Distorsiones e idas y vueltas con los médicos: "Están beneficiando a prepagas y obras sociales"
El titular de la Federación Médica de Mendoza José Lodovico Palma señaló que la medida de permitir que solo los médicos de una cartilla de una obra social prescriban tratamientos y medicamentos viola el principio de igualdad de los médicos.
En las últimas horas, el gobierno nacional tomó una medida que establece que solo los médicos de las cartillas de obras sociales y prepagas están autorizados para prescribir medicamentos y tratamientos a sus afiliados. En diálogo con Gabriel Conte y equipo en el programa "Tenés que saberlo", por Radio Jornada 91.9, 100.1 de San Martín y FM del Condado 96.9 de Luján, el titular de la Federación Médica de Mendoza José Lodovico Palma cuestionó la medida y explicó los motivos por la cual la consideran desigual.
"Cuando salió la medida a mediados de mes, consideramos que esta resolución viola un poquito el principio de igualdad de los médicos ante la ley: ante una misma situación, debemos tener el mismo derecho. Todos somos médicos diplomados, matriculados y no se puede limitar por una resolución lo que dice la ley en el sentido de que el paciente puede necesitar una segunda opinión si no está conforme con el médico que le dio el diagnóstico o el tratamiento en la cartilla, que generalmente es un número de médicos muy reducido", explicó.
Palma explicó que el derecho a consultar a otro profesional se encuentra regidos por la Ley de Defensa de los Derechos del Paciente, los cuales en este caso se verían vulnerados: "También como médicos nos sentimos discriminados si no pertenecemos a una cartilla. Nosotros tenemos la ley 2336 y el decreto 2806 que habla del libre ejercicio profesional. Este derecho también sería vulnerado al no permitir que nosotros podamos pedir estudios, orientar tratamientos y emitir recetas".
En esa línea, el médico explicó que en las obras sociales y prepagas muchas veces hay demora para poder conseguir turnos con especialistas: "Cuando piden un turno con un traumatólogo, un endocrinólogo, se le está dando turno para enero del año que viene. En este escenario de limitación de las prestaciones ¿cómo va a jugar la mayor demanda que va a haber en función de que muchísimos pacientes hoy en día están sometidos a un tratamiento que no está regulado por el médico de la cartilla? Va a producir un cuello de botella que va a distorsionar la calidad de la atención. Nosotros opinamos negativamente".
Si bien la Superintendencia de Salud emitió una aclaración en la jornada de ayer, Lodovico Palma señaló que concretamente aún no hay nada: "Evidentemente hay hasta principios constitucionales que se están violando, de manera que yo creo que tiene que haber una aclaración definiendo cosas porque si no va a aumentar el colapso del sistema de salud y el paciente tiene que recibir atención oportuna, no puede recibir atención atrasada en el largo tiempo. Este sistema creo que en muchas obras sociales no está asegurado en este momento", explicó.
A su vez, señaló que con esta medida el gobierno contradice la idea de libre competitividad: "En este caso no habría libre competitividad porque la gran mayoría de los profesionales van a estar restringidos en la emisión de tratamientos, de manera que también habla de que el gobierno no se tiene que meter en lo que los particulares tienen que resolver, en este caso no es así porque el gobierno está aumentando la rentabilidad de las prepagas a costa de un servicio médico que no sé si es el de calidad que los pacientes necesitan".
En referencia a las denuncias por prescripción de tratamientos de parte de médicos no especialistas en determinadas áreas, el titular de la Federación Médica de Mendoza señaló que esto puede resolverse rápidamente y que las obras sociales pueden detectarlo: "No necesitan distorsionar el sistema de salud para tener una acción concreta en esos casos. Yo tengo más de 40 años de práctica profesional y sinceramente no veo que muchos especialistas de ninguna disciplina hagan recetas, con la responsabilidad que eso demanda, puede perder la matrícula: yo no puedo recetar oncológico, yo soy cardiólogo".
En esa línea, explicó que el médico que caiga en estas prácticas puede recibir una sanción cuando prescribe algún medicamento o tratamiento en especialidades que no son la suya: "Distinto es decir 'necesito un antibiótico' eso es una enfermedad que no hace falta ser especialista para tratar una angina o una bronquitis, uno puede tratarlas siendo médico simplemente, esa receta uno sí las puede hacer, pero yo no voy a hacer una receta de un oncológico que no conozco los efectos colaterales, la historia clínica ni la evolución del paciente y además no soy especialista".
Para solucionar este tema, el médico fue tajante: "El camino no es emitir desde el escritorio una resolución cuando no se conoce el terreno, ese no es el camino. El camino es tener a nivel nacional una agencia de tecnología sanitaria y que estas situaciones las regule de otra forma: desde lo académico y lo científico y no a través de medidas que no se sabe cuáles van a ser las consecuencias".
Además, señaló que estas prácticas no son las habituales dentro de la medicina: "Llevo casi 20 años en el Consejo de Ética y Disciplina de la provincia de Mendoza y podría contar con los dedos de la mano cosas de ese tipo. Hay mecanismos que pueden regular esa situación y probablemente, en Mendoza no tenemos colegio médico, pero los colegios médicos son los que se encargan de verificar sobre la veracidad de la firma y los sellos de los profesionales y regular su conducta. Eso estaría salvado por el sistema actual, que debe ser eficiente, nada más".
La colegiación de los médicos en Mendoza
A su vez, señaló que están trabajando en la conformación de un colegio médico en la provincia: "Desde la Confederación Médica, y en particular desde la Federación Médica en Mendoza, estamos abogando para que exista en Mendoza un colegio médico. Esa es la situación en la que nos encontramos hoy en día y esperamos que el gobierno rectifique distintas medidas que está tomando al respecto en función de la autonomía y el bienestar de los pacientes, de la autonomía profesional de los médicos y buscando una atención de calidad y no empeorando la situación de los pacientes".
Por otro lado, marcó que el interés económico es otro factor a tener en cuenta para entender estas medidas: "¿A quiénes benefician estas medidas? En este caso en particular, los que se ven beneficiados son las prepagas y las obras sociales, que van a tener un empleado médico que podría restringir al máximo la calidad de los medicamentos, de los tratamientos, etc. No es lo mismo un médico independiente, que actúa de acuerdo a un criterio, que si es empleado de una institución y responde a las directivas de la institución. Esto es un tema ético, pero si uno profundiza, lleva a un beneficio de rentabilidad de las prepagas y de la obra social. Están los mecanismos para denunciar al médico si esto no es así y sancionarlo, incluso quitarle la matrícula".
Confirmó, además, que han solicitado desde la Confederación Médica de la República Argentina una audiencia con el ministro de Salud de la Nación para abordar esta problemática.