Dólar cara chica: por qué valen menos y en qué países ya no los aceptan
El billete de U$S100 que se imprimió hasta 1996, más conocido como dólar cara chica, aún se acepta en las cuevas financieras, pero a un valor menor al habitual. En Brasil ni siquiera los reciben.
Pese a que es de circulación legal, el dólar cara chica es mala palabra entre los ahorristas argentinos que cuando intentan cambiarlos a pesos en las cuevas financieras, se les aplica un descuento de hasta el 15%. Sin embargo, no es una situación exclusiva de este país, ya que en algunos ni siquiera los reciben.
La polémica comenzó el año pasado con el cepo a la compra de divisas; a partir de allí, se supo que las cuevas pagaban menos por los billetes de U$S100 que se imprimieron en Estados Unidos hasta 1996, conocidos como "dólar cara chica". Desde entonces, se justificó la medida en la antigüedad de los mismos.
Previamente, como la embajada de Estados Unidos había aclarado que son de circulación legal, el dólar cara chica circulaba fácilmente: sin cepo cambiario, los ahorristas realizaban transacciones en dólares en los bancos, donde nunca rechazaron estos papeles. Pero en el mercado paralelo, prefieren evitarlos.
Argentina, de todos modos, no es el único país donde hay reparos al dólar cara chica, billetes de U$S100 en los que la imagen de Benjamin Franklin es más pequeña que en las dos series que le sucedieron. En Brasil, por ejemplo, las casas de cambio ni siquiera los reciben, al igual que en algunos países de Europa y Asia.
En Argentina hay mayor flexibilidad por el contacto fluido que hay con Estados Unidos, donde el dólar cara chica circula libremente y sin restricciones. En este contexto, si se tiene pensado ir a EEUU, un buen negocio es comprar en las cuevas esos billetes de U$S100 a un menor precio, ya que en el país del norte no hay problemas para usarlos.