Luján sostenible: el desafío de asumir el rol que nos toca

El primer interrogante o planteo que debemos hacernos, es sí; manteniendo las conductas que tenemos hoy como sociedad, las costumbres sobre la forma en la hacemos uso del suelo y de los recursos naturales, la legislación y planificación actual, ¿somos sostenibles a 20 años? ¿Lo somos? ¿Es posible que Mendoza y Luján sigan creciendo de la misma manera sin cambiar nada? Debemos dejar de anclar nuestro futuro en la planificación de la Mendoza de hace 100 años, y en cambio asumir el mismo papel que jugaron quienes planificaron Mendoza en ese tiempo, para abocarnos de lleno a repensar el crecimiento sostenible de nuestra provincia para los próximos 100 años.

Los mendocinos llevamos en la sangre la impronta del trabajo y la adaptación a la naturaleza.

En las escuelas se enseña a nuestros hijos, que todo lo que hoy podemos apreciar es el producto del esfuerzo de generaciones y generaciones que, durante siglos, han transformado un desierto en oasis. Nos criamos jugando con barquitos de hojas en las acequias de las calles o surcos de riego. Lo que creemos que existió desde y para siempre, ha sido producto de esa planificación y cuidado de quienes han habitado este lugar. No podemos descansar por siempre en esa planificación, debemos asumir el rol que nos toca hoy.

Y de esto se trata justamente el programa Luján Sostenible, de indagarnos y cuestionarnos; si no existe una mejor manera de hacer lo que actualmente estamos haciendo, y desde ese interrogante es que empiezan a surgir soluciones concretas, de efectos reales y genuinos, como la reciente reglamentación municipal que obliga a los nuevos barrios de Luján, cuyos terrenos tengan derecho de riego, a presurizar y tecnificar todo su riego, o el novedoso acuerdo con los vendedores y fabricantes de piscinas para que no se venda una sola pileta sin el viaje de agua en camión para su primer llenado y sin el equipo de filtrado o el compromiso del municipio para reconvertir el riego de sus espacios, entre otras acciones que venimos tomando. Todas estas medidas más las que vamos a presentar en las próximas semanas, por sí solas no cambien la historia, pero en su conjunto tienen una potencia enorme para empezar a torcer el rumbo que llevamos como departamento y provincia.

Hoy tenemos que renovar ideas

Es una realidad que nuestro planeta nos pide conciencia y atención, el mundo así lo viene considerando e incluso nuestra Constitución Nacional lo establece como derecho fundamental en su Artículo 41, el gozar de un ambiente sano, equilibrado, apto para el desarrollo humano y para que las actividades productivas satisfagan las necesidades presentes sin comprometer las de las generaciones futuras; y tienen el deber de preservarlo, lo cual no es otra cosa que la definición de Desarrollo Sostenible.

A los lujaninos también nos compromete nuestra historia. Somos un departamento icónico en la vitivinicultura, somos el lugar elegido por miles de mendocinos para vivir con sus familias en un entorno mágico; somos un destino turístico y al mismo tiempo somos un distrito industrial. Todo lo que significa Mendoza como provincia, tiene su reflejo en Luján.

Luján hoy se debate ante la oportunidad de explotar su diversidad y ante la dificultad de su baja densidad poblacional, que atenta con una buena prestación de servicios y desarrollo. A diferencia de Godoy Cruz o Ciudad que tienen aproximadamente 160km2 de territorio, Luján cuenta con 4800km2 aproximadamente (densidad urbana: Godoy Cruz 4800 habitantes por km2, Carrodilla 1300 y Agrelo 38 habitantes por km2) situación que torna sumamente complejo la prestación y accesibilidad de los servicios tanto público o privados, pero es esta misma extensión territorial la que le permite tener una diversidad de actividades económicas, que en cualquier otro departamento serian excluyentes y contrapuestas, y en el nuestro conviven, lo que representa una gran oportunidad para el desarrollo económico de Luján y de Mendoza.

Dentro de estas variables, es que estamos pensando el Luján para las próximas generaciones, uno que garantice y explote al máximo el potencial de actividades económicas del departamento, generando verdaderas oportunidades para sus habitantes, pero realizándolo de manera sostenible, buscando elevar la calidad de vida de cada uno de los lujaninos, con un ordenamiento territorial apuntado a densificar aquellos huecos urbanos y sectores que ya cuentan con servicios y evitando seguir extendiéndonos en el territorio en detrimento de los cordones verdes y áreas productivas.

Para el cumplimiento de estos objetivos es que diseñamos un programa que se destaca por la simpleza, el cual presentaremos en sociedad en las próximas semanas. Decidimos bajar los Objetivos de Desarrollo Sostenible al terreno, ponerlos al alcance de la gente.

¿Qué es Luján Sostenible?

Es adoptar el compromiso de trabajar en el crecimiento sostenible del Departamento, planificando participativamente e informando a todos los actores involucrados, comenzando por los propios funcionarios y empleados municipales, siguiendo con los vecinos y organizaciones de la sociedad civil, emprendedores, comerciantes, etc.

Planteamos un desarrollo progresivo: Existen objetivos y acciones de corto, mediano y largo plazo. La Municipalidad se compromete a adoptar progresivamente todas las medidas de acuerdo a sus posibilidades, para también darle un piso de realidad y pragmatismo.

El primer paso, lo damos nosotros desde el municipio, porque es necesario dar el ejemplo que genere el acompañamiento de los vecinos.

Es un objetivo muy ambicioso por el resultado, pero con una enorme ventaja, si bien algunos proyectos requieren de inversiones considerables, la mayoría de las acciones son de participación directa con muchos esfuerzos menores por parte de todos.

La planificación también es simple. Establecemos los ejes de trabajo, partiendo de la situación actual para plantearnos objetivos y compromisos.

Compromisos y acciones por ejes

En cada eje seleccionado como campo de acción de Luján Sostenible se destacan, en primera medida, la situación actual respecto a dicho eje, los objetivos y los compromisos que asume la Municipalidad de Luján de Cuyo para transitar el camino de la sustentabilidad y, luego, las medidas que involucran la participación de otros actores de la comunidad.

Este es el desafío, solo se trata de asumir el rol que nos toca. Como no vamos a ser capaces de animarnos a repensar a Luján a repensar a Mendoza, todavía estamos a tiempo, solo depende de nosotros.

Sebastián Bragagnolo (Abogado y Magister en Dirección de Empresas)

Intendente de Luján de Cuyo