¿Macri "ya fue" o son sus referentes locales los que no convocan?, fuga de dirigentes y el PJ antimileísta
Estas son las perlitas políticas de Mendoza, con el arranque a full del año electoral, que deja numerosas cosas para pensar, mientras se cocinan las listas, no sin dificultad ante la abundancia excesiva de condimentos.
No hubo entusiasmo y más bien se notó nerviosismo por "quedar bien" con el visitante, a pesar de que la casa no solo no está en orden, sino que reina la confusión en torno a qué ser y qué no.
Hablamos, lógicamente, de la visita de Mauricio Macri a Mendoza. lo recibió un PRO que tiene su interna judicializada por la vicegobernadora Hebe Casado, que perdió la conducción a manos de Gabriel Pradines, quien, si bien es presentado como "una promesa" joven de la política, se pasan los años y la promesa no se cumple: no cuaja el sector, que podría ser el lastre que tiene él y también Macri.
Al final, lo llevaron al único municipio que conducen y mezclaron partido y gestión en un acto meramente formal, que no dejó de ser interesante por el aporte que le pudo dar Esteban Allasino, el intendente local, que tiene mucho más mérito que cualquier otro dirigente del PRO por su contracción al trabajo municipal.
Macri en Mendoza: actos y contra actos
Pero la reunión en un salón del Hotel Hilton de Guaymallén y los pasos intermedios entre una actividad y la otra, dejaron muchos huecos sin llenar: la gente no reaccionó.
En otro momento, Macri hubiera concitado la atención de notorios empresarios, cámaras, sectores de la sociedad civil. Pero no ocurrió. Puede ser porque los intermediarios -a la sombra de la mancha venenosa de Omar De Marchi, con quien muchos escapan de cualquier posibilidad de salir en una foto- o bien porque han encontrado un atajo: Javier Milei, que sí avanza en muchos puntos que esperaban que Macri cumpliera como presidente, y no sucedió.
Un concejal radical en Guaymallén, Jonathan Mazuela, echó un vistazo de la situación y dijo en X/Twitter: "El show del regreso fue tan convocante que hasta los propios prefirieron jubilarse antes de aparecer. Un éxito rotundo, faltaron solo las excusas, porque el vacío ya estaba". Lo retuiteó la vice de Alfredo Cornejo.
De Marchi no apareció, es funcionario de Milei, pero toda su gente es la que apapachó a Macri en Mendoza. Tampoco milita por Milei, como sí lo hace la vicegobernadora Casado que tuvo un acto al aire libre, multitudinario y que, si bien no fue propio, lo vivió como si lo hubiese sido.
Es que el lasherino Germán Pérez, dueño del bodegón "El Bigote", se quedó enganchado en política después de colaborar e irse del entorno de Daniel Orozco y de ser candidato de Luis Petri. De origen radical, "El Bigote" hizo un acto en el Club Zapata que dejó con la boca abierta a muchos. Lo hizo bajo el paraguas de "Los Guardianes del León", la agrupación que orienta y que es de evidente corte ultramileísta.
Los "Guardianes del león" recibieron a @hebesil en Las Heras mientras Macri tenía su acto en el salón de un hotel en Guaymallén https://t.co/VXh6ddRpFU pic.twitter.com/8eBLumpLLG
— Memo (@memodiario) April 12, 2025
Casado lo disfrutó, como también lo hizo cuando sus referentes que sí se impusieron en la discutida interna del PRO, se pararon para la foto en la puerta de la ostentosa sede partidaria a la que no los dejan entrar, en avenida España, y que en otros tiempos fuera la matriz del sector radical "Causa Nacional", que orientaba José Genoud, conocida por aquellos tiempos como "La Casa Blanca".
Allí protagonizó un acto que le demostró a Mauricio Macri que llegaba a una persona en donde su partido está desgranado, y recordaron que es capaz de aliarse con massistas y kirchneristas, como lo hiciera en la aventura denominada "La Unión Mendocina".
Lo cierto es que quedó gusto a poco con la visita de Macri.
No se sabe si están con o contra Milei, en definitiva, cuando el electorado pareciera que ya sabe con quién sí estar, sobre todo en Mendoza.
Y hasta el kirchnerismo demostró una mejor puesta en escena. lo hizo en el Teatro Selectro para buscar ser referenciado por la sociedad como "todo lo contrario" a Javier Milei.
El kirchnerismo tuvo su cumbre contra el FMI en Mendoza
Un acto denominado "Fraude Monetario Internacional" juntó a jóvenes y veteranos de La Cámpora y el peronismo, porque lograron que se sentara un "no originario" del sector, como es Adolfo Bermejo, por ejemplo.
Exagerar posicionamientos para ser alternativa
Desde el peronismo tienen en claro que para que la sociedad los identifique en la "góndola" de la oferta electoral tienen que ser algo.
Por ello, hasta el no kirchnerista intendente de San Rafael y presidente del Partido Justicialista, el sanrafaelino Emir Félix, salió a marcar con dureza su opinión en torno a la salida del cepo cambiario y el acuerdo con el FMI.
Acuñó una frase que bien podría ser usada en campaña, que es fuerte: "No creamos lo que dicen; miremos lo que hacen".
Le puso poesía:
"Dicen, hacen y niegan. Dicen que no van a devaluar. Después devalúan. Y más tarde dicen que no fue una devaluación. Anuncian que liberan el cepo, pero sigue ahí. Con otras formas, con otro nombre, con otros montos".
Y agregó:
- Evitan usar la palabra "blindaje", pero el acuerdo con el Fondo se le parece al del 2001. Aunque no la nombren, la palabra se asoma. Y la historia también. A los dólares que piden prestados los llaman "de libre disponibilidad".
- Y juran que no van a fugarse. Pero son los mismos que ya los fugaron antes. No pueden ocultar la verdad: los que siempre ganan, vuelven a ganar. Y los que viven de su trabajo, jubilación o esfuerzo, vuelven a pagar la cuenta. No creamos lo que dicen. Miremos lo que hacen.
Chau servicio público, hola actividad privada
Otra de las noticias que han circulado durante las últimas semanas tienen que ver con gente a quienes se veía con futuro en la política pero que se cortó repentinamente, porque la abandonan y se van a la actividad privada.
Siempre se ha dicho desde Memo que es bueno entrar al servicio púbico, pero también saber salir, para que no se vuelva un círculo vicioso de cargos y dependencia adictiva de los salarios y dietas del Estado.
El primer caso que llamó la atención es el de la concejala Florencia Décima, de Maipú, a quien le quedaban dos años de mandato y renunció para trabajar en otra cosa.
Según pudo recabar Memo, fuentes del kirchnerismo señalaron que "lo habló bastante con Anabel", en referencia a su líder, Fernández Sagasti. Pero no fueron otros motivos. Se la consideraba con futuro en su comuna, aunque allí el que manda es otro sector, el de Carlos Ciurca que contiene a Matías Stevanato
El otro caso es el de Roberto Ríos. Tampoco trascendieron las circunstancias, pero no son pocos los recambios que se han producido casi en silencio en la Ciudad de Mendoza, como fueron los de Rubén Zavi, Rodrigo Olmedo, Sebastián Fermani, Lorenzo Nieva y ahora Ríos. Es difícil identificar de memoria al gabinete completo.
Si bien estaba a cargo de Cultura, Ríos fue mano derecha de Ulpiano Suarez en la campaña presidencial de Horacio Rodríguez Larreta y un operador leal.
Escribió, en su despedida: "Concluye una etapa muy valiosa en lo personal y en mi carrera profesional. Fui parte de grandes equipos, con los cuales nos involucramos y llevamos adelante proyectos muy importantes para la transformación de la Ciudad. Pero en esta nueva etapa he decidido volver al sector privado".
Y más:
"Quiero agradecer a mi esposa, pilar fundamental e incondicional que siempre me acompañó, a mi familia y amigos. Al equipo de gestión, a todo el personal municipal y a mi queridísimo equipo de la secretaría con los cuales laburamos incansablemente día a día dejando todo. A los vecinos/as, comerciantes y a todos los actores del sector público y privado con los cuales trabajamos en conjunto".
Y finalmente:
"Muchas gracias al gran Intendente y amigo Ulpiano Suarez por la oportunidad de poder estar en su equipo, por la enorme confianza y todo lo compartido durante estos años en este camino que recorremos".