El día que nos convertimos en viejos chotos y no la vimos venir
El consumo de contenidos está muy diversificado, pero a la vez la creación de los mismos es más específico. Algunos creen que el streaming es el futuro, pero hace rato que ya está siendo el presente.
Las cosas avanzan a su ritmo y el tiempo es tirano, sin esperar por nadie. Muchas veces el avance de cierta cuestiones es tan rápido que ni siquiera da tiempo para que nos demos cuenta que nos quedamos atrás. Seguramente me está sucediendo también en mi profesión, pero como es más complejo que uno vea lo propio, notarlo en el otro resulta más fácil de identificar.
Esta semana escuchaba un programa de radio en el que se comunicaban con un periodista con alto perfil mediático en los medios tradicionales (radio y televisión), con el cual comentaban experiencias en el streaming. En un momento lanzó uno frase que me quedó dando vueltas. "El streaming es lo que se viene", dijo.
Ese periodista ya se quedó atrás y no se dio cuenta. El streaming no es lo que se viene, el streaming ya es una realidad instalada hace mucho y es la forma de consumo que eligió una amplia porción de personas, especialmente de las nuevas generaciones.
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El error es creer que el streaming "es lo que viene" porque vos no lo estás aplicando, cuando en realidad es un formato que está tan desarrollado que muchas personas llevan décadas de crecimiento en este espacio. Muchos partieron con transmisiones en la habitación de su casa y hoy son capaces de organizar eventos masivos. Quizás los ejemplos más claros son los eventos del español Ibai Llanos, quien llevó su espacio en Twitch a megaeventos llenando estadios como el Camp Nou.
En Argentina también proliferaron en los últimos años los canales que emiten contenidos exclusivos para plataformas de streaming con muy buenos resultados.
Sin ir más lejos, las generaciones sub50 en un amplio margen dejaron de consumir la televisión tradicional y buscan contenidos específicos en plataformas como Netflix, Amazon Prime, Starplus o Youtube. Esta última, dejó hace tiempo de ser un espacio para simplemente subir videos y creció para convertirse en una plataforma que tiene una oferta de contenidos inagotable, para todos los gustos, de todos los tipos y de alta calidad. Por ejemplo, hoy un padre prefiere pagar la plataforma Premium de Youtube o pagar alguna en lugar de contratar televisión satelital o por cable para tener el Cartoon Network u otros canales que antes eran los preferidos.
Los medios tradicionales no lo vieron venir y llegaron tarde. De hecho, para un streamer o youtuber no resulta ni siquiera atractivo que le ofrezcan un espacio en la televisión tradicional, porque no lo necesita y sería retroceder en un camino que ellos empezaron hace años, que es la segmentación de contenidos. Incluso, económicamente no les resulta atractivo, porque en sus espacios tienen libertad y consiguen recursos que les permiten crear a su gusto y medida.
Por eso, pensar y decir que el "streaming es lo que viene", es una muestra clara que el tren pasó, no supiste siquiera que estaba en la estación y ya no te subiste. Tampoco se trata de llevar lo que hice siempre en la televisión a otro espacio de tranmisión, es otra forma de entregar contenidos, de crearlos y de entenderlos. Acaso alguien piensa que un Luisito Comunica (por poner un ejemplo exagerado) con más de 40 millones de subcriptores va a necesitar de un canal de televisión. Todo lo contrario, son los medios "masivos" los que necesitan de estos creadores, pero no parecen tener interés en ser parte de algo que los motivó a hacer cosas diferentes.
Tanto es el avance del streaming y de los creadores de contenidos, que en todos los grandes eventos están presentes y son figuras. Quizás los que nos criamos con medios tradicionales no llegamos a entenderlos y no los reconocemos, pero son verdaderas celebridades que trascienden fronteras.
Así las cosas, mientras algunos creen que "el streaming es lo que viene", la nueva forma de consumo de contenidos sigue creciendo y no espera a nadie.