ATE y un paro de 96 horas que perdió fuerza antes de empezar
El gremio que encabeza Roberto Macho volvió a rechazar la propuesta del Ejecutivo provincial y se mostró muy confrontacional. Anunció un paro que no tendrá el mismo impacto sin el SUTE.
En la reapertura de paritarias que llevó adelante el Ejecutivo provincial después de conocer el índice de inflación de julio, se dieron dos escenarios muy diferentes. Por un lado el SUTE avanzó con su postura firme, pero dentro del marco de las negociaciones, y por el otro ATE que instaló un ambiente que es marca registrada de Roberto Macho.
En la tarde del viernes quienes circularon por la zona de la Subsecretaría del Trabajo, en pleno microcentro mendocino, se encontraron con una escena compleja y violenta. Al rechazar la propuesta del gobierno desde ATE encendieron cubiertas y casos y complicaciones para quienes viven, trabajan o pasaban cerca de ese lugar.
En ese contexto, Roberto Macho anunció un paro de 96 horas y llamó a un nuevo plan de lucha desde el lunes. Sin embargo, a medida que avanzó el día -y puntualmente en la noche- la medida perdió fuerza antes de empezar, ya que el SUTE decidió bajar a las bases la propuesta del Ejecutivo provincial y darle una respuesta el viernes de la próxima semana.
Las anteriores movilizaciones tuvieron un fuerte impacto y recordaron viejos tiempos en Mendoza, pero la base de todo es impacto está dado por el gremio docente, el cual se plegó de manera importante, cuestión que no se daba desde que se instaló el ítem aula.
Ahora, el paro de 96 horas de ATE no es lo mismo sin el SUTE movilizado. Aunque no deja generar molestias, pierde fuerza desde lo gremial y desde lo político.
