La infancia es dueña de esa sensación ambivalente en que se pueden tener sensaciones placenteras, pero también aterradoras. Las cuestiones que asustan a los niños van cambiando de acuerdo con las etapas y, además, algunos miedos les permiten ser cautos. Escribe Elia Ana Bianchi de Zizzias.
En un extenso análisis, se arribó a la lamentable conclusión de que la población de los seres humanos más pequeños ha sido la más vulnerada durante el aislamiento. Una experta en Educación, un abogado de DDHH, una psicóloga y el Gobierno de Mendoza, reflexionan sobre el tema. Una verdad triste y descarnada.