La economía de Chile analiza cómo "peruanizarse" ante posible fragmentación política
La fragmentación política e institucional que impera en Perú, cuya inestabilidad se ha reflejado en un verdadero desfile de presidentes durante los últimos cinco años, ante constantes enfrentamientos entre el Poder Ejecutivo y Legislativo y líos vinculados con actos de corrupción.
Gran preocupación dejó en la economía chilena el resultado de las últimas elecciones, sobre todo por el avance de los sectores "estallidistas", que apoyaron los levantamientos, y el surgimiento de nuevos liderazgos de índole anárquica en la Convención Constituyente. De tal modo, el ejemplo más a mano que han encontrado algunos voceros de las empresas es Perú y de allí que se hable de "peruanización" de la economía.
La fragmentación política e institucional que impera en Perú, cuya inestabilidad se ha reflejado en un verdadero desfile de presidentes durante los últimos cinco años, ante constantes enfrentamientos entre el Poder Ejecutivo y Legislativo y líos vinculados con actos de corrupción.
Según consignó en Santiago El Mercurio Inversiones, para la firma chilena de servicios financieros LarrainVial, "los resultados electorales (en Chile) apuntan a ganancias electorales mucho mayores de lo esperado de los candidatos independientes, en detrimento de los partidos tradicionales, con una Convención en gran parte fragmentada y polarizada que puede estar algo sesgada hacia posiciones refundadoras".
Chile, un país que le dio la espalda al voto
Así, deslizó que tanto el debate político como la economía chilena podrían tender a la mencionada "peruanización", en donde se consigue crecimiento pese a la fragmentación política.
Específicamente, la compañía señaló que la fragmentación puede conducir a los problemas que suceden en el Congreso de Perú, con negociaciones dentro del órgano constituyente caóticas y extensas. "Chile podría convertirse en otro Perú", dijo LarrainVial, es decir, un país dependiente de las materias primeras, que sigue creciendo en medio del deterioro político e institucional.
El diario trasandino Emol.cl consultó a diversos expertos en torno a tal posibilidad. Algunas de sus consultas y respuestas fueron las siguientes:
- José De Gregorio, decano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Chile y expresidente del Banco Central, aseguró a EmolTV que en estos momentos "Chile está peor que Perú, nuestra crisis política, el descrédito institucional lleva a que tengamos que reconstruir y esta (la Convención Constituyente) es una oportunidad". Es más, a su juicio, si no se hubiera optado por el proceso para redactar una nueva Constitución, "estaríamos aún peor", y agregó que "ahora obviamente uno teme entrar en un ciclo de conflictos políticos como los de Perú, que tarde o temprano terminan teniendo un efecto muy importante en la capacidad de desarrollo nacional". Con todo, el economista resaltó que que actualmente en Chile "el deterioro es enorme", considerando que el país "tiene un sistema político fallido, un Presidente sin Congreso, un sistema presidencial con elecciones mayoritarias donde no se pueden formar coaliciones. Realmente nuestro sistema político está impidiendo tener mejor ambiente económico, y por eso es importante, como primera parte, cuál es la organización política de un país".
- Son las coyunturas sociales que afectan a Chile, su extensión, y la falta de estabilidad política, lo que preocupa a Hermann González, economista de Clapes UC. En todo caso, no ve que Chile avance por una senda similar a la de Perú, por no se manifestó estar muy optimista respecto a una eventual expansión de la economía. Inclusive con un cobre que no baja de los US$4,5 la libra. "Lo que puede ocurrir en este contexto es que perdamos una oportunidad de crecer, de financiar políticas públicas, de crear empleos, en un periodo de buenos precios de materias primas, porque está en riesgo nuestro marco institucional y la incertidumbre política que estamos enfrentando. Y no me refiero solo al debate constitucional, sino que al debate tributario, en materia de royalty a la minería, por ejemplo, además de otras iniciativas tributarias y de gasto que han salido desde el Congreso, que son preocupantes", acotó.
- En esa línea, Tomás Flores, ex subsecretario de Economía del primer Gobierno de Sebastián Piñera, se sumó a los dichos de sus pares, y señaló a este medio que "probablemente uno de los riesgos de esta alta fragmentación es justamente el impacto que ello tiene sobre la innovación, porque habitualmente ese proceso de creación de valor es muy dependiente de la estabilidad de las reglas del juego". Por ello, destacó que "el crecimiento te lo va generando lo nuevo (...) entonces habitualmente los sectores ya maduros, como la minería u otros, no te agregan mucho crecimiento adicional, salvo que descubras algo nuevo, pero al parecer no es tan alta esa posibilidad. El crecimiento adicional viene de nuevos descubrimientos y es justamente eso lo que se ve inhibido".
- Cecilia Cifuentes, directora ejecutiva de ESE Business School de la U. de los Andes, también expresó su parecer y descartó que Chile avance por una senda similar a la del país vecino, afirmando que "Perú es un país en que el sistema económico va independiente de la política, y mantiene una economía de libre mercado, con una institucionalidad bien desastrosa". A diferencia de esto, para Cifuentes, uno de los puntos importantes que será abordado en el debate constitucional dice relación con modificar el modelo de desarrollo, acorde con los dichos de quienes redactarán el nuevo texto fundamental, lo que de concretarse, a su juicio, tendrá profundas repercusiones. "Claramente, y esto es lo paradójico de lo que está pasando en Chile, si resultan exitosas todas estas presiones por cambiar el modelo de desarrollo, lo que de todas maneras podemos asegurar es que las demandas sociales no se van a resolver. En el fondo, con esta idea de tratar a lo mejor de repartir la torta de otra forma, van a destruir la torta". Y cerró ratificando que "si cambiamos el modelo de desarrollo, mi percepción es que se acabó el desarrollo".