Qué implica la nueva reforma previsional que trae la Ley Bases

La abogada especialista Bárbara Schargorodsky explicó los principales puntos de las modificaciones propuestas en la nueva reforma impulsada en la Ley Bases que se tratará en el Congreso.

Uno de los puntos sobre los cuales se pone la lupa de la nueva Ley Bases presentada por el poder ejecutivo es la reforma previsional, la cual introduce una serie de cambios a los regímenes existentes y elimina la actual moratoria. La abogada Bárbara Schargorodsky, especialista en temas previsionales, habló con "Tenés que saberlo", por Radio Jornada 91.9, y explicó los puntos más importantes del proyecto.


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"No hay modificación en la edad jubilatoria. Hoy en nuestro sistema tenemos la edad jubilatoria en el ámbito privado de mujeres a partir de los 60 y hombres a partir de los 65, ambos con la posibilidad de continuar hasta los 70. La gente que no reúne los requisitos para poder acceder a una jubilación, o sea los 30 años, inevitablemente cobra la PUAM, que es a los 65 para ambos sexos. Eso está vigente y no cambia con la nueva modificación", explicó Schargorodsky.

La abogada si marcó la eliminación de la moratoria y que eso generó la confusión con el tema de la edad: "La gente que no puede acceder a la jubilación porque no tiene los 30 años de aporte, va a tener que tener acceso a un beneficio, que es a los 65 años, que este beneficio nuevo que es una prestación proporcional, un retiro proporcional. Todavía no se sabe cómo va a ser, pero si va a ser a los 65, por eso en los títulos aparece como que la nueva edad jubilatoria de las mujeres es a esa edad. Esto no es que sea cierto del todo, pero inevitablemente la gente que no se jubila con los 30 años de aporte, recién va a poder recibir un beneficio a los 65", señaló.

Para quienes ya están dentro del sistema de moratorias, la abogada explicó que lo lógico sería "que no pase nada y sigan cobrando con normalidad", aunque señaló como algo a tener en cuenta quienes han comprado aportes y están a menos de 10 años de jubilarse: "Ese escenario es más difuso, no sabemos qué va a pasar con esa gente, que viene pagando y comprando anticipadamente. Lo van a tener que establecer, lo tienen que reglamentar si se aprueba la derogación", marcó.

Schargorodsky explicó que la Pensión Universal al Adulto Mayor (PUAM) continúa vigente y que la nueva ley habla de un beneficio de prestación proporcional por retiro: "El piso de lo que va a cobrar la gente es el mismo de la PUAM, el 80% del haber mínimo. Quiere decir que la gente que no tiene aportes va a cobrar el 80% del haber mínimo y la gente que tiene aportes, no sabemos todavía cómo se va a diferenciar, pero aparentemente va a cobrar algo más", señaló.

Si bien esto hace que el sistema tenga otra sustentabilidad, Schargorodsky señaló que la revisión debe realizarse en por qué la gente utiliza tanto estos sistemas, marcando que el años pasado 8 de cada 10 jubilados lo hizo por intermedio de una moratoria: "Ojalá no necesitáramos moratoria, por supuesto que genera más gastos por parte del Estado, pero me parece que el punto de análisis es ver la cuestión de la falta de registración, la cuestión impositiva, lo que hace que el sistema se financie".

La abogada también señaló que la informalidad está más presente entre las mujeres que entre los hombres y que son quienes más entran y salen de los trabajos, a la vez que marcó la importancia de rever la situación laboral: "Hay que atacar la antesala a esa situación, prevenir y prever eso. Por supuesto que el sistema es complicado, pero ¿qué respuesta da el Estado cuando tenés este escenario? No es una cosa excepcional, es una situación medio generalizada. El 80% del año pasado se jubiló con moratoria", explicó.

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Luego, tras explicar que los regímenes especiales no ingresan en estas reformas, la abogada explicó que los sistemas previsionales están en cuestión en el mundo, sobre todo por un tema de longevidad: "Cuando fueron planteadas las leyes, fueron con gente que a los 60 años ya era grande. Hoy no, la gente de 60, 65 años está activa, tiene mucha más vitalidad que en otros años. Hay que replantear un poco este punto, pero no hay que descontextualizar: está buenísimo que la gente pueda trabajar hasta los 60, 65, pero en un lugar en donde haya trabajo y posibilidades, sino quedan desamparados".

Finalmente, señaló que desde 2018 en nuestro país está la posibilidad de poder continuar trabajando hasta los 70 sin que el empleador intime a un trabajador: "Es un derecho con el cual al ente que está con trabajo y quiere quedarse puede hacerlo, porque saben que la jubilación es un monto mucho menor", concluyó.

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