Así era la casa de Rufino Ortega en Rodeo del Medio
El perfil de Facebook "Mendoza Desconocida" recopiló la información publicada en 1928 por la prestigiosa revista mendocina "La Quincena Social". Hermosas fotos de la residencia de Rufino Ortega.
El perfil de Facebook "Mendoza Desconocida", recomendado por Memo, ofreció imágenes que fueron publicadas en 1928 por la prestigiosa revista La Quincena Social de la residencia de Rufino Ortega, el político y militar que comandó la IV División Expedicionaria al Desierto, dirigida por el también teniente general Julio Argentino Roca y que fue gobernador de Mendoza entre 1884 y 1887.
Se trata de las fotos de la residencia en Rodeo del Medio, Villa Ortega, o Parque Ortega.
El texto y las imágenes son los siguientes:
"RODEO DEL MEDIO. VILLA GENERAL ORTEGA. Rememoración Histórica
La personalidad del Teniente General de la Nación don Rufino Ortega, en sus principales rasgos de benefactor y filántropo, es aún poco conocida en el país. La opinión nacional, salvo raras excepciones, ha visto en él, solo los valores representativos que las charretas de General, conquistadas en largas y conceptuosas campañas le conferían dentro del escalafón militar, y de cuyo marco supo destacarse con relieves vigorosos, sobre el fondo de sus acciones de armas, como el arquetipo del militar pundonoroso y brillante, atento a las responsabilidades del cargo, consecuente a las exigencias disciplinarias y sobre todo, cultor de nuestra tradición republicana, a cuyo servicio consagró los mejores años de su vida por fuerza atávica y derechos ancestrales.
Espíritu excelente, donde las grandes cualidades del guerrero compartían en hermandad de ideales con las virtudes de su corazón patricio, tuvo en la persecución de sus anhelos toda la perseverancia de los grandes caracteres y consiguiendo al fin que sobre las extensas tierras que vinieron a sus manos en calidad de patrimonio, surgieran centros urbanos de positiva trascendencia para la vida edilicia de la provincia de Mendoza, fraccionando sus campos, donando terrenos y volcando generosamente de su peculio propio, importantes sumas de dinero en pro de la cultura intelectual y perfeccionamiento estético de las nuevas poblaciones.
Don Rufino Ortega, encaró el problema sociológico de su época, por el punto vulnerable y fundamental que ya indicara Sarmiento en la vulgarización del concepto democrático de Plutarco: "gobernar es poblar", y así es como floreció la magnífica villa de Rodeo del Medio con el magnífico Parque General Ortega quizás uno de los más soberbios que se hayan levantado por el esfuerzo privado, en el triple concepto moral, material y estético, y al cual consagró afanosas predilecciones el ilustre guerrero.
El General, deseando vivamente formar una villa, se desprende de una cantidad de terreno de sus inmensas propiedades, lugar de lo más floreciente, tanto por su producción como por su ubicación, resolviéndose a realizar en remate público, lotes no menores de 1000 m c/u y sin base. a propósito y objeto de ver poblado el lugar adecuado y delicioso del paraje; contiguo a la estación del ferrocarril y unido a la escuela Don Bosco y Colegio María Auxiliadora y Escuela Nacional, teniendo como límite el Carril Nacional, paso obligado de los demás pueblos y departamentos del Este. Esta villa fue formada, después de los remates efectuados los años 1906 y 1908; contándose hoy una población en su radio urbano de no menos de 6.000 habitantes.
Su trazado, forma diagonal, la hace más característica y bella por sus originales edificaciones y su uniformidad, contándose muy resaltantes las arboledas que la adornan, sistema de regadío cómodo para las huertas de cada lote; agua a bomba, muy saludable. Su esposa, la señora Leonor S. de Ortega, cultivando igualmente el propósito que perseguía el General, se resuelve en el próximo mes de Abril a Mayo, realizar en remates públicos la venta en igual forma que la anterior, el restante de los lotes para tener dentro de poco tiempo una población compacta y una villa formada ya indudablemente de 10.000 habitantes; para poder exigir la atención de los poderes públicos, para atenderla en todos sus servicios, como agua potable, alumbrado y demás servicios indispensables para la higiene y la salud pública. Su vida comercial puede decirse que es propia, tiene la Colonia Bombal donde hay sus grandes chacras agrícolas, especializándose en la sementera de las papas y grandes alfalfares, después cuenta con dos establecimientos educacionales, que diciendo su realidad, son el orgullo y vida de la población; centenares de niños de ambos sexos concurren, tanto de la misma villa como de los pueblos cercanos, donde obligan a sus familias a la continua asistencia y viajar a menudo.
ESCUELA DON BOSCO Y COLEGIO MARÍA AUXILIADORA
La Escuela «Don Bosco» es obra ya muy conocida y difundida en toda la Europa y América del Sud, pero si nadie puede dudar que para el progreso de toda esa obra, se ha necesitado el concurso de las personas pudientes y la decisión generosa para verla progresar: El General Rufino Ortega, después de su retiro de las filas, de su acción activa en el Ejército, se radicó definitivamente en su residencia habitual de Rodeo del Medio, para cooperar eficazmente a la Obra Salesiana; en la que ha contribuido personalmente, con sus alientos a los educandos, y materialmente, en cuanto a sus solicitaciones y voluntarias, siendo una de las cuatro instituciones donde se ha lamentado con verdadero pesar la desaparición de tan venerable factor.
CLUB PASO DE LOS ANDES
Poco antes de su deceso, a fin de intensificar el ejercicio físico en la juventud estudiosa que concurre a la Escuela «Don Bosco» y para formar un «Field» donó 8.500 metros de terreno en el mismo centro de población, donde es muy concurrido, especialmente los días festivos, para desarrollar el sport de «foot-ball», donde se han disputado entusiastas encuentros, figurando siempre el premio «General Ortega», que es en realidad el que ha llamado el interés entusiasta de la juventud.
EXPLORADORES Y GIMNASTAS
Para la iniciación de tan laudables propósitos, el General Ortega fue su alentador y fomentador: contribuyendo con sus palabras a sus pequeños "soldados" a formar el cuerpo de exploradores, ofreciendo para estímulo el premio «General Ortega», que al final de cada año escolar se distribuye a los jóvenes distinguidos.
PARROQUIA MARÍA AUXILIADORA
La señora Leonor, esposa del General, con su voluntad generosa, en la que forma la escolta de las damas de honor del Santuario, ha contribuido con su cooperación espiritual a los feligreses del pueblo, siendo una de las protectoras más desprendidas -poniendo, por ejemplo, la donación del Armonium, tal vez el mejor que se encuentra en la Provincia.
PARQUE GENERAL ORTEGA
Nadie puede poner en duda, la magnitud de esta obra, que es visitada y elogiada por cuantos la han visitado, su hermosura y su gusto para formarlo sólo se deben a la dirección del General Ortega, que en todos sus contornos de apreciación, es un orgullo hermoso, muchas veces comparado con el Parque General San Martín; la distribución de paseos, avenidas, jardines, glorietas, etc., y el lago especialmente; hace un conjunto de verdadera obra, costosa, por supuesto, pero que el General, a fin de dar expansión de las familias, no omitió nunca sacrificio para sostenerlo con todo el cuidado necesario a fin de hacerlo expansible y de verdadero recreo. Allí fue el lugar elegido por todas las Colonias que correspondían a los «Aliados» para hacer el gran festejo del triunfo, fiesta que tuvo los contornos más salientes de las reuniones realizadas en la Provincia. Las fiestas que por habitual acostumbraba todos los años a realizar el General, la Noche Buena, llenaba el Parque, porque su propósito generoso de esas reuniones lo era, la distracción a su pueblo, que él fundó, a la distribución a las familias y niños de los obsequios que son acostumbrados tradicionalmente.
Sus último años los pasó lleno de gozo en sus acostumbrados paseos diarios al Parque, donde contemplaba el esfuerzo de su obra, que hoy queda para ser admirada por todos los que la visitan, y admirablemente proseguida y embellecida por el esfuerzo de su digna esposa y de su activo administrador, el señor Julio Palmeiro (hijo)." (La Quincena Social, 1928)