Sin perspectiva de reactivación de Sierra Pintada, comenzaron a producir uranio en Río Negro
Los dos más grandes yacimientos de uranio de Argentina están en Mendoza y Chubut, ambas provincias con leyes restrictivas. Mientras tanto, una minera canadiense comenzó a explotar un área en Río Negro.
La minera canadiense Blue Sky comenzó las primeras perforaciones del plan de exploración de Amarillo Grande, un proyecto de uranio ubicado en la provincia de Río Negro. Se trata del único yacimiento activo, mientras que en los dos más grandes -Mendoza y Chubut- no hay perspectivas de reactivación.
En relación a Amarillo Grande, la compañía canadiense tiene planificado perforar alrededor de 100 pozos en una zona donde el recurso se encuentra casi en la superficie. El yacimiento está ubicado en las inmediaciones de la localidad rionegrina de Valcheta.
Además del uranio, Amarillo Grande cuenta también con vanadio, un metal que se utiliza para la producción de acero. La característica principal del proyecto es que el recurso de uranio está alojado cerca de la superficie y es de alta calidad y cantidad de mineralización.
El cuadro de situación de Sierra Pintada
Fuera de producción desde la década del '90, desde 2019 se realiza la postergada remediación ambiental en el yacimiento Sierra Pintada de San Rafael, trabajos que se extenderán al menos hasta 2024. Básicamente, el proceso implica la separación del uranio de los residuos sólidos y líquidos que quedaron almacenados en el lugar.
El proceso de remediación implica irremediablemente un "mini" proceso de producción. En este sentido, en Sierra Pintada hay almacenadas unas 1.067 toneladas de residuos sólidos en más de 5.000 tachos de 200 litros, y 1.200.000 m3 de agua en canteras, a los que "hay que sacarles" el uranio. Una vez que termine el tratamiento, se habrán obtenido unas 14 toneladas de uranio que la CNEA podrá utilizar para producir energía atómica.
De todas maneras, es un porcentaje ínfimo, habida cuenta que de Sierra Pintada se podrían sacar hasta 10.000 toneladas de uranio. Sin embargo, si eventualmente se inicia un proceso formal para volver a explotar el área, la actual legislación de Mendoza impediría su desarrollo, ya que irremediablemente se requeriría la utilización de ácido sulfúrico, aunque actualmente se emplea este químico en los trabajos de remediación.
En este punto, para sanear los pasivos ambientales, se necesita separar el uranio de los residuos que quedaron en el yacimiento y, para eso, sí o sí se debe emplear ácido sulfúrico. Si bien es una sustancia prohibida por la ley 7722, la normativa sólo hace referencia al proceso de producción, sin mencionar los trabajos de remediación.
Nación quiere reactivar
"Las provincias con más potencial en uranio, como Mendoza y Chubut, tienen leyes restrictivas de la actividad minera", se lamentó Hensel en 2020, e inmediatamente agregó: "Ese es el combo que debemos enfrentar y que nos estamos ocupando desde la Secretaría de Minería", en referencia a la resistencia que tiene la industria minera en Mendoza y Chubut.