Categórico rechazo en todo el territorio de Chile a la nueva Constitución propuesta

Los chilenos se expresaron en las urnas y determinaron que no quieren cambiar la Constitución que heredó el dictador Augusto Pinochet por otra que muchos analizan como que incluye exageradas medidas de reforma del sistema republicano actual hacia otro no probado (y tampoco aprobado ahora) detrás de la cordillera.

Mientras el presidente Gabriel Boric, que se instala como perdedor en el Plebiscito Constitucional, ya decidió convocar a la oposición al Palacio de la Moneda para este lunes a las 16, la dirigencia política empieza a expresarse, y no solo en Chile.

El "amigo íntimo de Alberto Fernández" -tal como se identificó el dirigente Marco Enríquez Ominami en diálogo con el programa "Tormenta de Ideas" por Radio Nihuil-  reflexionó que "este es un golpe fuerte. La gente quiere una nueva Constitución. Rechazaron los escándalos y la arrogancia de la convención, y la inacción del Gobierno. Los convenció más el "rechazar para reformar". Hay que escuchar la voz de la gente".

Desde Buenos Aires, el expresidente argentino Mauricio Macri sostuvo que "una Constitución es un acuerdo consensuado, no la imposición de unos sobre otros. En Chile prevaleció la sensatez. Queda abierta la oportunidad de dictar leyes inmediatas y pensar en una futura reforma constitucional para consolidar el progreso y la justicia en el país hermano".

Mirá toda la cobertura de Memo desde Chile con su director Santiago Montiveros, en nuestras redes sociales y repasá abajo las notas sobre la jornada histórica:

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