Rechazo a reclamo de la esposa del traficante sirio Al Kassar que vivió en Mendoza
El caso de la esposa del traficante de armas siria llegó a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en donde demandó a la Argentina. Vivieron en Los Corralitos. Se habían casado en el registro civil de Colonia Segovia.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) absolvió el martes al Estado de Argentina por el caso de la familia Habbal en el cual se alegaba la privación arbitraria de la nacionalidad argentina a Raghda Habbal, adquirida por naturalización, y de la residencia permanente de tres de sus hijos, todos de nacionalidad siria. Se trata de la esposa del traficante de armas sirio Monzer Al Kassar, cuya historia tiene un capítulo en Mendoza, lugar en donde obtuvieron ilegalmente el pasaporte argentino y contrajeron matrimonio en el registro civil de Colonia Segovia, en Guaymallén.
La sentencia notificada a las partes indica que el Estado argentino no es internacionalmente responsable por la violación a los derechos a la circulación y residencia, a la nacionalidad, a la niñez, a la libertad personal, a la igualdad ante la ley, y a las garantías judiciales y la protección judicial, en perjuicio de Raghda Habbal, ni de sus hijos Monnawar Al Kassar, Hifaa Al Kassar, y Natasha Al Kassar y Mohamed René Al Kassar.
"La ausencia de participación de las presuntas víctimas en el proceso ante ésta impidió conocer si, más allá de aquellos aspectos que se desprenden de las pruebas aportadas en el proceso, la señora Habbal, sus hijas y su hijo, sufrieron afectaciones concretas ante la orden de las autoridades de expulsión y detención precautoria", explica la sentencia.
El caso se remonta a 1992 cuando la señora Habbal obtuvo la nacionalidad argentina por naturalización el 3 de abril de ese año, previo juramento y renuncia a su nacionalidad de origen. Sin embargo, al mes siguiente, el Director Nacional de Población y Migración emitió una resolución mediante la cual declaró nulas las radicaciones de Habbal y tres de sus hijos, con fundamento en que una resolución previa había anulado la radicación de su marido.
En esa misma resolución, la autoridad administrativa ordenó la expulsión de la familia y su detención precautoria.
Mediante sentencia judicial de 27 de octubre de 1994 se declaró nula la decisión que concedió la ciudadanía argentina a la señora Habbal con fundamento en que se habría evidenciado un accionar fraudulento para su obtención.
Ante ello, Habbal presentó recurso de apelación y nulidad alegando que no había sido notificada del proceso de acuerdo a los requisitos legales, así como otros vicios procesales. Dicho recurso, así como todos los interpuestos posteriormente, fueron denegados.
"En las circunstancias del presente caso, resulta evidente que no existió riesgo de que la presunta víctima se encontrara en situación de apatridia tras la cancelación de su nacionalidad argentina (...) La señora Habbal tuvo a su disposición distintos recursos judiciales para resolver sus reclamos respecto de las violaciones a sus derechos a la nacionalidad y al debido proceso", explica la CorteIDH.
La CorteIDH añadió que "dichos recursos fueron efectivos en tanto las autoridades judiciales que los conocieron analizaron y respondieron los alegatos presentados por la señora Habbal sin que se adviertan omisiones de las que se desprenda un incumplimiento de las obligaciones del Estado".
Al no haber responsabilidad internacional por parte del Estado de Argentina, la Corte resolvió que no procedía pronunciarse sobre reparaciones, costas y gastos y ordenó el archivo del expediente.
Bonus track: video de las audiencias en la Corte Interamericana de DDHH (si no podés verlos, clic en ellos para ir a YouTube)
Un poco de historia
Uno de los periodistas judiciales más reconocidos, Eduardo Ayassa, contó en Los Andes quién fue quién y qué tuvo que ver Mendoza en su conflictiva historia.
Recopilando, sostuvo que "Raghda Habbal, de nacionalidad siria, renunció a ella cuando recibió de manos del juez federal de Mendoza Gerardo Walter Rodríguez la ciudadanía argentina el 2 de abril de 1992 pese a no cumplir con los dos años de residencia en el país".
"Adujo que ella y su esposo habían adquirido 'un inmueble rural para crear una industria de productos balanceados para engorde de bovinos que no tenía precedentes en el país, además de un inmueble en la ciudad de Buenos Aires', lo que está contemplado en la Ley 23.059 cuando habla de 'un adelanto moral o material para la República Argentina'".
Contó que "la pareja, junto a sus tres hijos menores (Monnawar, Hifaa y Natasha), llegaron a Argentina en el año 1990 y el 23 de diciembre de 1991 la mujer dio a luz en una clínica de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires al cuarto hijo: Mohamed René Al Kassar".
"La familia -escribió Ayassa- vivió por un tiempo en Los Corralitos, Guaymallén, hasta que conocidos los antecedentes penales de Monzer Al Kassar, el 11 de mayo de 1992, se ordenó la expulsión de Raghada Habbal del país, cuando 'aún gozaba de la ciudadanía argentina'".
Monzer Al Kassar nació en Siria en 1945 y es conocido como el "Príncipe de Marbella". Es un traficante de armas internacional acusado de ser terrorista. A lo largo de los años reunió cargos por ayudar a terroristas y por lavado de dinero. En el año 2008 fue sentenciado por una corte federal de Estados Unidos a cumplir 30 años de prisión por aceptar vender armas a agentes encubiertos que se hacían pasar por miembros de las FARC.
En la década del '90 Al Kassar fue protagonista de distintas polémicas, sobre todo debido a sus vínculos con la familia del entonces presidente Carlos Menem y con la cuñada del mandatario, Amira Yoma.