Qué hará en Mendoza el reconocido cocinero Ferran Adrià

Reconocido como uno de los mejores cocineros del mundo, empresario y escritor de más de 30 libros, Ferran Adrià Acosta nació en 1962 en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona, España). Revolucionando esquemas y sin intención de ser chef, logró ser un gran visionario e innovador de la cocina, llegando a ser una gran inspiración en múltiples sectores. Estará en Mendoza, en principio (porque Memo conoció que se está armando una agenda de temas innovación a su alrededor) estará el 28 de marzo en la Bodega Zuccardi del Valle de Uco.

Quién es Ferran Adrià

En 1980, comenzó su camino profesional cuando entró a trabajar como lavaplatos en el hotel Playafels, con el objetivo de ganar dinero para vacacionar en Ibiza. Allí, el chef Miquel Moy le enseñó las principales técnicas culinarias, iniciándose en la cocina clásica.

Luego de su viaje a Ibiza, regresó a Barcelona donde comenzó sus primeros pasos en restaurantes hasta llegar al prestigioso Finisterre en 1982. En 1983, durante el servicio militar, fue nombrado responsable del equipo de cocina del Almirante, lo cual le permitió adquirir experiencia a la hora de asumir responsabilidades. Fue entonces, cuando Ferran Adrià realizó una estadía de un mes en El Bulli, al que volvió un año después para incorporarse como jefe de partida. Poco después, el destino lo colocaba al frente de la cocina del restaurante.

En ese establecimiento creció a gran escala y logró insertarse como uno de los chefs más prestigiosos en el ámbito culinario, definiendo una misión clara para El Bulli: buscar los límites de la experiencia gastronómica y abrir caminos compartiendo las creaciones y el conocimiento generados en todo el proceso.

Ferran Adrià utilizó la cocina como lenguaje para expresarse y lo fue desarrollando y enriqueciendo para crear un discurso propio, bajo una filosofía y con una intencionalidad que no solo apelaban a la dimensión organoléptica, la sensopercepción y la memoria, sino también a otras dimensiones del ser humano: la razón, las emociones y la espiritualidad.

Esto, lo llevó a ganar muchos premios y a ser reconocido en el mundo.

Su primer reconocimiento fue en 1994, donde recibió el Grand Prix de l'Art de la Cuisine, concedido por la Academia Internacional de Gastronomía. En el año 2010, The World's 50 Best Restaurants nombró a Ferran Adrià cocinero de la década.

Por otra parte, en 1997, El Bulli es premiado con la tercera estrella de la Guía Michelin, además de lograr ser nombrado 5 veces como el mejor restaurante en la lista The World´s 50 Best Restaurants de la revista Restaurant Magazine.

Cabe destacar que le dedica gran parte de sus días a ideas con gran compromiso social, donde fundaciones y empresas celebran sus logros con premiaciones fuera de lo gastronómico. Por esta razón, en 2004, la revista Time lo consideró una de las 100 personas más influyentes del mundo. En 2007, la Fundación del Mérito Europeo le concedió la Medalla de Oro del Mérito Europeo.

Su trabajo en las fundaciones comenzó cuando asumió el cargo como presidente del Consejo Asesor de la Fundación Alicia, en la cual Ferran Adrià puso en marcha un ambicioso proyecto en investigación de alimentación y salud.

En 2010 se vinculó como embajador internacional de Telefónica y en 2011 tomó la decisión de cerrar El Bulli como restaurante para crear en 2013 elBullifoundation, una fundación privada que tiene como misión salvaguardar el legado del restaurante que cambió el paradigma de la cocina mundial, generar conocimiento en torno a la gastronomía y seguir promoviendo la creatividad y la innovación.

Y es que, para Ferran Adrià, la innovación y transformación digital son los puntos claves para lograr el éxito empresarial. Por esta razón, la eficiencia y creatividad de Ferran Adrià ha llamado la atención de varias escuelas de negocios y universidades de gran prestigio, como Columbia y Harvard, entre otras.