El ninguneo porteño a Cornejo y Bullrich tras conseguir los 5 senadores que faltaban
Ya irrumpen los celos entre "palomas" y "halcones" de Juntos por el Cambio, dando como fruto una nueva corriente avícola para calificarlos: los pavos reales. Dejaron a Cornejo fuera de los festejos que al final, solo fueron una juntada barrial porteña que Rodríguez Larreta confunde con "nacional".
Horacio Rodríguez Larreta monopolizó para sí y le dio lugar al expresidente Mauricio Macri en los festejos por el triunfo electoral del domingo pasado. Pero una vez más, el porteñocentrismo se miró el ombligo y creyó ser "lo nacional", cuando en el resto del país fue la "vuelta olímpica" previa a las eleciones que dieron la desplazada Patricia Bullrich y el mendocino Alfredo Cornejo la que le hizo perder el quórum al kirchnerismo en el Senado que presidirá sin reinar como hasta ahora, Cristina Fernández de Kirchner.
El diario La Nación dio cuenta de los codazos que se vivieron en el búnker de Costa Salguero para subir al escenario. En este punto, destacó que Cornejo -que no solo triunfó en Mendoza sino que los de otras provincias pueden adjudicársele como fruto del esfuerzo junto a Bullrich- no pudo subir al escenario, al igual que el referente que representa "la pata peronista", Miguel Ángel Pichetto.
Celosos, los dirigentes porteños atentaron contra el espíritu de la jornada abiertamente, ya que según las crónicas de los presentes ganó el desánimo en una actitud tan absurda como la del peronismo festejando la derrota. El PRO veló el triunfo, por hacer la analogía con el comportamiento inverso al del Frente de Todos.
Cornejo y Bullrich criticaron el mensaje de "telepronter" del presidente
Acostumbrados a calificar con la actitud de determinadas aves a los grupos internos, como "halcones" o "palomas", algunos ya dan cuenta de la aparición en el corral de otra especie: los pavos reales, aquellos que se pavonean creyéndose más que los otros solo porque pueden desplegar una colorida cola.
El PRO porteño dejó abajo del escenario a Cornejo y Pichetto. El mendocino había decidido viajar a festejar junto al resto, creyendo que se trataba de un acto nacional pero no, solo fue una celebración de los barrios de la Ciudad de Buenos Aires, que lejos de representar a todo el país, cada vez se representan a sí mismos y, con ello, creen que es suficiente para ganar en 2023.