El final del impuesto PAIS y del "cariño impositivo" en Uruguay
El tributarista César Litvin habló sobre el final del impuesto PAIS y sobre cómo puede cambiar el escenario con los resultados de las elecciones en Uruguay. También pidió reformular Ingresos Brutos.
El gobierno anunció que para navidad dejará de regir el impuesto PAIS, el cual fue creado por la diferencia cambiaria existente entre los dólares oficiales y paralelos. En diálogo con Gabriel Conte, Evangelina Argüello y Hernán Bitar en "Tenés que saberlo", por Radio Jornada 91.9, 100.1 de San Martín y FM del Condado 96.9 de Luján, el tributarista César Litvin explicó lo que esto significará para las importaciones y también analizó cómo puede cambiar el panorama internacional con el triunfo del Frente Grande en Uruguay.
"El impuesto PAIS fue un impuesto que se creó por la brecha cambiaria. Es un impuesto totalmente distorsivo que el 24 de diciembre termina el plazo de vigencia, por lo cual para aquellos que importan o que consumen en el exterior le va a ser mucho más barato la importación y los consumos en el exterior. Para aquellos que son fabricantes locales, industrias locales, le va a generar más competencia con la invasión de productos importados", explicó Litvin.
El tributarista señaló que este impuesto nunca debería haber existido y que su eliminación será muy buena para el país: "Va a ser bueno para el país para que deje de existir esta lista de impuesto que mucho daño le hacen a la actividad económica, entre ellos este, pero después hay otros en la lista que deberían ser eliminados o reformulados, como sería a nivel provincial Ingresos Brutos; a nivel municipal la cantidad de tasas que existen sin contraprestación de servicios; y a nivel nacional, el impuesto a las exportaciones y el impuesto a los débitos y créditos. Hay mucho por hacer, le damos la bienvenida a aquellos impuestos que dejan de existir y que tanto daño le hacen a la economía", señaló.
A su vez, analizó que desde su óptica está desregulación se está haciendo bien y que dichas regulaciones son para la actividad económica "una carrera de obstáculos": "Creo que está bien que se vayan encarando con seriedad y con firmeza, desregulando cada una de las limitaciones que se van poniendo a la actividad económica. Veo que se está haciendo un buen trabajo desde ese punto de vista", explicó, añadiendo que se seguirán existiendo y devolviéndose las percepciones que representan un 30% sobre el total.
En esa línea, Litvin señaló: "Creo que el camino no tiene retorno. Puede que lleve un tiempo más largo ir desregulando todo en la práctica, pero creo que el camino es el correcto, el camino de ir desregulando. Quizás lleva un poco más de tiempo, pero creo que no tiene retorno esto".
Por otro lado, el tributarista señaló que aquellas personas que se fueron a Uruguay en la anterior gestión gozaron de unas "vacaciones fiscales" y que esa norma legal no puede ser derogada por más que cambie el gobierno: "Aquellos que tienen derechos adquiridos no se les va a cambiar nada. Quizás van a cambiar las políticas del nuevo gobierno, eso estará por verse, recién anoche se confirmó que ganó las elecciones, habría que ver qué gabinete forma. Pero respecto a los que se fueron por cariño impositivo y están allá, creo que eso no cambia para nada, fueron por una norma legal que no puede ser derogada de esta forma porque son derechos adquiridos. Quizás se termine el cariño impositivo para nuevos residentes".
En esa línea, planteó que habrá que ver qué políticas económicas establece el nuevo gobierno uruguayo: "En principio, creo que se estarían alineando los planetas para que algunos argentinos quieran volver. Son cambios de signos políticos muy importantes, pero son decisiones muy personales, muy subjetivas".
Finalmente, Litvin se refirió a Ingresos Brutos, impuesto de alcance provincial, y señaló que es esencial para la recaudación en tanto no se baje el gasto público de las provincias, a pesar de ser " el peor de todos los impuestos del sistema tributario": "Es un impuesto que le hace mucho daño a la actividad económica, creo que hay que reformularlo: en lugar de que se genere un efecto acumulativo basado en cada una de las etapas desde el fabricante, los insumos, los intermediarios y que llega al consumidor final como un impuesto repotenciado. Creo que hay que reformularlo a un impuesto a las ventas en la última etapa al consumidor para que no tenga este efecto nocivo y en el mediano o largo plazo, esto que no debe existir. Cuando se creó el IVA en el año 75 del 13% se derogó este impuesto. Creo que, en el mediano o largo plazo, este impuesto que tanto daño hace a la actividad económica y que se traslada totalmente a precios, osea que lo paga el consumidor, no debería existir", concluyó.