Herve Fischer: "Necesitamos creer más en el ser humano que en las computadoras"
Escritor, pintor, cinesta y filósofo franco canadiense, Gerve Fischer es autor de una veintena de libros icónicos de reflexión sobre el arte y ahora, sobre el humanismo y lo digital.
Estas frases de Herve Fischer que sacamos del archivo de entrevistas del programa radial "Tormenta de ideas", aquel que desde Mendoza acumuló el récord de haber entrevistado a una treintena de expresidentes, se produjo en 2016. Valga el dato para saber que no se había desarrollado aun lo que hoy conocemos como Inteligencia Artificial y era un momento en que se discutía -al inverso de lo que ocurre hoy- introducir los celulares en los espacios educativos del mundo para ampliar el espectro de los estudiantes.
Herve Fischer confiaba en aquella nota realizada hace 8 años, optimista, en que la humanidad encontrará su progreso en sí misma y no en la tecnología. "Eso llegará solo; concentrémonos en lo nuestro", dijo desde Montreal, ciudad canadiense en la que reside.
Multiprofesional, llamarle polifacético sería un lugar común y, probablemente, una contradicción, habida cuenta de que todos los caminos conducen a su centro: la filosofía. Reconocido en todo el mundo, ha dejado su pensamiento y acción en una obra que incluye, hasta ahora mismo, unos 20 libros, aunque sus artículos, provocadores, se expanden permanentemente por el mundo.
Creó en 1990 el Festival Teleciencia, del que fue director general hasta 2002 y en 1993 el M.I.M. (Mercado Internacional del Multimedia). Es cofundador y presidente de Ciencia Para Todos, (agrupación de organismos quebequeses de cultura científica y técnica) y de la Federación Internacional de las Asociaciones de Multimedia (1997), organizando las Cumbres internacionales de internet y multimedia de Montreal, Abu Dhabi, Montreux, Beijing, Shenyang.
Fue titular de la cátedra Daniel Langlois de tecnologías numéricas y bellas artes de la Universidad Concordia de Montréal, responsable de la concepción de un Médialab quebequés, Hexagram, en consorcio entre las universidades Concordia y UQAM (2000-2002). Es ahora Profesor asociado y director-fundador del Observatorio Digital Internacional de Montreal, UQAM.
Recibió con Ginette Major el Premio Leonardo por su implicación en favor del arte y de la ciencia (MIT Press, 1998), artista invitado en los Encuentros Imágenes y Ciencia del CNRS (Francia). Conservador de la exposición Cym@r de arte y tecnología de Weimar, capital cultural de Europa en 1999. Es miembro de la Comisión UNESCO canadiense. Caballero de las Artes y las Letras y de la Orden Nacional del Mérito del gobierno francés. Ha recibido la Distinción Cultural cubana, 2009, el Premio Cartier del Webcom Montreal, 2011.
En su diálogo con el programa "Tormenta de ideas", Fischer porfió en que "el imperio de Hollywood será derrotado". Pero además, dejó sembradas semillas de futuros debates, fue -en cada respuesta- abriendo puertas hacia discusiones pendientes que prometen ser cada vez más refrescantes.
Dejamos aquí algunas frases de la entrevista, empezando por la "definición cero", como punto de partida: "Necesitamos creer más en el ser humano que en las computadoras".
- "La Humanidad nunca ha tenido un poder tan grande como el digital. Esto representa todo un desafío para la evolución humana".
- "Vivimos en un mundo que tiene una economía imaginaria, no de recursos naturales sino financiera. La especulación funciona como un videojuego".
- "Es muy peligrosa la disfunción entre economía imaginaria y la economía real del presupuesto de cada familia. Cuando juegan a ella, no se dan cuenta que matan personas".
- "El progreso de la ética es más importante que el tecnológico. Esto último lo vamos a encontrar igual".
- "Va a llegar el día en que va a ser muy difícil distinguir entre el ser humano y la realidad virtual. Se vive una hibridación".
- "Vivimos un integracionismo. Vivimos en dos mundos: el tradicional y el digital".
La entrevista a Herve Fischer fue realizada junto a los periodistas Santiago Montiveros y Mariano Bustos, con producción de Franco Pereira.