Impresiones de una visita al Chaco
La aventura del Dr. Eduardo Da Via, quien junto a Roberto Petrich viajó al Chaco para completar una ilusión: conocer a las etnias preexistentes locales. Aquí, el relato.
El Territorio Nacional del Gran Chaco fue creado el 31 de enero de 1872 mediante un decreto del presidente Domingo Faustino Sarmiento nombrando al comandante de las fuerzas argentinas acantonadas en Asunción, Julio de Vedia como gobernador.
Chaco fue declarada Provincia mediante Ley 14037, del 8 de agosto de 1951, y por Ley del 20 de diciembre de 1951 pasó a denominarse Provincia Presidente Perón. En el año 1955, bajo régimen de facto, la provincia volvería a su antigua denominación.
En cuanto al origen del nombre CHACO proviene del quechua chacu con distintos significados pero en relación a la cacería:
Lugar de caza
Montería con ojeo, que hacían antiguamente los indios de América del Sur estrechando en círculo la caza para cobrarla.
El Chaco ha sido históricamente una de las regiones más pobres de Argentina y actualmente ocupa el último lugar tanto en términos de PBI per cápita como en el Índice de Desarrollo Humano.
Sin embargo, estimo que para la mayoría de los argentinos, que en nuestro fuero íntimo prácticamente ignoramos a esa notable provincia, opacada por la relevancia de sus vecinas del NOA y de la Mesopotamia, más el agregado de su limítrofe más austral, la poderosa Santa Fe.
Y es así como junto a su humilde hermana Santiago del Estero, que, de no ser por sus famosas Termas de Río Hondo, yacerían juntas en la indiferencia del resto del país; para colmo y junto con Formosa, conforma el hogar para la mayor parte de etnias nativas sobrevivientes: Wichí, Toba Qom, Moqoit, Pilagá, Guaraní, Ava Guaraní, Sanapá, Enxet Sur, Chorote, Ayoreo.
Y sin necesidad de rompernos las vestiduras es absolutamente necesario aceptar que los argentinos no nos caracterizamos por preocuparnos de los nativos sobrevivientes a todas las atrocidades a que fueron sometidos por extranjeros y connacionales y son contados con los dedos los que deciden como lo hiciera yo con un gran amigo, ir a visitar a los Qom e interiorizarnos de sus vidas, especialmente en la intimidad del famoso Impenetrable, precisamente una de las dos grandes atracciones que nos ofrece NUESTRO CHACO
Con esas etnias norteñas, dueñas legítimas del escaso territorio otorgado y del que les quitaron, sucede lo mismo que con loa huarpes en Mendoza; no están discriminados, simple y terriblemente son ignorados.
Previa pernoctación en la ciudad de Santa Fe y circulando por la ruta nacional 11, que goza de nombre propio: Juan de Garay, por Decreto n. º 25.954/44, muy transitada, arribamos a Resistencia por el sur.
Ya desde lejos se advierte el contorno de la ciudad y lo primero que llama la atención, tenida cuenta su supuesta pobreza, es la cantidad de edificios de departamentos de gran altura, la mayoría superan los 10 pisos, todos en un radio relativamente pequeño en pleno centro de la capital chaqueña.
La segunda sorpresa es la cantidad de motos de pequeña cilindrada circulando a toda velocidad y en lucha explícita con los automóviles que también circulan así mismo rápido y sin respetar las tácitas normas de tránsito como lo es las prioridades de paso, reglamentadas por disposiciones de orden nacional y que parecen desconocer los chaqueños.
Pero lo que más sorprende es que viven apurados, en claro contraste con su hermana Santiago del Estero, donde la parsimonia en la circulación tanto de vehículos como de peatones, y la prudencia en el uso de la bocina, llaman poderosamente la atención.
El apuro para ir desde hacia ninguna parte o necesariamente a trabajar es parte principal de las enfermas ciudades modernas, especialmente en los países más ricos con todas sus deletéreas consecuencias.
Es una ciudad moderna con numerosos comercios y supermercados de firmas desconocidas por nosotros y con el infaltable "shopping" al que por cierto no fuimos.
Paradojalmente, es de destacar la predisposición de los peatones a detener su marcha y ayudarnos cada vez que requeríamos indicaciones para encontrar ciertos puntos o para salir de la ciudad. Prestos a la colaboración, más de una vez emplearon los celulares para mostrarnos, acercándose al automóvil, dónde estábamos y por dónde continuar, un gesto encomiable difícil de ver en las grandes ciudades, donde la gente vive atemorizada y reacia a prestar ayuda por temores desgraciadamente bien fundados...
Bien, luego de este introito orientativo paso a explayarme en la primera de las dos atracciones exclusivas que poseen los habitantes y de las cuales son con justicia muy orgullosos; en tanto las ignoramos la vasta mayoría de los argentinos.
En plena capital, periférico al microcentro, se encuentra el Parque 2 de Febrero cuyo nombre se debe a la llegada de los primeros colonos, la mayor parte friulanos provenientes del Friuli región histórica y geográfica del noreste de Italia que corresponde a las actuales provincias de Údine, Pordenone y Gorizia y a un pequeño sector de Venecia.
Más allá de la belleza como parque y lo muy cuidado que está, su fama deviene de ser el Parque de las Esculturas, en realidad estas obras de arte se encuentran en numerosos puntos de la ciudad, orgullosamente llamada por sus habitantes La Ciudad de las Esculturas.
Y no es para menos, más 700 ejemplares la convierten en una ciudad única, y el Parque concentra las más valiosas, siendo además el lugar en que cada dos años se celebra la Bienal Internacional de las Esculturas, con la participación de artistas de más de 100 países, que o envían su obra preferida o directamente la tallan a la vista del público, en pleno parque que les brinda las herramientas necesarias.
La Fundación Urunday es el alma mater de este arte, que toma su nombre del árbol homónimo natural de la zona y que como sus integrantes sostienen, "Resistencia se esculpe y de esta impronta volumétrica y policromada nace la Fundación Urunday, en noviembre de 1989. Una gestación que tiene como consigna permanente unir a los escultores de Argentina, de América y del mundo, de cobijarlos en su tierra, de desafiarlos a crear en cada nuevo concurso. Generando acontecimientos hasta entonces inéditos en el país, que se irguieron como inagotables proveedores de obras que enriquecen un patrimonio único.
Desde el Primer Concurso de Escultura en Madera en la Plaza Central, en 1988, hasta las internacionalmente prestigiosas Bienales del Chaco de nuestros días, la Fundación Urunday trabaja incansablemente para hacer de cada concurso, una verdadera celebración de la identidad de los chaqueños.
La trascendencia alcanzada por estos concursos ha logrado insertar a Resistencia en los circuitos internacionales de escultura y desde el año 1997 cuentan con el apoyo de la UNESCO, convirtiéndose en uno de los más importantes escenarios del mundo de esta disciplina artística".
Cada bienal dura una semana y al final se seleccionan 10 obras de las que un jurado integrado por escultores, otra excepción, son todos entendidos, sin dar les lugar a sindicalistas ni políticos; como decía, de esas diez obras saldrá elegida la ganadora, que es premio adquisición para la colección del anfitrión.
Para colmo de bienes, desde el año 2022 el Parque cuenta con su tesoro más apreciado: una copia a escala del David de Miguel Ángel, emplazada de tal forma que se la divisa desde el exterior del predio:
En la placa reza: "EL SUEÑO DE FABRICIANO", corresponde pues una breve reseña de este artista que llevó escultura a niveles internacionales, hijo de un hachero y de una nativa, desde niño mostró su extraordinaria habilidad para la talla en madera la que realizaba en al bosque donde lo llevaba su padre en la intención de que aprendiera pronto los secretos de su humilde oficio.
La bienal comenzó como un sueño de dos escultores, Fabriciano Gómez y Mimo Eidman, en 1988, quienes organizaron un concurso de talla en madera que se realizaba en la plaza 25 de Mayo de la ciudad de Resistencia. Hoy es una de las bienales más prestigiosas del mundo.
Pero el gran sueño de Fabriciano fue siempre el de tener una copia exacta del David de Miguel Ángel, máxima expresión de su arte según sus propias palabras, emplazada en su amado Parque de las Esculturas.
Llegó a la cúspide, conquistó Europa y conoció las esculturas más famosas del mundo occidental; allí nació su admiración por El David concomitantemente con su sueño casi iluso de tener una copia en Resistencia.
No le alcanzó su rica vida para verlo, pero hoy el mundo del arte la admira, obra de una empresa de 3D bonaerense y de la Facultad de Ingeniería de Resistencia.
Cuando uno inicia el recorrido para llegar a la escultura, es como transitar el pasillo que está flanqueado por los famosos Mármoles Inacabados, y que a modo de obertura nos conducen a la obra cobijada en la Galería de la Academia en Florencia.
Pasear por el Parque de las Esculturas, es adentrarse en una especie de paraíso terrenal, tanto por la colección, como por el orden, la higiene, el silencio, la tolerancia entre los visitantes, la falta de la invasiva música que minimiza la capacidad visual y el vuelo mental al ver tamaño conjunto de bellezas producto de la mano humana y la impecabilidad de las obras de las que el orgullo de los chaqueños incluye un compromiso tácito de no vanzalizarlas.
No vimos ni en el Parque ni en las calles una sola obra amputada o con inscripciones absurdas o groseras, como es la tristísima realidad en nuestra querida Mendoza; a propósito les recuerdo una vez más el sacrilegio de la decapitación de la famosa escultura La Pureza, sita en el Rosedal que lleva años sin ser restaurada, o el robo de la lámpara de la figura precisamente llamada Lampadaria, ubicada en la Isla del Lago Espejo.
Sí, caminar el Parque 2 de Febrero en la lejana Resistencia es adentrarse en un mundo casi mágico aunque muy real y hecho por humanos similares a nuestros comprovincianos pero carentes de violencia y sí provistos de sensibilidad y amor en beneficio de la comunidad toda
UN MUNDO COMO DEBIERA SER EL MUNDO, PERO QUE NO LO ES.
El otro atractivo insoslayable es la visita al más que famoso bosque IMPENETRABLE, declarado patrimonio nacional; un ecosistema de bosques nativos en la región chaqueña semiárida de Argentina, que abarca alrededor de 4 millones de hectáreas:
EL PARQUE NACIONAL EL IMPENETRABLE, creado en 2014, tiene una superficie de 128.903 hectáreas. El Impenetrable también incluye una parte del este de Salta, el oeste de Formosa y el noreste de Santiago del Estero
La impenetrabilidad depende de la flora provista casi en su totalidad de espinas de los más diversos tamaños y peligrosidad y sólo desafiada exitosamente por el Chivo, único mamífero que se adentra sagazmente incluida sus crías y comen las hojitas tiernas de planta erizadas de espinas:
Al andar se observan numerosos senderos labrados por los hábiles caprinos, en tanto que el gobierno hubo de trazar algunas picadas para facilitar la entrada de los habitantes quom de selva adentro montados en sus motos.
Equinos y vacunos tampoco lo enfrentan.
El foco principal de la etnia es el pueble de Miraflores, sito a 300km de la capital por ruta nacional; a la entrada llama la atención una humilde construcción de ladrillo en cura pared frontal se lee: Entrada a las 10.000 hectáreas de territorio Quom, como puede apreciarse en la foto ad hoc:
Además son claramente visibles dos Whipalas, símbolo de la vida en armonía. Es la insignia más conocida de los pueblos originarios del Abya Yala (América).
Abya Yala es un término de origen kuna que significa "tierra madura", "tierra viva", o "tierra en florecimiento". Es el nombre que el pueblo kuna, originario de Colombia y Panamá, ha utilizado para referirse al continente americano desde antes de la conquista europea.
Los qom son refugiados sin vallas físicas sino por discriminación y menosprecio; pacíficos, cabizbajos, de tez morena, sostienen comercios elementales en su pueblito tales como carnicería, almacén de ramos generales.
Sus viviendas están hechas de la misma quincha utilizada por nuestros huarpes en Lavallle, es decir mezcla de barro y paja, tal cual el adobe, pero también forma de tabiques con las que a guisa de paredes levantan sus moradas, muy ventiladas, a tal punto que no tienen puertas sino que protegen su intimidad mediante una simple tela blanca que oficia de cortina pero que permite la entrada y salida del viento.
También utilizan unas bóvedas ovoides pero de base plana, hecha de adobes de más o menos 1.5m de altura y con dos aberturas, anterior y posterior para el libre paso del aire.
Pero no faltó el político cuyo nombre no pude averiguar, que decidió construirles viviendas según criterio propio, demagogo e ignorante, y se las hizo de ladrillo con una puerta y una pequeña ventana, techo con chapa de zinc.
Resultado, NO LA S UTILIZAN, y continúan felices en sus utilitarias construcciones fruto de vivir la sequía, el calor y el viento. Se lo observa claramente en la foto, en primer término la vivienda "moderna" y atrás a la izquierda, la adecuada para ellos hecha con sus propias manos.
Dadiva política que siempre implica desprecio y discriminación; debiera estar prohibida y castigada.
Afortunadamente para los nativos, desde el año 2015 rige la Ley Provincial 6691/10 de Educación Bilingüe Intercultural, lo que constituye un paso fundamental para el real progreso de las etnias nativas. La única forma para avanzar es mediante el intelecto; la cultura y no las armas ni el ocultamiento en el bosque les permitirá alcanzar de verdad la condición de ciudadanos de hecho y no de palabra.
Colofón
Hemos tenido la suerte de conocer un pedazo casi ignoto de este enorme país, mezcla de razas, costumbres y conductas; riqueza y pobreza; arte para el espíritu y artesanía para sobrevivir. Paz en el agreste entorno boscoso y también en la vorágine de la ciudad; de lento caminar los nativos y apurados los que han caído como presa de la instantaneidad.
Dos mundos que se contactan pero que no se mezclan, el cartel con la expresión Territorio Quom, es clara demostración de lo dicho.
Pero deben respetarlos como ellos prefieren vivir, sí proveerles de servicios elementales como es el suministro de agua potable y de estaciones de comunicación, de visitas sanitarias frecuentes, vacunas y por sobre todo educación.
El lema sería: "Vivir y dejar vivir, no somos mejores los blancos, somos diferentes y debemos respetar a ultranza las diferencias".
Me declaro defensor y admirados de todas las etnias originales de nuestro amplio país, muchas de las cuales he tenido el impulso y la suerte de conocer y de ir incorporándolas en mi fuero íntimo como hermanos que son.
Por último, dedico estas palabras a mi gran amigo Roberto Petrich, quien ofreció llevarme al Chaco, y así lo hizo, como experto estoico volante. Manejó 3 mil kilómetros para que yo pudiera hacer realidad una ilusión.