La Inteligencia Artificial está a la espera de que los candidatos en Mendoza la incorporen a sus planes de gobierno

Argentina es una nación muy particular. Muchas de las cosas que en otros lugares funcionan bien, aquí no andan. Nuestras pasiones son incomparables o mejor dicho: preferimos no compararlas, sino resaltarlas. Hay muchas cosas malas en la gobernanza (pública o privada) que nos son propias, como costumbres, nada que no se pueda reeducar. Pero también muchas cosas buenas a las que echamos a rodar y solucionamos problemas. Si queremos.

Esta es la guía argentina "para una Inteligencia Artificial ética y centrada en las personas"

Ahora se habla mucho de la Inteligencia Artificial y la confusión invade a todos, porque algunos creen que es hablar del fax, la TV satelital o las aplicaciones del celular más populares. Otros hacen un link directo a la robotización, el tema más impactante hasta hace... "10 minutos".

Pero esto va más allá. Siempre hubo instancias de inteligencia digital, mecánica o cualquiera otra no humana disponible: el tema es que la hayamos dejado pasar para compartir obligaciones.

Por ejemplo, este lunes en el espacio "La Picada" por Radio Nihuil, se habló someramente del tema: "¿No era Inteligencia Artificial la que podía regular los flujos de tránsito hace 20 o 30 años, pero no se la aplicó en Mendoza porque ya habían contratos con fábricas de semáforos 'brutos', o 'no inteligentes'?".

En algún momento, el Foro de Economía Solidaria de Mendoza, una instancia de promoción del desarrollo desde las escuelas técnicas liderado por Héctor Antinori exploró -y con éxito- la posibilidad de fabricación de semáforos inteligentes. Pero no pasó nada. Habían "compromisos" por otro lado. Igual sucedió con la discusión sobre el tráfico en el Nudo Costanera: fue "más fácil" clavar un puente y más tránsito que buscar la ayuda de la Inteligenci Artificial para regular la situación. Hasta se discutió sobre si dejar entrar a los límites de la Ciudad de Mendoza a vehículos con tal o cual terminación (como las salidas del hogar en la cuarentena más brutal, con el DNI) o si eliminábamos la siesta. Nada sirvió. La inteligencia estándar no ha dado todos los resultados que se necesitan.

Sigue el debate: "La IA no viene a quitar el trabajo, pero sí a cambiarlo"

Ni qué hablar de los rendimientos de cultivos, tema en el que muchas empresas ya están trabajando, entre ellas, algunas bodegas.

O del uso, rendimiento, previsión, pronóstico, precauciones, etc. en torno al agua. 

Además, ¿se gestionan bien los datos que ofrecen cientos de cámaras de videovigilancia o son funcionan a modo de "espantapájaros" contra la delincuencia?

Entonces: ¿puede la Inteligencia Artificial ser una aliada de Mendoza, mientras estudiamos sus costados positivos y negativos, a la luz de los nuevos cucos instaurados por el ChatGPT y todos sus similares?

Sí. ¡Pero que lo digan los candidatos, que poco están hablando sobre esto!

Para empezar hay que levantar los crucifijos y exorcizar a los que le temen a todo lo nuevo que no, no va a salir agua con cianuro de las canillas si se aplican mecanismos de Inteligencia Artificial a la gobernanza de los espacios públicos.

Para ver cómo lo hacen algunas ciudades, recurrimos a un informe muy interesante de +Comunidad, un espacio generado por la RIL (Red de Innovación Local) y también construida junto a corresponsales de más de 300 ciudades del mundo.

Cinco casos de aplicación en las gestiones urbanas

La inteligencia artificial (IA) está desempeñando un papel cada vez más relevante en la administración de las ciudades. Desde el transporte público hasta la gestión de residuos y la seguridad vial, su potencial crece a pasos agigantados y es utilizado en todo el mundo para mejorar la eficiencia de numerosas prestaciones públicas.

En esta primera entrega, repasamos cinco casos que demuestran cómo la IA ya está transformando los gobiernos locales. Los beneficios registrados incluyen optimización de recursos, toma de decisiones más informada y mejores experiencias para la ciudadanía.

"Las ciudades inteligentes y sostenibles combinan diversas tecnologías para reducir el impacto ambiental y ofrecer a la población una mejor calidad de vida. Esto no sólo es un desafío técnico; el cambio organizacional de los gobiernos es esencial. Es un desafío multidisciplinario que se debe realizar en conjunto con los funcionarios locales, los proveedores, las autoridades nacionales, la academia y la sociedad civil", define la Comisión Europea.

1. Tel Aviv, Israel

El gobierno local está aplicando inteligencia artificial para actuar con mayor rapidez frente a los accidentes de tránsito. La empresa Waycare creó una plataforma de software basada en la nube que aprovecha la IA y el análisis predictivo para producir información procesable, como predicción de incidentes, detección de tráfico irregular e identificación rápida de sucesos. La tecnología de esta startup integra datos de redes de transporte existentes y fuentes como infraestructura de la ciudad, aplicaciones de navegación y pronósticos del tiempo.

Por lo general, cuando ocurre un accidente, alguien llama al 911 o un operador sentado frente a docenas de cámaras identifica qué ocurrió y alerta a las autoridades. La alianza público-privada en la ciudad israelí automatizó este proceso manual mediante la creación de un algoritmo y un flujo de trabajo. Con datos en tiempo real se pueden identificar anomalías a medida que ocurren en la carretera y alertar inmediatamente a los servicios de emergencia.

2. Vicente López, Argentina

Esta ciudad, ubicada en las cercanías de Buenos Aires, también está utilizando la inteligencia artificial y Deep Learning (algoritmos de aprendizaje automático) para prevenir accidentes. A través de sensores, se controla el exceso de velocidad, el uso del celular, de cascos y si conductores y acompañantes tiene puesto el cinturón de seguridad. También permite controlar la luz baja, los giros en U, la circulación a contramano, las áreas de estacionamiento en zonas permitidas y los vehículos que estén en segunda fila.

El municipio también cuenta con el primer observatorio municipal en América Latina para el uso ético de la IA. Ante el uso más intensificado de la nueva tecnología en la gestión, surgió la necesidad pública de garantizar el uso adecuado de los datos personales obtenidos. En esta nota de +COMUNIDAD podés leer más sobre el caso. 

3. New Rochelle, Estados Unidos

Esta ciudad, ubicada en el estado de Nueva York, cuenta con una plataforma de realidad virtual que le permite visualizar futuras construcciones. Ganadora del desafío de alcaldes de Bloomberg Philanthropies 2018, la iniciativa permite que los residentes puedan ver de una manera realista cómo impactarían nuevas obras en los barrios.

Un caso de uso inicial son los planes del gobierno local para transformar una autopista de seis carriles en una calle urbana más transitable. La idea es convertirla en un parque lineal elevado similar al High Line de la ciudad de Nueva York. Para solicitar comentarios, los líderes de la ciudad han asistido a eventos públicos, como el festival de jazz y la ceremonia anual de iluminación del árbol de Navidad, y les han dado a los residentes la oportunidad de usar un casco de realidad virtual que los hace sentir como si estuvieran de pie en medio del espacio rediseñado. Han participado alrededor de 250 residentes, ofreciendo opiniones específicas sobre cómo la transformación de la carretera podría impactar en sus vidas.

4. Helsingborg, Suecia

Los camiones de basura monitorean baches y otros elementos en las carreteras con la ayuda de IA. Se instalaron cámaras con la tecnología detrás de los parabrisas de las unidades para detectar agujeros en las calles y señales de tránsito que falten, entre otras cosas.

Los camiones de basura fueron elegidos para el mapeo con el propósito de aprovechar sus rondas diarias por la ciudad, ahorrar emisiones y evitar más tráfico. También sirvió para ahorrarle dinero al municipio: el costo de detección se redujo en un 80%.

5. Ámsterdam, Países Bajos

La capital neerlandesa está midiendo y mejorando la accesibilidad en la ciudad gracias al Big Data y a la inteligencia artificial. En 2022, comenzó una prueba que permite a cualquier usuario en línea explorar las calles e informar sobre lugares que no son inclusivos para personas con discapacidades físicas o movilidad reducida.

Ámsterdam integró el servicio en una plataforma especial, desarrollada por investigadores de la Universidad de Maryland y que utiliza imágenes interactivas de Google Street. Con los datos obtenidos gracias a la participación ciudadana, se entrenan algoritmos de aprendizaje automático para encontrar rápidamente los problemas de accesibilidad. Así, la información se podrá visualizar en mapas y servirá a las autoridades para tomar decisiones.