Caso Bento: el problema del chip y los empleados judiciales

Dos empleados de Movistar y empleados judiciales declararon como testigos en el juicio que se lleva adelante contra el juez Walter Bento y una supuesta banda acusada del cobro de coimas para obtener beneficios judiciales.

El incidente entre el abogado de Bento y la presidenta del Tribunal

Los empleados fueron quienes detallaron el momento en el que el juez federal llegó a la sucursal de la empresa y solicitó el cambio del chip de su celular porque estaba roto. 

Bento durante la instrucción de la causa se negó a entregar su celular al justificar que se trataba de un teléfono personal y no de los tribunales, pero los testigos dieron otra versión.

Emilio Orellano era el encargado de la sucursal y confirmó que el juez fue tres veces para solicitar el cambio de chip de su teléfono. 

El punto principal de su declaración fue cuando aclaró que este cambio no se podía realizar porque se trataba de "chips o líneas que pertenecen al Gobierno o entidades" y la línea que tenía Bento pertenecía al "Poder Judicial o algo del Gobierno".

Otro empleado, Armando Vélez, también habló sobre las visitas de Bento a la sucursal y su insistencia para cambiar el chip de su teléfono. 

Vélez también remarcó que no pudo realizar el trámite de cambio de chip ya que se trataba de una línea desde donde no se podía realizar trámites, ya que "salía que pertenecía a algo de la Nación".

Mariela Andía, secretaria judicial, compañera de Marta Boiza y quien trabajaba en el Juzgado de Bento, también declaró y se refirió a la causa de contrabando que tiene a Bardinella como principal implicado.

La empleada fue quien habló con Bento sobre la detención del hombre porque "era un prófugo importante".

También declaró que recibió un pedido de audiencias de abogados de Fabián Ballester mientras él permanecía prófugo.