Lo siento, pero no te van a votar

Argentina se enfrenta a un nuevo proceso electoral. Proceso que se va a llevar a cabo dentro de un contexto económico muy difícil con pérdida del valor real del peso argentino (no importa cuando leas esto), alta inflación, pérdida de legitimidad del oficialismo, intromisión de un candidato "outsider" como Javier Milei que rompe el juego de los binomios partidarios y propone un nuevo clivaje social: populismo anti-populismo. 

Se supone que en cada elección los candidatos y candidatas buscan convencer a la ciudadanía de que son la mejor opción para que los elijan. 

Son el faro (como propone Larreta) que ilumina el camino generando esperanzas de un mejor mañana, en un electorado que está apático con la política y un poco cansado de tanto chamullo de campaña. Ergo, muchas personas deciden no votar, o en el contrasentido, deciden votar por la que consideran la opción menos mala, o deciden votar por opciones más radicalizadas, opciones anti casta política, anti establishment, anti casi todo.

En este artículo enumeramos 10 errores que suelen cometer los candidatos y las candidatas en una elección provocando que la ciudadanía decida no votar por ellos:

1. Falta de proyecto: Los candidatos no siempre son claros sobre sus propuestas y sus planes de gobierno. Esto puede generar desconfianza en la ciudadanía, que prefiere no votar por alguien que no sabe exactamente qué piensa hacer. No hay un horizonte, no hay una visión de futuro o camino que indique hacia dónde debemos ir. Si no hay certezas de propuestas, tampoco hay contratos válidos que la ciudadanía debe hacer con los políticos. Lo siento, pero no te van a votar.

2. Incumplimiento de promesas: En muchas ocasiones, los candidatos prometen cosas que no pueden cumplir. La ciudadanía se da cuenta de esto y pierde la confianza en ellos. Prometen para lograr el objetivo que es ganar la contienda electoral, pero a la hora de gobernar se olvidan de las mismas. En la rendición de cuentas que hace la ciudadanía, se percibe que nada se ha hecho incumpliendo los compromisos adquiridos y comprometidos ¿para qué prometen si saben que no van a cumplir? Lo siento, pero no te van a votar.

3. Corrupción: Para los argentinos la corrupción es el principal problema que hoy enfrenta la Argentina detrás de la inflación. La corrupción mata, la corrupción erosiona la credibilidad en las instituciones del Estado haciendo aún más vulnerable la relación entre representantes y representados. La transparencia debe ser una acción fundamental a la hora de gobernar para lograr mejores formas de gobierno y mejores democracias. Si un candidato se ve involucrado en un escándalo de corrupción debo decirte que: Lo siento, pero no te van a votar.

4. Desinterés por las necesidades de la ciudadanía: Los candidatos deben estar en contacto con la realidad de la ciudadanía y ser conscientes de sus necesidades. Según estudio de Zuban & Cordoba el 84% de los argentinos coinciden que la clase política debe escuchar más. Pero hay que hacerlo todos los días, como un ejercicio para mejorar la vida de las personas, no como proselitismo político. Hay que hacerlo desde el día uno que se está gobernando, o si son candidatos, hacerlo con anticipación para que la gente realmente crea que se está haciendo por convicción y no por oportunismo. Si no lo hacen lo siento, pero no te van a votar.

5. Falta de liderazgo: Los ciudadanos buscan líderes capaces de tomar decisiones difíciles y de liderar con el ejemplo. Sin embargo, en ocasiones los candidatos políticos parecen más interesados en mantener su posición que en hacer lo que es mejor para el país. Se los ve más preocupados en sus intereses personales que en hacer las cosas por el bien común. Sin liderazgo aglutinador que marque el camino, el derrotero simplificador por donde transitan nuestras democracias se tornan cada vez más difusas. Lo siento, pero no te van a votar.

6. Desconexión con la realidad: Muchos candidatos parecen vivir en una burbuja, alejados de los problemas reales de la ciudadanía. Esto hace que los votantes sientan que no están representados por ellos. Hay que ocuparse y generar soluciones a los problemas que enfrentan los ciudadanos todos los días. Los votantes quieren candidatos que entiendan sus necesidades y que se preocupen por ellos. Los políticos que se muestran indiferentes a los problemas de la ciudadanía generan desconfianza y desinterés. Por eso debo decirte que lo siento, pero no te van a votar.

7. Invalidar la data: Si un candidato piensa que las encuestas no sirven para nada, o que ir al territorio y conversar con la gente es perder el tiempo, debo decirte que: lo siento, pero no te van a votar. Todo tipo de insumo estratégico que podamos recolectar en nuestra campaña para obtener información y conocer cómo piensa nuestro electorado, qué necesidades tiene y cuáles son sus principales preocupaciones, serán de muchísimo valor para elaborar una campaña estratégicamente planificada.

8. Candidato "todólogo": Si sos de esos candidatos que piensan que todo lo saben, que pueden opinar de todos los temas del mundo mundial, desde la guerra ruso-ucraniana, pasando por la caída del Silicon Valley Bank, hasta quién ganó en Gran Hermano y por qué: Lo siento, pero no te van a votar. Es fundamental la co-construcción con la ciudadanía de políticas públicas liderando equipos multidisciplinarios para poder abordar con mejor criterio cada problemática. Debemos reconocer que no conocemos todos los temas, que hay cosas que se nos escapan de las manos, y tratar de opinar de todo no te hace buen político. Menos, es más. Identificar nuestras fortalezas, y abordar con mucho profesionalismo cada temática para ser coherentes con la ciudadanía ayudando a construir legitimidad.

9. Tiempo: La elección es en dos semanas y me acabo de acordar que soy candidato, o peor aún, soy gobernante y hace 4 años que estoy en el cargo y faltando un mes para las votaciones me pongo a arreglar los baches: Lo siento, pero no te van a votar. Es clave la responsabilidad del cargo por el cual se es candidato o por el cargo que se ejerce. Cabe resaltar que muchos políticos se olvidan que fueron elegidos por y para el pueblo. Por eso es menester la responsabilidad para ejercer con profesionalismo y convicción la gestión de la "cosa pública".

10. ¿Consultores en comunicación política? ¿Para qué?: Las campañas electorales son un caos y los candidatos y las candidatas no deben entrar en ese rol de administradores de la campaña porque perdieron la elección antes de comenzarla. Tampoco deben ningunear el poder que hoy en día tiene la comunicación, estratégicamente planificada, en un contexto altamente polarizado donde convergen múltiples agendas. Es por caso que la asesoría se vuelve una pieza fundamental para ordenar el caos, gestionar equipos, planificar la estrategia, comunicar, analizar, interpretar y hacer de la disciplina, de la adaptación y de la anticipación elementos fundamentales para las contiendas electorales. Sin consultores especializados en la materia lo siento, pero no te van a votar.