Los judiciales continuarán de paro hasta que haya una mesa de negociación
El secretario general del Gremio de Judiciales de Mendoza Ricardo Babillón explicó el por qué de las medidas de fuerzas llevadas a cabo y cuál es el motivo del paro que se está realizando.
Los judiciales de Mendoza llevan dos semanas de paro y esperan por alguna señal por parte del gobierno para poder acordar las paritarias salariales. En diálogo con "Tenés que saberlo", por Radio Jornada 91.9, el secretario general del gremio de Judiciales de Mendoza, Ricardo Babillón, explicó los motivos de la medida de fuerza y las posibles soluciones al conflicto.
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"Llevamos dos semanas de paro porque no recibimos respuestas. Nosotros estamos reclamando la reapertura de paritarias. El gobierno decidió unilateralmente cerrar paritarias y dar por finalizadas las negociaciones salariales. Ante esto, no nos dejó más opción que comenzar el plan de lucha", señaló Babillón.
Babillón explicó que lo que se discute no es el porcentaje del aumento, sino un sistema paritario y lo vinculado a la carrera judicial: "Se ha escuchado mucha desinformación de lo que queremos los judiciales o el mismo gobernador diciendo que no entiende por qué los judiciales somos los únicos que no hemos aceptado. No hemos aceptado porque entendemos que entrar en conflicto cada tres meses para discutir uno o dos puntos no le sirve a nadie, ni a la administración del Estado ni a los judiciales. Y la única manera de llegar a un acuerdo es una mesa de negociación, de conversación entre las partes y no de la manera que lo hace el gobierno, intentando imponer algo y luego retirándose de la mesa", marcó.
El secretario general de Judiciales marcó que un ingresante está cobrando entre 320 mil y 340 mil pesos, por debajo de la línea de indigencia: "Si me preguntás cuánto necesitamos de aumento, yo te digo que desde enero del 2023 a la fecha, judiciales hemos perdido un 240% de poder adquisitivo y es una locura pensar en exigir algo así. Queremos que mejoren la oferta salarial, porque no podemos irnos de la negociación dejando a los compañeros por debajo de la línea de la indigencia, pero además queremos sentarnos y realizar un trabajo serio que permita una recuperación del salario hacia adelante, que paulatinamente vayamos teniendo una recuperación salarial", señaló.
El líder gremial marcó que la medida de fuerza continuará hasta que se logre destrabar el conflicto y que el diálogo con el gobierno está roto, salvo algunas conversaciones circunstanciales: "Le estamos exigiendo a la corte en su rol de patronal, que es la lucha fundamental que estamos llevando adelante, es quien debe discutir el salario de los judiciales. La corte tiene que tomar parte activa en la discusión de los salarios de los empleados judiciales. Si mañana sale y toma un rol activo, esto se soluciona y es más simple de lo que parece desde afuera. Claramente son decisiones políticas que se deben tomar y al no tomarse, hay que forzarlas", expresó.
Babillón explicó que solo quedan funcionando dos oficinas fiscales: una en San José y una en el polo judicial. "Debieron cerrar, reorganizar y dejar dos oficinas fiscales con el absurdo que alguien de Lavalle que tiene que hacer una denuncia, tiene que venir hasta el polo judicial a hacerla. Es un absurdo. Somos conscientes de la situación que se está creando, somos conscientes de esta problemática institucional que se está creando en Mendoza, pero no la estamos creando nosotros. Nosotros estamos pidiendo una mesa de diálogo, sentarse, trabajar, hablar con seriedad, propuestas serias para llegar a un acuerdo y ver de qué manera los empleados judiciales comenzamos una recuperación paulatina de nuestro salario", explicó.
Finalmente, el secretario general del gremio de Judiciales marcó que lucharán en el caso de que el gobierno intente descontar los días de paro y que la decisión de los judiciales es no percibir ninguna de las alternativas de aumento propuestas: "Es una decisión que los judiciales han tomado. Judiciales ha dicho "si nos vamos sin aumento hasta junio o el año que viene, que así sea, si nos descuentan está bien, pero no nos vamos a bajar de esta lucha", sino terminamos siempre igual, cediendo ante la presión del gobierno y en algún momento hay que cambiar la historia", concluyó.