Marisa Uceda: "Ramón se comporta como un opositor responsable"
La diputada nacional, que encabezó la lista del Frente de Todos en 2019, se refirió a la convivencia en el Congreso entre los legisladores mendocinos. Afirmó que "Anabel se puso a la cabeza de las gestiones por Portezuelo" y disparó contra el Gobierno de Suarez: "Son caprichosos o saben que van a fracasar y buscan un culpable".
"Se comporta como un opositor responsable. Hemos dejado de lado diferencias y hemos gestionado juntos por Mendoza. Sobre lo electoral, pensar en una alianza es muy pronto", destacó la diputada nacional Marisa Uceda (Frente de Todos) sobre su colega de Protectora, José Luis Ramón. Asimismo, destacó que en temas centrales para Mendoza, ha habido unión entre los legisladores de la provincia y consideró que "Anabel se puso a la cabeza" de las gestiones por Portezuelo del Viento.
En una entrevista con Memo, Uceda también se refirió a las diferencias con el Gobierno de Rodolfo Suarez por el Presupuesto 2021. Ratificó que el peronismo tuvo voluntad de diálogo y lanzó: "Hay dos opciones: son unos caprichosos o saben que van a fracasar y buscan un responsable". "Si hay una postura tan intransigente, uno se tiene que quedar esperando que el diálogo lo abra el responsable de gestionar la provincia de Mendoza", añadió.
Sobre sus colegas en el Congreso, destacó la excelente relación que tiene con sus compañeros de bloque: Alejandro Bermejo y Omar Félix. Y agregó sobre los diputados de Juntos por el Cambio: "Con Claudia Najul tengo un diálogo excelente, es una mujer muy racional. Lo que pasa es que sabemos quién lidera a los diputados PRO-radical (por Alfredo Cornejo). No es una persona a la que le guste mucho el diálogo y articular".
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-¿En qué lugar de Mendoza vivís?
-Yo vivo en Capital, en la Sexta Sección.
-Es un departamento esquivo para el peronismo desde el '83.
-Es raro lo que pasa. Por ejemplo, la Sexta Sección es un barrio de trabajadores. Yo vivo en lo que era el barrio Ferroviario. Las bases del peronismo vivían ahí. Tenemos que trabajar y convencer, seguir dando la pelea.
-Igualmente hubo un intendente que era acompañado por el peronismo y que incluso era amigo de Cristina: el Viti Fayad.
-Hay algunos compañeros que dicen que el Viti fue el radical más peronista. Algo de eso había.
-¿Qué diría Fayad sobre las gestiones de Cornejo y Suarez?
-Yo me acuerdo de algunos exabruptos del intendente. Creo que no estaría de acuerdo con ellos. Él no comulgaba con algunos métodos y formas de hacer política de Cornejo y lo dijo muchas veces. No sé si le gustaría la gestión de Suarez. El Viti era un tipo más pasional.
-Pero con Suarez eran amigos.
-Puede ser. Pero en la política podés ser amigo y no coincidir en cómo llevás adelante la gestión.
-¿Qué se viene ahora en el peronismo con la lista partidaria de unidad que encabeza Anabel Fernández Sagasti?
-Lo mismo que se viene dando desde 2019. Nosotros fuimos a una interna con Anabel y se ganó. Al otro día, intentó forjar una unidad y la consiguió. Desde entonces, trabajamos con un compromiso muy grande sobre la unidad con todos los sectores. Anabel demostró que llegar a la presidencia del PJ hoy es la consecuencia de mucho trabajo. Ahora, Anabel seguirá apostando a la unidad porque para que el peronismo de Mendoza vuelva a ser una alternativa, se debe lograr desde la unidad.
-Uno imagina que más cerca de las elecciones esa tranquilidad que se observa en el PJ podría quedar atrás.
-Lo bueno es que Anabel representa la unidad de un partido que tiene muchísimos representantes para poner en distintos lugares de gestión: intendentes muy exitosos, cuadros técnicos brillantes, una senadora nacional que además gestiona obras para Mendoza, y lo mismo sobre los diputados. Es una virtud más que un problema.
-¿Se rompió definitivamente el vínculo con Suarez?
-Depende del gobernador. El que dio el portazo fue él (sobre la negociación por el Presupuesto). Nosotros podemos tener voluntad de diálogo y lo demostramos. Él dijo que si no eran las obras que él quería, no era nada. Lo mismo con el roll over. Si hay una postura tan intransigente, uno se tiene que quedar esperando que el diálogo lo abra el responsable de gestionar la provincia de Mendoza.
-Pero en el Congreso Juntos por el Cambio acompañó pedidos similares del Gobierno nacional.
-Es mentira. Primero que el roll over no está permitido a nivel nacional y nosotros no le dijimos que no al endeudamiento en Mendoza. La conducta que ellos tienen en el Congreso no es tan pacífica. No hay que ser hipócritas, hay que hablar con la verdad: el peronismo propuso un plan de obras con endeudamiento, lo mismo con el roll over. Ante esto, hay dos opciones: son unos caprichosos o saben que van a fracasar y buscan un responsable.
-¿La culpa, según ustedes, es sólo de Suarez?
-De la gestión radical, Suarez es una continuación.
-¿Suarez y Cornejo son lo mismo?
No creo que Suarez sea Cornejo. Creo que no gestionan de la misma manera, pero tienen un modelo de provincia similar.
-¿Cómo llegaste a ser candidata a diputada nacional en 2019?
-Me enteré por Anabel. Fue una sorpresa y de ahí en más fue una montaña rusa. Los militantes políticos militamos por un montón de motivos; es mentira que no queremos ocupar cargos de gestión, porque entendemos que es una herramienta para transformar la realidad. Pero no estaba dentro de mis planes. Yo estaba cómoda entre los cuadros técnicos asesorando a Anabel y a Marcelo Aparicio.
-¿Cómo fueron tus inicios en la militancia?
-Siempre me interesó. Yo entré en el último año del menemismo a la facultad, tengo 41 años, y los que crecimos en el menemismo sabemos lo difícil que fue para nuestras familias de clase media remarla...
... decís menemismo pero era un gobierno peronista.
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-No, el menemismo no es peronismo. El peronismo es Néstor y Cristina, es abrir universidades públicas y no arancelarlas. Yo viví la amenaza permanente de Cavallo. El peronismo apuesta a la industria nacional y el menemismo la destruyó. El menemismo apuesta al endeudamiento y el peronismo a desendeudar. Menem es el modelo de Macri. Yo decía que Macri era volver a los '90 pero sin Nirvana, lo que era bastante aburrido.
-¿Y Duhalde es peronista?
-A mí no me gusta, creo que debería mantenerse más cauto. Es un buen momento para retirarse como un expresidente que ayudó a la recuperación de una Patria que estaba devastada, pero no es de mis dirigentes preferidos.
-Empezaste a militar con el peronismo gobernando en Mendoza con Lafalla.
-Sí, ahí nomás ganó Iglesias. Empecé a militar en la Franja Morada que no era la Franja radical, era la alternativa de la defensa de la educación pública. Duré muy poquito porque apenas asumió De la Rúa estábamos tomando la universidad porque López Murphy quería arancelar las universidades públicas. Estaba muy decepcionada. También había militado en el barrio Municipal y me acercaba a grupos peronistas a participar. Y después llegó Néstor y me empecé a enamorar de la política y con Cristina fuertemente. Igual, yo tenía que hacerme una carrera y estaba enfocada en formarme y vivir de mi profesión. Hasta que ya en 2013 decidí que era mi momento y me acerqué a La Cámpora.
-¿Cómo llegaste a La Cámpora?
-Por compañeros de la facultad que habían conformado Amjus, que es una asociación de abogados y abogadas por la justicia social. Ellos militaban en La Cámpora y me uní.
-"Al PJ de Mendoza lo maneja La Cámpora". ¿Es así? ¿Por qué pensás que se dice eso?
-Me da risa la estigmatización de La Cámpora; muchas veces pretenden bajarnos el precio. Somos una agrupación dentro del peronismo que lleva las banderas de Perón y Evita. Nos hemos formado mucho: no pasamos este tiempo mirando por la ventana. Nuestro objetivo es poder gobernar Mendoza y hacerlo para que los mendocinos y mendocinas tengan una mejor vida y para eso te tenés que formar.
-¿Es lo mismo Néstor y Cristina?
-Cuando pienso en Néstor y Cristina pienso en el proyecto de país que llevaron adelante juntos. Para mí son una Argentina en crecimiento, desendeudada, que apuesta a su industria nacional y al futuro de los pibes y las pibas. Es un proyecto político. Vos podés gestionar de manera distinta, pero el proyecto es el mismo, el que estamos intentando replicar en el medio de la pandemia.
-¿Por qué el peronismo no se hace cargo de María Estela Martínez de Perón? Fue la primera presidenta democrática que tuvo Argentina, mucho antes que Cristina.
-Cristina fue la primera que llegó por el voto popular, Isabel era la vice de una fórmula y con la muerte de Perón llegó a ser presidenta. Pero igual: ¡cómo no nos vamos a hacer cargo! Nos duelen muchas cosas que pasaron en ese momento. Nos hacemos cargo de todo.
-¿Cómo viviste la etapa posterior a la interna de 2019 con la lista de Bermejo?
-La convivencia es excelente. Yo encontré en Alejandro (Bermejo) un compañero fenomenal (después de perder la interna por la gobernación, Bermejo compartió con Uceda la lista de diputados nacionales), primero para caminar juntos y después en la Cámara. Entiende que para el peronismo de Mendoza lo mejor es la unidad. Me enseña muchas cosas porque después de 12 años de una intendencia súper exitosa... Además, valora muchísimo el gesto de Anabel en la construcción de la lista.
-¿Y con Omar Félix, el otro diputado nacional del PJ, cómo te llevás?
-También. No caminé con él, pero es muy buen compañero. Yo lo vuelvo loco porque es el que más sabe, en la época del Presupuesto lo llamé mucho. Siempre ha estado dispuesto.
-¿José Luis Ramón debe incorporarse directamente al Frente de Todos?
-No es algo que me haya planteado. Me parece que tiene un espacio construido y que se comporta como un opositor responsable. Hemos dejado de lado diferencias y hemos gestionado juntos por Mendoza. Sobre lo electoral, pensar en una alianza es muy pronto.
-¿Qué opinás de la renuncia de la ministra María Eugenia Bielsa?
-Me imaginaba que venían algunos cambios. Gestionar no es fácil, menos en pandemia. Entiendo que los cambios siempre son para mejor. Es una gran dirigente, entiendo que fue reemplazada por un compañero que también es muy buen dirigente (Jorge Ferraresi). Los cambios se hacen en pos de la gente, lo importante son las gestiones más allá de los nombres. Es una decisión del presidente y no se cuestiona.
-¿Hay funcionarios que no funcionan, como dijo Cristina?
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-A mí no me gusta ser exégeta de Cristina y no me gusta cuando todo el mundo lo hace. Tiene todo el derecho a decirlo y en lo personal a mí me cuesta mucho hacer una evaluación crítica de cualquiera en este contexto, sea el presidente o el gobernador. Me gustaría que Suarez hubiese hecho cual o tal cosa, pero hacer una evaluación crítica cuando se ha gestionado en pandemia sería muy liviano. Prefiero hacer ese análisis en una situación más parecida a la normalidad.
-¿Quién es el Maradona del Gabinete nacional?
-Creo que Guzmán... me gustaría más decirle Messi, porque para mí Diego es lo más. Tenemos muchos Mascheranos, más Luchas Aymar, jugamos en equipo todos y todas.
-¿Y entre los intendentes del PJ?
-Nuestros intendentes y nuestra intendenta han demostrado una capacidad de gestión y diálogo tremenda. Han estado cada vez que el gobernador los ha convocado. Es invalorable el trabajo que han hecho.
-¿No falta que una vez por todas haya un trabajo en equipo en el Congreso por los intereses de Mendoza? Sin importar la procedencia partidaria.
-Yo con Claudia Najul tengo un diálogo excelente, es una mujer muy racional. Lo que pasa es que sabemos quién lidera a los diputados PRO-radical (por Alfredo Cornejo). No es una persona a la que le guste mucho el diálogo y articular.
-Pero hay temas en los que se tendrían que dejar de lado las pequeñas o grandes diferencias. Algunas esperábamos una foto de los 13 legisladores de Mendoza, todos juntos, por Portezuelo del Viento cuando la obra se puso en duda.
-No estuvo esa foto, pero la iba a haber. Íbamos a viajar todos a Portezuelo. Igual, después todos hicimos gestiones a favor de Portezuelo y Anabel se puso a la cabeza. Yo he estado con ella cuando ha estado quemando teléfonos para garantizar los desembolsos y que las reuniones del Coirco avanzaran, en esto no hay cuestiones partidarias. Entendemos el valor que tiene la obra para la provincia y así nos comportamos. No hubo disputas en cuanto a ello.
-¿Alberto tiene la voluntad de intervenir en el Coirco para que la obra se haga?
-Alberto nunca puso en duda. Acá se tergiversaron algunas expresiones como algunas veces suele pasar.
-O se manifestó mal el presidente.
-Él lo que quería era un consenso, y jamás puso en riesgo los desembolsos, jamás dejó de recibir a Suarez. El presidente entiende que esta obra representa una obra épica para nosotros, para la energía, para el sur. Yo nunca sentí que Alberto Fernández fuera a poner obstáculos. No he hablado con él, pero no dudo que va a apoyar la obra cuando avance.
-¿Qué pensás que pasará esta vez con el debate por la legalización del aborto?
-Yo lo he dicho durante toda la campaña: es un tema de salud pública. Hablamos de la vida de mujeres que mueren o que ven dañada su salud reproductiva por abortos clandestinos. La penalidad del Código es injusta porque penaliza a la mujer, y no sirvió. Esa prohibición legal no sirvió porque se realizan 300 mil abortos al año, porque tenemos un montón de mujeres que mueren y otras que quedan dañadas en su salud para siempre. La solución tiene que venir del Estado. Aspiro a que el debate en el Congreso sea serio, con el ojo puesto donde tiene que estar, alejado de falacias médicas, morales y religiosas. Que el debate termine con una ley para que se nos dejen de morir mujeres.