Trump, un buen hijo de su madre

Para Vanity Fair, Donald Trump recibió influencia de su madre, Mary Anne MacLeod. En un interesante artículo escrito por Elise Jordan, trazó el perfil de la persona más importante en la niñez del presidente que va por su reelección este martes.

"Mary, la menor de los 10 hijos de Mary Smith y Malcolm MacLeod, se crio allí, en la aldea de Tong, donde su familia, gaelicohablante, vivía y labraba la tierra en su granja, una pequeña parcela situada en una llanura de marea. Aún hoy llegar al interior de Escocia desde Stornoway -la ciudad más grande de la isla, con aproximadamente 6.000 habitantes- supone un trayecto de más de dos horas en ferry", escribió.

"Incluso -continuó la autora- ir a misa era toda una excursión para la familia MacLeod.Con sus botas de lluvia, cruzaban todos los domingos el barro, el viento y la lluvia para ir a rezar a la iglesia Mayor de Stornoway, según escribe la periodista Nina Burleigh en su libro Golden Handcuffs: The Secret History of Trump's Women (Las esposas de oro: la historia secreta de las mujeres de Trump). La congregación pertenecía a la Iglesia Libre de Escocia, un movimiento evangélico que se había escindido de la Iglesia de Escocia casi un siglo antes en protesta por la corrupción de la nobleza terrateniente".

"¿Qué responsabilidad deberíamos atribuirle a Mary, la valiente y joven inmigrante convertida en esposa de un rico constructor de Queens, en las -digamos- peculiaridades de la personalidad de Trump?", se preguntó Vanity Fair. Yrespondió: "Su aparente incapacidad para sentir vergüenza, decir la verdad o dedicar un par de minutos a algo que no sea él mismo, esté alabando a su padre o lidiando con las decenas de miles de estadounidenses que están perdiendo la vida bajo su mandato, ¿es innata o fruto de la educación? ¿O de ninguna educación en absoluto?"

Cuando ya era madre de Trump, se la veía dar vueltas por Queens en un Rolls-Royce rosa con chofer, recogiendo monedas en los lavaderos de los edificios de su marido. Tuvo un grave problema de salud cuando Donald era muy pequeño, y estuvo a punto de morir por una hemorragia tras el nacimiento de su quinto hijo, Robert, por lo que fue sometida a una histerectomía de urgencia que más adelante presentaría complicaciones. Pero Mary se impuso a sus problemas de salud y siempre estuvo ahí para atender y recibir a su familia: "Cuando se encendían las luces, ella era la estrella de la casa", le contó su hija mayor, Maryanne Barry, a Gwenda Blair, biógrafa de Trump, haciéndose eco de las palabras de este cuando dijo que había sacado las dotes teatrales de su madre. Podés leer en español el artóculo completo haciendo clic aquí.