Empresa educativa se hunde ante el ChatGPT
Las acciones de Chegg perdieron casi el 50% de su valor después de que su CEO admitiera que ChatGPT tenía un impacto negativo en su crecimiento.
Decían que la Inteligencia Artificial (IA) le permitiría a las empresas ocuparse de temas más importantes, ya que esta tecnología se haría cargo de las tareas automáticas. Decían que solucionaría algunos de los problemas más molestos. Pero pocos previeron que la IA también amenazaría la existencia de algunas de las mayores compañías del mundo.
Y eso es exactamente lo que le pasa actualmente a Chegg, una empresa del sector educativo que alquila y vende libros de texto digitales y físicos, proporciona tutorías y ofrece ejercicios online que ayudan a preparar un examen o hacer los deberes. En resumen, fue creada para hacerle la vida más fácil a los estudiantes. Un propósito ahora dominado por la IA, y que ya puso en jaque las acciones de Chegg.
Todo llegó después de una declaración de su CEO, Dan Rosensweig. "Desde marzo vimos un aumento significativo en el interés de los estudiantes en ChatGPT. Ahora creemos que está teniendo un impacto en nuestra nueva tasa de crecimiento de clientes", señaló durante una presentación de resultados reciente. Y el mercado premia las caídas con más caídas. En este caso, las acciones: Chegg vale prácticamente la mitad de lo que valía dos días atrás.
ChatGPT derrumbó a una empresa
En un momento donde los inversores miran con lupa los cambios que la nueva tecnología puede causar, premiando a sus potenciales beneficiarios y atacando sin piedad a los perdedores del cambio de paradigma, el directivo probablemente infravaloró la reacción del mercado. Las acciones de la firma con sede en Santa Clara (California) perdieron un 48,41% de su valor en la sesión de este martes, tras evaporarse casi 1.000 millones de dólares, informó El País.
El CEO intentó entonces calmar las aguas. En una entrevista con CNBC, tildó de "exagerada" la reacción bursátil, y buscó colocar a su firma en el bando de los ganadores de la inteligencia artificial al recordar que tienen pensado lanzar en mayo una plataforma impulsada por GPT-4.
Además, puso en duda la fiabilidad de ChatGPT. "Los estudiantes no pueden equivocarse cuando hacen la tarea o aprenden cosas. ChatGPT a menudo está mal, y no va a estar bien en el corto plazo", dijo sobre los errores en las respuestas de la herramienta.
Así, volvió a poner las acciones del lado positivo este miércoles -subieron un 17%-, aunque no alcanzó para compensar la enorme pérdida del martes.
¿Puede la IA salvar a Chegg?
En un esfuerzo por competir, Chegg adoptó la IA al colaborar con la misma empresa que provocó la desaceleración en el crecimiento de sus clientes: OpenAI. A través de un servicio llamado CheggMate, anunciado el mes pasado e impulsado por la tecnología de OpenAI, Chegg espera brindar sugerencias de estudio personalizadas a sus estudiantes. La compañía planea brindar acceso limitado a la herramienta a finales de este mes.
Pero incluso después del debut de la herramienta de inteligencia artificial, no está claro si será el salvador de Chegg, dijo Josh Baer, analista de Morgan Stanley. "El escenario optimista de la nueva solución 'CheggMate' impulsada por IA que aísla a Chegg de los riesgos externos es muy poco probable", dijo en una nota de investigación del banco el martes, citada por Fortune.
Otros analistas dudan de que la herramienta de estudio impulsada por IA de Chegg marque una gran diferencia en las finanzas a corto plazo de la empresa. "Si bien Chegg planea lanzar la versión beta de CheggMate este mes para unos pocos seleccionados, el momento de un lanzamiento completo no está claro", escribieron los analistas de Jeffries en su nota del martes, y agregaron que no esperan "ningún impacto significativo de CheggMate" hasta 2024.