio árabe: "El hombre que no sabe y no sabe que no sabe, es un necio, húyele"

La Jefatura de Gabinete consta de 21 ministerios, 84 secretarías y 169 subsecretarías, con un presupuesto cercano a los 20.000 millones de pesos y con alrededor de 800 personas de planta, a todas luces demasiado para un incapaz como Cafiero.

Hace días atrás, los periódicos hicieron saber del primer triunfo diplomático de nuestro canciller que consistió en la inclusión de la palabra Malvinas, en las tratativas de soberanía, en vez de Falklands Islands.

Todo un logro de nuestro brillante representante, con ello faltaría un solo paso para que Inglaterra devuelva las islas.

Dijimos que el ajedrez es un juego de guerra y la guerra implica necesariamente muertes; pues bien, nuestros políticos se han encargado de cumplir con ese requisito mediante los asesinatos de Cabezas y Nisman y lamentablemente debería incluir al propio hijo del entonces Presidente de la Nación Carlos Menem.

Hoy la partida está por demás complicada, incluso se podrían jugar varias simultáneas; para la presidencia hay nada menos que 27 jugadores, con lo que se podría jugar en 13 tableros y un candidato quedaría comiéndose las uñas, esperando al primer eliminado.

Claro que no es lo mismo disputarle una partida a Horacio Rodríguez Larreta que hacerlo contra Jesús Arnaldo Escobar. ¿No lo conocen? Figura entre los 27 pretenciosos, búsquenlo.

Por cierto los requisitos para optar a la Presidencia son similares a los exigidos para senador: haber nacido en territorio argentino o ser hijo de ciudadano nativo, si hubiese nacido en país extranjero. Edad mínima: treinta años. Residencia: cinco años de domicilio en la Provincia con ejercicio de ciudadanía no interrumpida, si no hubiese nacido en ella.

En ningún momento se menciona el nivel de idoneidad que debiera tener.

Es como jugar al ajedrez sin saber lo que significan las palabras escaque y trebejo, incluso sin conocer el nombre propio de las piezas.

Pobre país.