Acusan al juez federal Walter Bento de liderar una banda para coimear

Este miércoles, gran sorpresa causó en Tribunales Federal de Mendoza la acusación formal al juez Walter Bento por presuntamente liderar una banda que pedía coimas para beneficiar a presos. Además, en la causa también están involucrados la esposa y el hijo del magistrado.

La causa contra Bento y otros 15 sospechosos comenzó a partir del crimen de Diego Aliaga. Durante la investigación, el presunto asesino, Diego Barrera, habría declarado que la víctima fatal y el magistrado federal de Mendoza tenían vínculos en ilícitos.

La investigación por presunto tráfico de influencias y sobornos es llevada adelante por el juez federal de San Rafael, Eduardo Puigdéndolas, ya que el resto de los magistrados del Gran Mendoza no podían tomarla por su cercanía con Bento. Además, el fiscal federal que investiga es Dante Vega.

Concretamente, el origen de la imputación de Bento es el testimonio de Diego Aliaga, quien habría dicho que Bento cobraba coimas a cambio de favores para acusados de narcotráfico y contrabando. De hecho, Aliaga también habría estado vinculado a esta última práctica delictiva.

Al mismo tiempo, según publicó Mendoza Post, el juez sanrafaelino ordenó la detención de tres abogados que le habrían pagado coimas a Bento: Luciano Ortego, Matías Armayo y Martín Ríos, este último recordado por haber devuelto años atrás la corona de la Reina Nacional de la Vendimia.

Esta mañana se allanó el estudio de Ortego, en el Barrio Bombal. Se trata de un abogado que estuvo casado con la hija de Emir Yoma (cuñado de Menem) y que años atrás tuvo trascendencia nacional por otro escándalo: tuvo que pagar $1 millón para evitar ser condenado por una estafa.

Antes de ser imputado, Bento ya había pedido tener acceso a la causa a través de su abogado, el mediático Mariano Cúneo Libarona.