Polémica

Desde Rusia vuelven a prometer que enviarán el componente 2 de la Sputnik

Hasta ahora Argentina recibió 9.375.670 dosis del componente 1 de la vacuna y otras 2.493.160 del segundo componente.

Después de la polémica carta de la asesora presidencial Cecilia Nicolini, el Ministerio de Salud y el equipo del Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF) emitieron esta tarde un comunicado conjunto para salir al cruce de los cuestionamientos que recibió el gobierno ante la falta de segundas dosis de la Sputnik V.

La entidad rusa se comprometió a a acelerar el suministro a la Argentina de las vacunas que adeuda del contrato suscripto en diciembre de 2020 para la provisión de 30 millones de dosis.

Hasta ahora Argentina recibió 9.375.670 dosis del componente 1 de la vacuna y otras 2.493.160 del segundo componente.

"Confiamos en que resolveremos todos los problemas de manera positiva y que continuaremos con el compromiso asumido", expresa en su primer párrafo el texto conjunto.

"Además, como resultado de este compromiso, logramos impulsar la producción local y ya tenemos casi dos millones de dosis de ambos componentes aprobados o en proceso de aprobación para su pronta distribución. La producción en el país convierte a la industria farmacéutica argentina en un líder regional, capaz de proveer medicamentos de alta calidad y generar empleo. Nuestro principal objetivo es trabajar para minimizar el impacto de la pandemia vacunando a la mayor cantidad de personas lo antes posible, y seguiremos haciendo nuestro máximo esfuerzo para lograrlo", finaliza la carta que lleva la firma del RDIF y de la cartera de Salud.

Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, había prometido esta mañana que cumplirán con los envíos pendientes de vacunas a la Argentina, aunque la prioridad hoy es la propia población rusa.

Peskov reconoció que "se produjo un retraso" en el envío de vacunas a la Argentina. Las declaraciones del portavoz se produjeron después de que trascendiera la carta que envió Nicolini al Fondo de Inversión Ruso, en la que le exigía el envío del componente 2 de la Sputnik V y deslizaba la posibilidad de romper el contrato.

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